El Regreso de Hao

By

Tomoe-chan

Notas de Autora:

Hola wapas!!! (y wapos xD)

Etto... pues aqui venia yo a dejarles la primera parte de este mi fic de Shaman King, el primero que publico de este anime, y que de hecho, fue el primero que escribi... esperen ettoo... no fue exactamente el primero, por que esta escribiendo dos al mismo tiempo, pero como sea, aqui se los traigo. El original fue escrito en formato Scrip, asi que apesar de que ya esta completo, me tardare un poquito en subir los capitulos, pues los estoy rehaciendo (remake & reload! xD).

Aclaraciones:

Tiempo: Post-serie

Género: Not Yaoi (aun no estoy lista para hacer una historia de este genero)

Resumen: Dos años pasaron desde que Yoh acabo con su hermano. Pero¿es todo lo que parece¿acaso Hao nunca murio¿y quien es la nueva chica y que demonios tiene que ver con Hao?

Advertencias: Hemmm... creo que si: Mary Sue, girlpower, spoilers para los que no vieron la serie o que nunca la terminaron de ver, y los diabéticos, les suguiero abstenerse, que puede llegar a ser MUY dulce. (Vamos! que la escribi hace tres años... todavia era una niña inocente que soñaba con vivir un cuento de hadas!)

Ahora si, a leer!

Parte I

Habían pasado ya mas de dos años desde que Yoh y sus amigos habían derrotado a Hao. No había señal alguna de que el Torneo de los Shamanes fuera a continuar, mientras que en casa de Yho se preparaba una pequeña reunión.

-¿Ya preparaste la cena?- preguntó Anna a su prometido.

-No, jijiji- rió despreocupadamente Yoh.

-Será mejor que des prisa, tengo hambre. Por cierto, trata de que la cena sepa bien esta vez o tendrás que repetirla- le dijo amenazadoramente Anna.

-Esta bien Anna…- respondió Yoh y se dirigió a la cocina.

-Anna, ya termine de limpiar el piso, ya puse la ropa a lavar y ya la tendí- dijo Manta, que habia crecido un poco desde el Torneo de los Shamanes.

-Bien, ahora ve a limpiar los baños- le respondio esta, con su cara de poquer, y viendo como siempre la televisión.

-Pero Anna…- protestó Manta.

-¡Ve!- le dijo con un tono que indicaba que no queria más excusas. La chica, aunque ya no era tan estricta como antes, seguia siendo firme e imponente.

-Bueno ya que me queda- respondió Manta con una cara de pesar.

En la cocina, Yho preparaba la cena con la ayuda de Fausto y Elisa mientras que charlaban un poco.

-Me pregunto que ira a pasar con el Torneo de los Shamanes, por que no creo que los Grandes Espíritus puedan estar sin un Rey Shaman- le dijo Yoh a Fausto.

-No, eso es verdad, los Grandes Espíritus no pueden estar sin un Rey Shaman, pero no sé de que forma nos irán a avisar, por que el cometa Lago, que anuncia el comienzo del Torneo de los Shamanes, no volverá a pasar sino hasta dentro de 500 años- le respondió.

Así pasaron el resto del tiempo, debatiendo a cerca de muchos temas, en lo que terminaban de preparar la cena.

Ya en la cena, todos comian en silencio, la mayoria metidos en sus propios pensamientos.

-Has mejorado tu sazón, Yho, pero te falta bastante- dijo Anna, rompiendo el silencio. Aunque el chico sabia que era un gran cumplido, viniendo de la chica.

-Anna hace tiempo que no vemos a los chicos, así que estaba pensando en invitarlos a comer,- comenzó a hablar Yoh, arriesgandose después de el comentario de la chica.

-Esta bien- dijo Anna sin inmutarse.

-Pero Annita, es que hace mucho que no los veo...

-Dije que esta bien- le repitió la chica.

-Por... ¿ah¿En serio?. ¡Gracias Anna!- dijo Yoh, mientras se ponia a saltar como un niño pequeño que acaba de recibir el jugete que queria. Mientras que Anna sonrio imperceptiblemente. Aunque no lo admitiera, ella también extrañaba a sus amigos. Cada quien habia decidido seguir su propio camino, para hacerse más fuertes, por si el torneo se realizaba de nuevo.

Un par de semanas después, la Pensión de las Aguas Termales de Fumbari (Anna por fin habia cumplido su sueño de crear su empresa) se preparaba para la fiesta que tendrian por la noche.

-Don Yoh, doña Anna, permítanme preparar la cena de esta noche, ya que será algo especial, esta noche quiero preparar algo delicioso- les habia dicho Ryu que habia llegado de improviso esa mañana.

-Está bien, ya probaste en otra ocasión ser un excelente cocinero…no como Yho- dijo con una media sonrisa, y una mirada reprobatoria hacia su prometido.

Yoh simplemente rió, como solia hacer.

-Muchas gracias doña Anna- Dijo Ryu agradeciendo el cumplido, pues era raro escuchar uno de la boca de la rubia. Y luego escucharon que alguien llamaba a la puerta.

-Ve a ver quien es, Yho- le mandó Anna.

-Sí, Anna- respondió el joven.

Minutos después vieron al visitante.

-¡¡Lyserg!!- gritó Ryu nada más verlo, y lo abrazo, llorando cascadas por los ojos, mientras murmuraba cosas como: "tanto tiempo" "te extrañe" "el pequeño Lyserg" y otras tantas.

-Hola a todos, espero no llegar muy temprano, pero pense que seria lo mejor- saludó Lyserg, con su amable sonrisa.

-No importa, siempre eres bienvenido en nuestra casa Lyserg- le dijo Yoh.

-Muchas gracias Yho- le agradeció el muchacho. Poco después logró safarze de Ryu, pero tuvo que ayudarlo en la cocina a petición de este.

Por la tarde y noche, comenzarón a llegar sus amigos. Pronto, todos estuvieron alli: Ren, Horo-Horo, Pilika, Chocolove, Fausto, Elisa, Tamao (que de hecho estaba viviendo en la Pensión), Lyserg, Ryu, y por supueto Anna, Yoh y Manta.

-Bien, la cena esta lista, pueden empezar a comer- dijo Ryu al servir el último plato.

-Gracias por la comida- dijeron todos al mismo tiempo.

La cena transcurria normal, si asi se le podia llamar. Todos charlaban animadamente, aunque de vez en cuando se oian unas peleas de esto y lo otro, para no perder la costumbre, obviamente libradas por Ren y Horo-Horo, animadas por Chocolove, y tratando de ser calmadas por Lyserg, Tamao y Pilika. Esta ultima era el mayor motivo de pelea, pues nada más se habian sentado a comer, Ren se habia sentado al lado de ella, aun habiendo mas puestos vacios. Horo-horo que se olia lo que el chico de ojos dorados se traia con su pequeña hermana lo retaba a cada poco con lo que fuese, para evitar que el chico en cuestion "engatusara" a su hermana. Lo que le resultaba un poco dificil pues queria evitar la charla entre Ren y Pilika, tanto como el queria hacer lo propio con la chica que tenia a su lado, Tamao. La cual le decia cada dos por tres que dejara de molestarlos, y lo conseguia por un par de minutos, hasta que su cerebro se "reconectaba", y volvia al objetivo que tenia antes de hacer caso a Tamao.

Pero de un momento a otro todos callaron, dejaron de comer, fastidiar o lo que fuera que hubiesen estado haciendo antes, pues sintieron de golpe como aparecia un poder espiritual muy parecido al que habia pertenecido a Hao, lo cual no podia ser, pues él estaba muerto. Además de otro casi igual de fuerte.

-Amo Yho,- le dijo Amidamaru a su shaman.

-Lo sé, vayamos a investigar- le respondio Yoh a su espiritu acompañante. El vinculo y entendimiento entre shaman y espiritu se habia incrementado con el tiempo. Podia, por así decirlo, "leer la mente del otro".

Ren, Ryo, Lisergh, Yoh, Horo-Horo, Chocolove, Fausto y sus espíritus acompañantes y Elisa, junto con Manta, fueron a investigar que era lo que pasaba, querian saber de quienes provenian aquellos enormes poderes espiritules.

En la entrada de la casa de Yoh, estaba parada una chica de pelo gris azulado, largo,y ondulado, ojos grises y piel blanca como la nieve, que llevaba un bebe en los brazos y a la par de ella…el Espíritu del Fuego en su tamaño pequeño.

Al ver esto, el shock fue completo. ¿Cómo podia ser aquello? Hao solo revivia cada quinientos años, para entrar en el Torneo de Shamanes, y por consiguiente el Espiritu de Fuego estaba de alguna manera sellado. ¿Acaso no lo habian eliminado de la faz de la Tierra?

Notas de la Autora:

Esa fue la primera parte de mi fic!
Perdonen las faltas de ortogrfía, pero no me dio tiempo de revisar bien bien la historia.
Espero que les guste y que me pongan reviews!!!
Y quien sabe, incluso podria llegar a cambiar un poco la historia con sus comments, o quizas podria ponerle mas cosas o algo asi.
Pero todo depende de sus comments!

Atte,
Tomoe-chan