Wilde.

Bienvenidos lectores, espero que les guste este fic, sí, como muchos de ustedes, este es mi primer fic de Zootopia, la película me encanta y no dudo ser parte del fandom que apenas nace.

Zootopia y sus personajes le pertenecen a Disney.

Disfruten.

Capítulo 1: Déjame contarte.

Tercera persona.

Noche de sábado. Las luces de la ciudad Zootopia iluminaban todo el ambiente, el invierno había llegado, era un verdadero paraíso para Tundratown, pero para las demás regiones era todo un reto mantenerse, aunque, los habitantes de Zootopia ya estaban acostumbrados a cambios tan altos de temperatura, no había tanta preocupación. Es más, el invierno siempre se disfrutaba, era una época muy hermosa en donde toda la ciudad bailaba en luces y brillaba como una utopía.

POC NICK WILDE

-Ahh…mi época favorita del año, siempre anochecer con una taza de café bien caliente me hace el día-.

Me encanta sentarme en mi pequeño balcón, afuera de mi departamento, es algo pequeño, pero es mi paraíso, todas las noches después de un productivo día en la estación de policía, llego a mi mansión, pongo música de antaño como un poco de Genesis o David Furwie, me sirvo un café caliente en mi taza favorita, me encanta recordar todos esos momentos junto a mi compañera Judy. Me siento todas las noches exactamente a las 9:00. Muchos, hasta la misma Judy me preguntan que si no me canso de la misma rutina, lo he hecho toda la vida, y no, no me harto de este ritual diario para mí. Es como el Spa para las hembras o el gym para los machos, pero, ¿por qué perder tiempo en esas cosas si puedo disfrutar de mi momento de ocio más especial en todo el día? La vista de mi apartamento es única, ya que puedo ver todo el movimiento del centro de la gran ciudad, y eso me llega a entretener y distraerme de todos los casos y el papeleo que debo de hacer todas las mañanas, aunque tengo que admitir que una de mis distracciones es pasar tiempo con Judy, muchos me dicen que me veo muy bien junto con ella, que hacemos excelente pareja y toda esa clase de cursilerías…

Yo la tomo como mi mejor amiga, como mi consejera, como mi heroína. Pero, algunas veces em pregunto por qué no le he contado mi pasado, ella siempre me cuenta de sus padres y de sus casi 120 hermanos menores, siempre me quedaba atónito con las historias de cada uno, era como tener algo que contar cada día. Deje mi café sobre la pequeña mesa que tengo en mi balcón, pongo mis brazos detrás de mi cabeza, y empiezo a escuchar las guitarras de Genesis que tanto me extasiaban, cerraba mis ojos, el sueño me empezaba a consumir, creo que me deje llevar por mis pensamientos de Judy, ¿por qué la tenía tanto tiempo en la cabeza? Era como si la quisiera ver en este momento, abrazarla, sentirla...

Mis pensamientos se vieron interrumpidos por el sonido de llamada de mi celular, algo desorientado, gire a mi derecha y lo tome, vi quien me estaba buscando, es Judy, sorprendido, no por mera coincidencia, contesté.

POV LLAMADA

-Hola Nick, ¿interrumpí tu ritual? - dijo Judy desde el otro lado del teléfono.

-Eh…algo así, ya estaba acabando, ¿qué pasa? ¿cómo va todo zanahorias? -.

-No pasa nada Nick, em, solo te quería preguntar si querías salir a tomar un café, ya sabes, es invierno y me encantaría salir contigo a caminar en una noche así- respondió Judy, se le escuchaba algo nerviosa a través del teléfono.

Nick sintió una corriente en su espalda, esperaba que todo lo que pensaba fuera una simple coincidencia…-Sí, me encantaría zanahorias, ¿pasó por ti? -.

-Me encantaría Wilde-.

-Nos vemos allá-.

-Nos vemos-.

POV NICK

Fue la llamada más extraña en años, jamás creí que ella me buscará para salir a tomar un café y a platicar un rato, casi a las 9:30 de la noche, a esa hora, frecuentemente estaba rendida y agotada.

-Esta orejona ahora si me sorprendió- dije con una sonrisa.

Tome una chaqueta, se podría decir la más decente que tengo, me acomodé la camisa y la corbata, bajé al estacionamiento del edificio, tome mi coche hashbag manual, metí primera velocidad y me dirigí hacía su apartamento, una larga noche nos esperaba.

No tarde más de 10 minutos en llegar, no estaba tan lejos su apartamento del mío, estacione mi auto, y entré al edificio.

Piso 5, era fácil de identificar, sus vecinos siempre golpeaban las paredes, como a Judy le sorprende mi rutina nocturna, a mí me sorprende que aguante tanto ruido, si hubiera sido yo, les hubiera arrancado los cuernos en una de sus fiestas, el alcohol no les cae bien.

Toque su puerta, teníamos un toque especial para cada apartamento y para cada ocasión, así que toque en la clave de "visita".

Ella abrió la puerta, sus ojos grandes y tan hermosos como siempre me miraban con una sonrisa, en verdad se veía hermosa, a mí me encanta como se ve con cualquier atuendo, hasta con el de policía, debo de admitir que se ve sexy…

-Servicio a la habitación- dije en forma de broma.

-Mira quien habla, no soy la única que tiene el departamento hecho un desastre- me contesto con una sonrisa y algo sonrojada.

-Buen punto zanahorias, ahora, ¿Centro o parque? -.

-Ir al centro me encantaría- dijo con una sonrisa, dándome un empujón con su cintura, tengo que admitir que me encanta que haga eso, y lo mejor es que le sigo la corriente.

Los dos bajamos y entramos al auto, ella conecto su auxiliar y empezamos a escuchar algo para darle ambiente a la noche, Phill Collins para ser exactos.

Uno de nuestros lugares favoritos para pasar el tiempo era la cafetería del centro de la ciudad, a ambos nos encantaba ver la actividad nocturna, las luces y los animales pasar, algunos enamorados, otros solo pasaban con una sonrisa en la cara, regresando a sus casas, cabe destacar que esta ciudad nunca descansa.

-Dos capuchinos por favor, esencia de canela y el otro de nuez-.

Yo ya sabía cuál era el favorito de Judy, me lo dejo muy claro después de un error en la estación de policía. Así que yo era el que siempre ordenaba, no solo para enmendar ese error, lo hacía más como caballerosidad hacía ella, lo que más me hacía sentir bien, era ver su sonrisa después de oler el dulce aroma a nuez de su café favorito. Elegimos una mesita para dos cerca de la ventana que miraba hacía la calle, los dos nos mirábamos y empezábamos a hablar de cualquier cosa, eso era algo que siempre me gustaba de las reuniones.

Cuando llegaron nuestros capuchinos, ella hacía siempre lo mismo, movía su naricita de forma tierna oliendo su dulce café, cabe destacar que siempre bajaba las orejas, yo solo la veía con una sonrisa, me encanta verla sonreír. Pasaron unos minutos en silencio, hasta que la pregunta del millón salió de la boca de Judy.

- ¿Qué me cuentas Wilde? - pregunto con una sonrisa.

- ¿Qué quieres que te cuente zanahorias? -.

-No se…lo que se te venga a la mente-.

Me quede unos minutos en silencio, fingía que intentaba recordar algo, pero ya tenía en mente lo que le quería contar, desde mi balcón ya lo tenía pensado.

-Tengo algo que contarte, y…creo que es tiempo de saberlo-.

- ¿Saber qué? - pregunto Juddy, con las orejas bajas y tomando un sorbo de su bebida.

-Pues…de mi pasado, de mi familia, tu siempre me cuentas sobre la tuya, dame la oportunidad para contarte mi pasado- dije con una sonrisa que según yo inspiraba confianza.

-Pues, sabes me encantaría, siempre he tenido la curiosidad de preguntarte- dijo Juddy, mirándome a los ojos y apoyando sus codos sobre la mesa.

-Pues, ponte cómoda zanahorias…déjame contarte….