Capitulo Unico
¿Cómo llegamos hasta estos estremos? Puede ser estremista, pero es necesario, tanto para mî como para tí.
Aun recuerdo que durante el colegio, siempre me mirabas desde lejos, aun que fingía que no lo sabía, esperando que te me acercaras y hablaras, siempre amable y con una sonrrisa encantadora, pero cuando lo hacias, tropezabas con tus palabras y fuertemente te sonrrojabas, con suerte lograbas pronunciar un Holaapenas audible y en el peor de los casos te desmayabas sin remedio. Cuando eso pasaba te creía rara, oscura, misteriosa, pero nunca me molesto, me gustaban las personas como tú. Eras de las pocas personas que no me temia, molestaba o descriminaba por ser huerfano y revelde.
Sabía pocas cosas sobre tí, como que tu nombre era Hinata Hyuga, que siempre fuimos compañeros de salón desde la primaria, pese a casi nunca hablarnos, que pertenecias a una prestigiosa familia, pero que nunca alardeabas o quitabas provecho de ser la heredera de todo un imperio, no eras muy sociable, pero tus dos únicos amigos, Kiba y Shino, hacian cualquier cosa por proteger tu hermosa sonrrisa. Te conocia poco, y no me importaba hacerlo tampoco, mis ojos y pensamientos giraban en torno a otra persona, que perdida de tiempo resultaba eso.
En ultimo año contaba con mas amigos, y te concideraba una de ellos, seguias siendo callada y timida, pero me parecía de lo mas tierno tus sonrrojos y tartamudeos, hasta ese día.
A la salida del instituto nos topamos con una pandilla, lo cual llevo a una pelea de todos contra todos, yo caí mal herido pero antes de recibir otro golpe, tu saltaste en mi defensa, aun a sabiendas de que sabías que no tendrías oportunidad contra mi atacante, y luego sucedío lo impensable para mí.
Unas dulces palabras llenas de significado salieron de tus labios, más fluídas y decidídas de lo que núnca se habían escuchados, el tiempo parecía haberse detenido, haciendome olvidar del dolor de mis heridas, mientras un calor reparador inundába mi corazón, borrando todo rastro de las heridas mal curadas que tenía en él, concluyendo con las 5 palabras más bellas que haya alguna véz escuchado: Por que yo te amo.
Pero toda esa calidez que me rodeó, fue súbitamente cambiada por una impotencia, miedo y odio inigualable pocos segundos más tarde, cuando luego de unos pocos segundos retubara un fuerte estruendo y tu calleras tiñendo el suelo del rojo que brotara de la herida que te habian causado.
Nadie se explicaba de donde saque las fuerzas para levantarme y acabar con todos ellos, en especial con ese aquel que se atrevió a lastimarte, pero pese a querer acabar con su vida, no lo hice y en ultimo momento me detuve, sabia que a tí no te hubiera gustado, y no quería que a consecuencia de eso cambiaran tus sentimientos.
Luego de eso tuve varias pistas para darme cuenta del cambio que sufrí en mi interior, despues de escuchar tus palabras, pero aun así no lo quería ver: como el hecho de no permitir que en el hospital traten mis heridas hasta saber sobre tu estado, o no separarme de tu lado una véz que despertaste, el miedo que se negaba a abandonarme cuando creía que te perdería o los celos apenas controlados cuando Kiba se te acercaba y abrazaba más de lo que un simple amigo harìa. Pero yo no lo comprendîa, seguía creyendo que se trataba de gratitud y culpabilidad por lo que te había ocurrido.
Pasado las semanas te dieron el alta del hospital y cometí el error más grande de toda mi vida, luego del festejo que se organizo por tu recuperacion, te pedí un momento de tu tiempo para hablar a solas, te recordé las palabras de ese día y te agradecì por cada una de ellas junto a tus sentimientos, tu rostro fue iluminado por una sonrrisa tan bella que me estremecio por completo, pero aun más grande fue el remordimiento que sentí, cuando vi marchitarse esa sonrrisa de tu rostro al tener que rechazarte creyendo amar a otra persona.
Pero como era de esperarse de tí, no te alejaste de mi lado, asegurando que no te dolía mi rechazo, pero yo dabía que mentías y de las làgrimas de dolor que derramabas en los hombros de Kiba, siendo él quien te consolaba del dolor que yo te provocaba, y un agudo malestar en la boca del estómago se hacía presente junto a una punsada en el corazón cuando te pensaba en brazos de otro. Pero tontamente me decía que era a causa de ser yo quien te provocaba ese sufrimiento, segandome a una verdad que muchos intentaron hacerme ver.
Paso el tiempo y nos encontrabamos en la misma universidad estudiando distintas carreras, pero siempre juntos nuestro grupo de amigos, ya había varias parejas formadas y entre ellas estaba a quien yo creí que amaba, pero el verla con otro no me dolia como creí que lo haría, es más, me gustaba verla feliz junto a quien siempre amo, y buscando la explicaciòn del por que mi alegría por ella descubrí que mi supuesto amor por ella no pasaba de una simple obseción infantil y con ese descubrimiento vino uno aun más grande y revelador, cuando al instante se vino tu rostro a la mente junto a una fuerte oleada de sentimientos.
Me había enamorado de tí.No sabía desde cuando o como sucedío, pero esta vez no había error en verdad te amaba.
Gracias a los horarios de tu carrera de abministración y la mía de economía, coincidíamos en varias clases, por lo que las aprovechaba para acercarme nuevamente a tí de a poco, ya que nos habíamos distanciado, pero a las pocas semanas me anunsiabas muy entuciasmada tu relación con el futuro veterinario, Kiba había luego de mucho esfuerzo tenerte de pareja, y por más dolor que sentía al saberte a su lado y no del mìo, con la mejor de mis sonrrisas te deseè exito en tu nueva relación.
Esa noche conocí los efectos del alcohol en mi cuerpo, mientras lamentaba lo idiota que habîa sigo durante todos esos años y jurando que a la primera falla del pulgoso, te traería a mi lado y nunca más te dejaría ir.
El tiempo volvio a pasar y con el los años, viendonos todos graduados y triunfando laboralmente, y pese a que me alegraba por tu felicidad, siempre esperaba que él te fallara, cosa que para mi desgracia y tu alegría no sucedía.
Yo tenía una que otra aventura intentando olvidarte, incluso me marche al extranjero un año con la excusa de capacitarme mejor, pero nada resultaba, ni las mujeres, la distancia o el tiempo, cada día encontraba un motivo nuevo para enamorarme más de tí, ya sea tu amabilidad, elegancia, dulzura o belleza, tu eras única y no podía ni quería cambiar eso.
Un día mientras estaba en el trabajo, llego una invitación que hizo darme cuenta que te perdería para siempre, recuerdo haberme encerrado en esa oficina todo el día, canselando cuanta reunión tenía planeada, sin importarme nada, no estaba en condiciones de recibirle a nadie, y todo por el significado de esa invitación, la futura uniòn Inuzuka Hyuga, mi mundo nunca me parecio tan oscuro como el saberte casada proximamente con él.
Finalmente el día había llegado, te veías sumamente hermosa con ese vestido blanco y esa sonrrisa que envidiaría cualquier angel que ae acercara, nuestras miradas se cruzaron y distinguí lastima en tus ojos
Días atras fui a buscarte intentando hacerte entrar en razôn diciendote de mis semtimientos y que tu lugar era a mi lado, pero no podía ser según tus palabras, me habías olvidado y enamorado de tu futuro esposo.
Formulaste un lo siento y un graciaspara luegomirar hacia el frente sonrriendole a tu futuro esposo, quien apenas podía estarse quieto por la alegría contenida. Pero yo lo sabía, ese era mi lugar, yo debîa ser quien estaba hay parado, quien recibía tu mano, a quien dedicaras esa sonrrisa, quien a tu lado esperaba ese glorioso felices por siempre.
La ceremonia empezó entre sonrrisas y lagrimas de alegrìa, yo solo me dignaba a cerrar fuertemente las manos esperando que te retractes y vengas a mi lado, pero no fue asi, tu lo habías aceptado u yo solo me limite a decir para mí: esto no debió ser asi.
Al instante unos sujetos fuetememte armados irrumpieron en la iglesia antes de que la ceremonia termine, alzandoce con cuanto objeto de valor poseyera los invitados, pero antes de marcharse querian um rehèn que les asegurára un escape segúro, y pese a loa esfuerzos de todos por impedirlo, tu fuiste a quien eligieron de escudo y te llevaron con ellos, dejando solo llanto y desesperacion en todos.
De eso ya había pasado dos meses, sin pistas o noticias tuyas, tu familia llora, tus amigos te buscan y Kiba se lamenta no haberte protejido lo suficiente, mientras que a mi me tranquiliza el saberte segura, triste pero segura, aun que ese es mi secreto.
Y aqui estoy nuevamente, como todos lo dìas a las afueras de la ciudad en esta pequeña cabaña en una de las propiedades de mi familia, preparando una bandeja de comida con algo de agua fresca, camino con la bandeja en manos hasta el final del camino y entro a la ultima habitaciòn, la abro lentamente y coloco sobre una mesita al lado de la cama los alimentos. Miro al tierno angel que duerme sobre el lecho y tomo aciento a su lado, dejandome cautivar por tan bella imagen.
Te vez pálida y ojerosa y me duele el tener esposada a la cama para que no te alejes de mi lado, pero solo sera temporalmente, hasta que aceptes que me perteneces y que tu lugar es a mi lado, y asegurandome que sea para siempre.
Despierta mi bello angel, es hora que te alimentes -le digo suavemente mientras me inclino y beso tus secos labios - debes alimentarte bien para cuando se presente el fruto de nuestro amor-digo al separarme de ti mientras paso una mano por tu aun vacio y plano vientre.
Por que sí, yo lo planeè todo desde el proncipio, tu secuestro en caso de que no te arrepientas de casarte, la cabaña con todo lo que necesites para tenerte segura y cómoda, tu primera vez a la luz de la luna bajo un colchon lleno de petalos rojos y velas aromáticas, cada una de nuestras siguientes noches juntos, las visitas semanales de un medico de confianza que se encargue de tu salud y alguna señal de tu futuro embarazo y hasta la llegada del proximo heredero/a Uzumaki Hyuga,todo con tal de volver a enamorarte.
Tus ojos se abren peresosamente, mostrandose vacios y sin brillo, temerosos de mi presencia, pero mas alla de eso no hay respuesta de tu parte, desde hace días ya no me pides que te libere, sabes que no lo hare. No suplicas que me detenga cuando estamos juntos, sabes que solo me altera y me vuelvo brusco. Solo cumples con mis pedidos por que sabes que es por tu bien y el de nuestro futuro hijo/a.
Pero no te pido que me mientas, se que aun me temes y no quieres aceptar tu destino a mi lado, que aun sientes algo por el otro y que sabes el porque actúo de esta forma, tan pasional y extrema. Pero no me molesto contigo por eso, por recupera tu amor soy más pasiente de lo que fui en toda mi vida. Por que se que tarde o temprano volveras a amarme como alguna vez lo hiciste y como hoy yo lo hago.
Te conquistare de a poco y traere de vuelta tu bella sonrrisa, dejaremos atras al pasado y las lagrimas que hoy derramamos, luchare por nuestro futuro juntos y por que no quieras alejarte de mi lado. Por que tu me apoyaste desde la distancia en el pasado, me defendiste de la muerte aun a costa de la tuya, le diste un motivo a mi vida y una razon por la que luchar.
Por que me enseñaste lo mejor y peor de mi persona. A sentirme amado y amar con locura, y a ser pocesivo y egoista por primera vez en la vida. Por que hasta este extremo he llegado por ti, por que hoy se en lo que me he convertido.
Por que por tí soy un egoista enamorado.
Espero les haya gustado es la primera historia que publico aqui, la dedico a mi mejor amiga ya sabe ella de quien hablo, que me animo a subirla.
También aclaro que esta historia también esta en otra pagina bajo otro seudónimo. Pero soy la misma persona. Por lo que no hay fraude alguno.
Hasta la proxima.
Bey bey.
