Disclaimer: Los personajes aquí utilizados no me pertenecen a mí, sino a Lewis Carroll. Y, cabe aclarar que está basado en la película de 2010 de Tim Burton, tanto como en el aspecto físico de los personajes como en la trama (ya que no he leído los libros, pero planeo hacerlo).

Tragó saliva y respiró profundamente, dejando toda la locura producida por el mercurio de lado por unos momentos y posando sus ojos de un tono amarillo sobre unas flores de color rojizo que había por allí, aunque en realidad no las estaba mirando realmente, porque había más que eso en su cabeza.

¿Qué más? Alicia, claro que se trataba de ella, porque todo se trataba de ella desde la última vez que la vio. Se trataba de su pelo rubio y ondulado, sus ojos oscuros en los que se perdía y por un momento salía del mundo real, y de sus labios medio finos que eran tan bonitos. Todo era sobre ella, porque ella le encantaba demasiado y, tal como su locura, no tenía remedio.

Se preguntó: "¿volvería la chica que lo volvía aún más loco?" Él le había pedido que se quedara, y sin embargo ella no lo había hecho; claro que lo entendía, pero sin embargo no lo aceptaba... pero dicen que el amor hace esas cosas, ¿verdad? Después de todo, él aún confiaba en ella y, si le había dicho que volvería, estaba seguro de que lo haría, así que la esperaría hasta que lo hiciera.

A diario se preguntaba, ¿qué estaría haciendo su querida Alicia en aquél lugar tan desconocido para él y sus amigos? ¿Habría encontrado a alguien, tan pronto? Sea lo que fuere, él la quería de vuelta, estando casada o soltera, igual o cambiada, de todas maneras. Era perfecta a sus ojos. Perfecta como ninguna.

Suspiró nuevamente y la visualizó sonriendo, y la recordó peleando como un verdadera guerrera, también recordó el miedo que pudo ver en ella cuando visualizó al Jabberwocky, y el valor que demostró al enfrentarlo. ¿Era eso lo que lo conquistaba una y otra vez? No, en realidad no lo sabía, y quizá jamás iba a saberlo, pero de eso se trata el amor.

No sabía por qué, no sabía cómo, pero sabía que amaba, y eso era lo que importaba.