Bueno, bueno, explicar un poco el asunto. Estaba yo riéndome a más no poder por un comentario que inocentemente hizo Genee en el foro Proyecto 1-8. Sé que no lo hizo adrede, además, yo soy una mal pensada terrible.


Los huevos del señor Tento.


Dedicado a Genee.


Palmon creía que Mimi era lo máximo. Esperaba pacientemente a un lado de la puerta digital a que la castaña apareciera y pasaran la tarde juntas. Mientras tanto podía hacer fotosíntesis ya que Izzy ya le había explicado qué era exactamente… Algo con gases y azúcares, fuere lo que fuere, le hacía bien a ella como digimon tipo planta, y si el pelirrojo curioso lo decía era cierto. Sin embargo, él la hacía enfadar y cambió de humor repentinamente al recordarlo. Mimi se pasaba todas las mañanas con él, también los almuerzos; haciendo que el tiempo con su humana se redujera. Maldito día en que se hizo su «asistente», novia y ayudante en la recolección de muestras del digimundo.

Se dio media vuelta y caminó hacia la puerta que abría a la casa de Izumi, donde probablemente la chica debía estar. Al inspeccionar la pequeña pantalla repleta de pasto y malezas, se dio cuenta que estaba abierta pero no del todo. No podía ser lo que ocurría en el otro lado, pero sí podía oír los susurros.

Vamos, vamos, solo será un segundo.

No podemos, Mimi.

Deja que el señor Tento se divierta un poco —indicó juguetona a lo que Izzy suspiró cansado. Se oyó algo así como una cremallera abrirse lentamente. Palmon frunció los labios: otra vez habían dejado que Tentomon saliera a pasear al mundo real con ellos como el primo enano extranjero de Izzy, vestido con las más extrañas prendas de vestir humanas. La plantita deseaba que Mimi la llevara de la misma forma, desde un coche de bebé no podía ver nada—. ¿Ves? Quiere divertirse.

Deja al señor Tento.

No lo haré, me ama. Mira cómo se puso.

Mimi… —suspiró. Al menos el humano estaba cansado de ella por la forma que le habló. Pronto, ella se pasaría al otro lado de la puerta enojada con él por no prestarle la debida atención y Palmon la recibiría con los brazos abiertos. Sí, sí, todo mejoraría, ya que usualmente Mimi permanecía enojada por un par de días.

Palmon se arrimó a la pantalla negra para oír con más detención lo que sucedía al otro lado, aunque pegar su canal auditivo-vegetal, formado a partir de cientos de vacuolas, contra el vidrio no era más efectivo como pudo comprobar. Y el verdadero señor Tento estaba preguntándose qué era lo que quería conseguir la planta animada.

—¿Esperas a Izzy, Palmon? —preguntó de pronto y la aludida se volteó a ver qué sucedía.

—¿Tentomon? ¿No estás allá dentro?

—Creo que no… —Seguramente se habría encogido de hombros si los tuviese.

—¿Quién es el señor Tento?

—Yo.

—Pero no estás ahí. ¡Te están suplantando!

Oh, señor Tento, lo extrañaba tanto y veo usted también a mí. Venga y reviénteme a la señorita Palmon de una buena vez.


Syb está loca D:D