Prologo
El mundo estuvo en guerra hace bastantes años, dos poderosas razas se enfrentaron en un ciclo continuo de venganza: humanos y dragones se asesinaban entre sí, su sangre manchaba países enteros en encarnizadas batallas sin fin que destrozaban sin piedad el campo de batalla quedando inhabitables.
Todo parecía conducir en el exterminio de ambas especies junto con el planeta que habitaban, más una joven pareja decidió hacer la diferencia.
Una humana que fungía como enfermera en uno de aquellos campos de batalla fue salvada por un dragón del fuego de otro, ese echo cambio la manera de pensar de la mujer y con él su posición ante la guerra. Pronto comenzó a pregonar por el pueblo que los dragones podrían no ser tan malos y podrían encontrar una manera pacífica de detener el conflicto, la mayoría del pueblo ignoro a la joven pero algunos pocos hartos del sufrimiento de la guerra decidieron seguir a la joven; la cual al darse cuenta que nadie más lo seguiría empezó un largo viaje tratando de convencer a cualquiera que se topará en su camino a unírseles.
Varios meses de iniciado su viaje la mujer logro reclutar a más y más gente, hasta que un día se reencontró con el dragón que había salvado. Al parecer el dragón la había estado observado desde que la encontró en el campo de batalla y quedo fascinado por su valor, coraje y amabilidad. Así que decidió unirse al grupo de la joven, con dragones que el mismo había reclutad.
El tiempo pasó, ambos decidieron reclutar a más y más seguidores hasta que el pequeño grupo de locos traidores se transformó en una facción más en la guerra, la mujer y el dragón se volvieron cada vez más unido hasta que lo inevitable pasó ambos se enamoraron del otro y al poco tiempo tuvieron la mujer logro embarazarse y una nueva especie conoció el mundo, un híbrido, con las mejores características de sus progenitores. El pequeño bebe se hizo un grandioso guerrero, el cual muy pronto fue acompañado por más y más híbridos.
Al final humanos y dragones temiendo que pudieran ser aniquilados por esa nueva facción, terminaron por resignarse y poner fin a la guerra, cedieron territorio y acordaron un tratado de tolerancia para evitar mayores conflictos, aun así el resentimiento persistió el algunos lugares…
"Hipo deja ese libro de una vez y ponte a trabajar" el grito de Bocón retumbo por toda la herrería sacando a Hipo de su lectura.
Este epilogo solo es para ambientar la historia y no tendrá una relevancia en la historia.