Disclaimer: Los personajes de Fairy Tail no me pertenecen.

Advertencias: Puede contener lenguaje vulgar.

Aclaraciones:

-lalala- dialogo.

¨lalala¨ pensamientos

Lalala narración.

Personaje Principal: Juvia Loxar

Hecho: Adopción

Sumary: Después de una misión Juvia se encuentra con un perrito algo tsundere que le recuerda a cierto mago de hielo.

Notas del Autor: Este Conjunto de Drabbles participa en el reto:Mes de apreciación: Julio 2015 - Juvia Loxar del foro:Grandes Juegos Mágicos

¿Gray-chan?

¨Juvia no puede admitir eso¨ Pensaba escandalizada casi gruñendo. Gray había salido de misión mientras ella estaba en una y el problema erradicaba en que se había ido con Lucy, solos.

-¡Aaaaaaaaag!- Gruñó.- Todo es tu culpa Gajeel-kun.- Gritó enfurecida.

-Tsk.- Chasqueó la lengua el dragon slayer de hierro.- Yo no tengo la culpa de nada, mujer.

-¡Claro que sí!- Insistió.- Si no te hubieras distraído con el cliente y sus armas…

Y la imaginación de Juvia comenzó a andar:

¨A la mitad del bosque, Gray se acerca peligrosamente a la rubia:

–Luce…– La abraza de cierta forma comprometedora y se acerca a sus labios.

–Gra-ay…– Lucy se sonroja y cierra los ojos lentamente.¨

– ¡JUVIA NO PUEDE ACEPTARLO! –Gruñó. Mirajane la vio muy exaltada y se preocupó por ella.

–Are, are, Juvia ¿Por qué no sales a pasear para calmarte?– Le sugirió, la vio un tanto indignada por eso y luego suspiró.

–Juvia ira al parque. – Les comunicó. –Si Gray-sama pregunta por Juvia…

–Yo lo haré en persona. – Le prometió Mira.

Juvia trató de calmarse, pero imaginarse al mago de hielo con la maga de espíritus celestiales en ese tipo de situaciones… solo hacía que se enojara aún más. Por estar en su nube no se percató de que un perrito negro la estaba siguiendo. Al darse la vuelta, el canino se hizo el desentendido y la ignoró, ella lo vio extrañada pero decidió ignorarlo y seguir su camino.

Lo cierto era que el perrito se sentía a gusto con ella, porque tenía el olor parecido a su antigua dueña, solo que aún desconfiaba de los humanos. Juvia se dio cuenta de que la estaba siguiendo (aún) pero al voltear ese cachorro se volteaba y ponía cara de enojado. Después de varias veces de voltear ya le sonreía. Si lo pensaba bien, le recordaba a cierto chico. Se detuvo en un puesto de hot dogs y compró uno, con la intención de darle al cachorro. Él se acercó poco a poco a ella, la olfateó y luego le meneó la colita, le ofreció de su comida y este aceptó gustoso. Se sentó a su lado y le acarició el lomo.

–Sabes, inu-chan. –Le dijo al can, que al parecer le entendía.– Te pareces mucho a Gray-sama.- Le dijo con aire soñador y una tierna sonrisa.– A él tampoco le gusta que Juvia se le acerque, pero a él tampoco le gusta estar solo.– Le acarició las orejitas y le sonrió.– Bien, Inu-chan de ahora en adelante serás la mascota de Juvia.– Le dijo contenta.– Te llamaras… ¡Gray-chan!

Se marchó de ahí contenta, con un nuevo amigo. No muy lejos Gray y Lucy regresaban al gremio y el primero estornudó.

–¿No te habrás resfriado? –Preguntó Lucy.

–No, tengo la sensación de que han estado hablando de mí.– Dijo molesto y tallándose la nariz. Lucy rio un poco y por algún motivo se imaginó a Juvia con corazones pensando en Gray.

¨Solo espero que Gray-sama vuelva pronto¨ pensó Juvia jugando con Gray-chan.

Fin