Hola, estoy aqui con una nueva historia de Hunter X Hunter.
Antes que nada aclarar que los personajes no me pertenecen a mi, sino a Yoshihiro Togashi.
Esta historia estuvo rondando en mi cabeza hace varios años y cualquier similitud con otra es pura casualidad o simplemente es que nuestros cerebros e imaginaciones estan conectados por algo que en estos momentos desconosco.
Añadir que en esta historia Kurapika es mujer. (Requisito necesario para la trama).
Si esto no supone un inconveniente para usted estimado lector, le dejo con la historia
IceKura
Blanca habitación
Capítulo 1
"Thumb-thumb" "thumb-thumb"
Se despertó con el sonido de los latidos a su izquierda… el subir y bajar de su cuerpo… Era una sensación agradable, por lo que no se movió, permaneciendo en su lugar…
– Ya despertaste, Kuruta.
No era una pregunta sino una afirmación, reconoció esa voz, lo cual la sobresaltó, abrió los ojos mostrando a dos hermosos rubíes y miró molesta hacia arriba, encontrándose con los ojos de obsidiana, se encontraba recostada encima de su peor enemigo, como era eso posible, luego observó a su alrededor…
– Ninguna salida, también bloquearon nuestro nen – Dijo Kuroro respondiendo a las preguntas mudas de la Kuruta.
Efectivamente como Kuroro había dicho, la habitación en la que se encontraban no disponía ni de puertas o ventanas que los conectasen al exterior. Sin embargo esa blanca habitación le incomodaba en cierto modo, no solo por el hecho de que su nen fuese bloqueado…
Esta lo volvió a mirar, frunciendo el ceño e intento alejarse de él cuanto pudo, pero se detuvo al percatarse de las cadenas que ataban sus manos y sus pies a la pared, detrás de Kuroro Lucifer obligándola a permanecer recostada.
En ese momento reconoció el lugar, desde que despertó había sentido una extraña sensación de familiaridad, ahora sabía el por qué, y también sabía que no podría escapar…
– Sabes algo de este lugar, Kuruta – nuevamente una afirmación por parte de Kuroro. Kurapika lo observó sorprendida y luego desvió su mirada hacia otro punto de la sala… – Cuéntamelo – ordenó sin alzar la voz.
Kurapika simplemente lo ignoró, observando más detalladamente las cadenas. 15 cm de largo. Tal vez podría llegar a un acuerdo…
Kuroro, sin embargo, la observó con curiosidad. Kurapika no le había respondido, pero las cadenas tal vez tuviesen algún secreto oculto, así que en lugar de preguntar por ellas, decidió averiguarlo por sí mismo.
– ¡Tengo una petición! – anunció de pronto Kurapika a la nada con su voz varonil… Kuroro sorprendido la observó…
*Y, ¿Cuál es?* pidió una voz que resonó por toda la sala…
– Si pudieran cambiar las cadenas de lugar, verán, esta es una posición un tanto incomoda y acabaré con dolor de espalda, si…
*Comprendemos lo que intentas decir Kurapika, cambiaremos las cadenas para que os resulte más cómodo, pero, estas encogerán* Interrumpió la voz.
De pronto los brazos y piernas de Kurapika se movieron por si solos y las cadenas siguieron sus movimientos. Cuando al fin se detuvieron Kurapika había pasado de encontrarse recostada sobre el pecho de Kuroro y entre sus piernas a estar sentada junto a él, aunque sus brazos todavía seguían entrelazados por las cadenas.
–Se lo agradezco… – dijo Kurapika mirando hacia abajo sin ver a Kuroro, quien la observaba intentando descifrar la relación entre el Kuruta y la persona que instantes antes había hablado…
–Esto es una prisión… – dijo de repente Kurapika, sorprendiendo a Kuroro por un instante, pues comprendió que simplemente estaba respondiendo a su petición – …es imposible salir de este lugar sin su permiso. Solo se puede abrir una puerta desde el exterior… Pero ninguna de tus arañas podrá llegar hasta aquí.
–Explícate – pido Kuroro
–Este lugar está fuera de su alcance, de cualquiera de los que dejamos ahí… –
Kuroro pareció comprender lo dicho. Y entonces otra pregunta se formó en su cabeza…
– Entonces ¿Cómo…
– Hace tiempo me encerraron en una de sus celdas. Por ese motivo sobreviví a la masacre de la tribu – Interrumpió Kurapika
–Comprendo– dijo Kuroro –También sabes el hecho de por qué estamos encerrados juntos – Afirmó nuevamente…
–Creo tener un idea del por qué…– Dijo Kurapika interrumpiéndose a sí misma, mientras se agarraba el pecho con su mano libre –Malditos…– se quejó pesadamente tras un temblor…
– ¿Qué te…– Kuroro no tuvo tiempo de formular la pregunta, que recibió una potente descarga eléctrica, pero no lo suficiente como para dejarlo inconsciente, seguida de otra idéntica que lo obligó a caer, quedando semiconsciente en el regazo de Kurapika.
– ¿Pero, que ha…?– Una nueva descarga golpeo esta vez a Kurapika, haciendo que se diera de espaldas contra la pared…
Kuroro se incorporó nuevamente al lado de esta y de forma seria y mirándola a los ojos preguntó… – ¿A que vinieron todas esas descargas?
– Es su forma de decirnos, que ya basta de preguntas sobre este asunto…
Este primer capitulo es un poco corto, pero espero que les haya llamado laatencion lo suficiente como para seguirla y que dejen sus reviews
Nos vemos
IceKura
