Mi primer fic de Rise of the Guardians!

Recién vi la película y no pude dejar de pensar en ideas para fics; así que espero escribir algunos más. ¿Qué puedo decir? Adoré a Jack Frost.

Disclaimer: Nada mío, como de costumbre.

Ellos dicen que no soy real.

Ellos dicen que no soy real. Que soy una costumbre, una frase dicha en un día de invierno. Los niños ríen, mientras hago nevar, y las señoras, sus madres, los protegen con guantes y bufandas, y chamarras y advertencias. Los protegen, los arropan.

A veces me pregunto cuándo fue la última vez que sentí algo así... un abrazo. Cierro los ojos y trato de pensar, pero no lo recuerdo. Mi primer recuerdo era sentir frío, y miedo. Soledad, que no me ha dejado un momento. Así que no, no sé lo que es sentirse rodeado por unos brazos tibios que busquen dar algo más que calor: cariño.

Sonrío, intentando borrar las imágenes de mi mente, y tiro una bola de nieve contra uno de los pequeños para hacerlo reír; y lo consigo sin mucho esfuerzo. Él ríe y juega, corre, libre entre la blanca nieve, acompañado de sus amigos que se han unido al juego, hasta que atardezca y deban volver a casa, mojados, fríos y exhaustos, pero terriblemente felices.

Mientras, corren, patinando y resbalando sin control; accidentes menores causados por mis travesuras. Hasta que corren en mi dirección y, sin avisarme, me atraviesan. Nunca me avisan, claro; pero sentirse atravesado no es agradable. Me da frío, me da miedo. Es una sensación de sentirse menos real y más nada. Nada. Eso soy, frío y solo. Nada.

Algunas madres los reñirán por traer sucios sus pantalones nuevos o por tener la nariz demasiado roja, demasiado fría. "Fue Jack Frost", podría decir alguno de ellos en un susurro a media voz. Ella lo mirará y, arreglándole el cabello le dirá eso que parece herirme más que cualquier golpe, "Jack Frost no es real". No es real. ¿Lo soy?

En días demasiado fríos para que dejen salir a jugar a los niños y las ventiscas resultan aburridas, me asomo a la ventana de la sala de estar de alguna casa. Casi nunca es la misma, y lo hago a hurtadillas, como si me sintiera un ladrón de momentos, a pesar de no poder ser visto. No me ven, por supuesto. Pero yo a ellos sí, y eso se me hace en cierta forma injusto.

Me asomo, de puntitas y despacio, aguantando la respiración. Y los veo, tomando un chocolate caliente juntos, jugando algún juego de mesa en tranquilidad. La música suena en el fondo, y ellos ríen, cálidamente. La música ha cambiado mucho a lo largo de los años, pero en esta época siempre se escuchan melodías familiares que buscan el cobijo y la proximidad.

A veces me pregunto lo que sería estar vivo. No lo recuerdo, no sé si fui alguien más alguna vez. Pero me he visto en el reflejo del agua y del hielo, y sé que tuvo que haber algo antes, porque mi reflejo me lo dice. Tonto, ¿cierto? Y aún así... aún así me siento tan solo y vacío cada vez que veo una familia abrazándose y sonriendo.

Ellos dicen que no soy real. Lo han dicho tanto tiempo que a veces pienso que tienen razón y sólo soy el invento de alguien más. Los niños ven a Norte, ven al Conejo y al Hada. Algunos adultos incluso han visto a Meme. Pero a mí nadie me ve, todos me atraviesan. Y cansa, duele y cansa.

Por eso, cuando un niño desvía ligeramente su mirada hacia donde yo estoy, creo que puedo volverme loco. Creo que lo escucho llamarme y reír conmigo. Creo que puede verme y casi tocarme, para transmitirme un poco de su calor y... tal vez... abrazarme. Quizás así se me quite el frío. Pero, si eso pasara, no sé lo que haría... he olvidado hace mucho lo que es ser visto, ser notado. Ser alguien. Soy nada, un espíritu menor, Jack Frost. Nadie cree en mí, nadie me ve.

Ellos dicen que no soy real.

A veces empiezo a creerlo.

o.O.o.O.o.O.o

La desesperación de Jack para sentirse notado me rompe el corazón, así que esto salió. Espero que les haya gustado.

Si llegaron hasta aquí, gracias por leer!