Nota: South Park no me pertenece, le pertenece a Trey Parker y Matt Stone. Yo sólo escribí este fic, el cual sí me pertenece (?). Espero les guste.


¿Tweek? - Preguntó un pelinegro de ropa negra y azul - Él no me importa, la persona que más quiero eres tú - Sentenció Craig -

El rubio adicto al café no podía creer lo que acababa de escuchar. Él amaba a Craig, ¿cómo era posible que él dijera eso...? Y más a su peor enemigo, del que Craig le aseguró no debía estar celoso, Thomas. Sin embargo, Tweek sólo se limitó a seguir observando, escondido, mientras unas lágrimas salían de sus ojos y resbalaban por sus mejillas, al tiempo que el pelinegro que antes amó besaba a otro rubio... Un rubio que no era él...


Hey, Tweek - Saludó Craig alegremente a su novio al verlo llegar al parque donde acordaron verse, mientras le daba un cariñoso abrazo -

¡Ah! ¡Ho-Hola Craig! - Correspondió el saludo, sonriente -

Tweek no podía estar más feliz, Craig y él eran novios desde hace un mes y todo era tan genial... Tan "mágico"... Aunque no quería sonar como esas niñas cursis que se enamoraban de cualquier persona y todo les parece tan maravilloso después de apenas unos días con el tipo que creen "el amor de su vida". No quería sonar así porque la persona de la cual Tweek estaba enamorado no era "cualquier persona", sino Craig Tucker. Sí, ese chico tan extraño y aburrido según algunas personas. Pero Tweek era su mejor amigo, él lo conocía mejor que nadie, él sabía que Craig era muy divertido, amable, comprensivo y cariñoso si tan sólo llegabas a conocerlo un poco. Él lo amaba.

La vida por fin tenía sentido, desde que lo conoció... Aunque debía admitir que en el primer momento que lo vio, no fue así. Pues la primera vez que estuvo frente a frente con ese chico pelinegro, no le agradó para nada, le pareció un completo idiota, pero ya estaba acostumbrado a "conocer" a personas así. Aunque "conocer" no era la palabra correcta, él no conocía a ese chico, sólo con ver a alguien un momento no puedes saber cómo es, y así "conocerlo". A pesar de que ese chico acababa de hacer algo que a él no le gustó, no lo iba a juzgar. No quería empezar a parecerse justamente a esos idiotas que odiaba.

Flashback

Tweek estaba en la cafetería de sus padres, acompañándolos mientras trabajaban. No había ido a la escuela porque simplemente ya no aguantaba las burlas de los demás y que lo molestaran porque sí. Nada interesante sucedía, como era normal en las mañanas dentro de esa cafetería. Pero sólo le importaba que tenía todo el café que quisiera, a la mierda todo lo demás.

Un tipo algo viejo de cabello naranja acababa de entrar a la cafetería, acompañado de lo que parecía ser su hijo, un niño pelinegro con una expresión de odio en su rostro y más o menos de la edad de Tweek. Llevaba una chaqueta azul, pantalones negros y un gorro azul medio raro.

Tweek tomaba café tranquilamente, detrás del mostrador junto a su padre, hasta que el hombre pelirrojo pidió un café para él, y otro para su hijo. El padre de Tweek preparó el café y se lo entregó al hombre.

Toma - Exclamó el pelirrojo, dándole el café a su hijo - A ver si así dejas de joder -

El chico del gorro azul tomó el vaso de café, le quitó la tapa, y vertió el líquido en el suelo, molestando no sólo a su padre, sino también a cierto rubio.

¡Yo no voy a limpiar esto! - Gritó hacia su hijo -

El chico pelinegro se limitó a hacer una seña obscena con su dedo medio.

Tranquilo, señor, nosotros lo limpiaremos - Dijo el padre de Tweek intentando tranquilizar al otro hombre - Tweek, ve por el trapeador y limpia esto - Le ordenó a su hijo sin darle mucha importancia, el cual se molestó por la orden, pero aun así accedió.

Cuando tomó el trapeador y lo llevó donde estaba el café derramado, observó por un momento al chico causante de eso. El de chaqueta azul se percató de la mirada del otro y le mostró la misma seña que había hecho hace unos momentos, lo que encabronó al rubio.

Fin del Flashback

Y pensar que habían transcurrido cinco años después de eso. En ese entonces Craig tenía 12 años, mientras que Tweek tenía 11. Nunca creyó que llegarían a amarse así.

Oye, Tweek - Habló Craig, llamando la atención de su rubio después de dar por terminado el corto abrazo, sacándolo de sus pensamientos - ¿Quieres ir al cine conmigo hoy? Es el estreno de esa película que querías ver -

¡Claro que AHG sí! - Respondió el rubio muy contento -

Está bien, pasaré a tu casa a las seis, ahora creo que debes ir a terminar tu turno en la cafetería de tus padres - Le recordó el pelinegro -

¡Ahg! ¡Mierda, se me había olvidado! - Dijo Tweek para luego salir corriendo hacia su trabajo, no sin antes gritarle a lo lejos un "¡Nos vemos!" a Craig. El cual respondió con un susurro inaudible.

Nota 2: No tengo nada contra Craig ni Thomas, sólo que según yo quedan perfectos para este fic (?).