¡Holaaa a todos! ¡Como muy bien he dicho aquí está la segunda temporada de Amnesia!

¡Agradezco todos los comentarios, favs y follow que recibió la primera temporada! Me alegró que haya gustado! Espero ésta también les agrade!

Como otro dato, he colocado algunos dibujos en mi Deviant art de la primera temporada! el cual pueden ver en mi perfil la página, pero cualquier cosa pueden buscarme por:

HaruakiSou

¡Sin mas que decir disfruten el capítulo!


Capítulo 1

Sueños

Normal POV

En la cima de aquél edificio se encontraba ella, aquella chica de cabellos oscuros y ojos grises que había perdido su memoria meses atrás sin recordar su propio nombre, esa chica la llamaban Haruka. Con su mirada perdida dio un paso hacia a delante y cayó de aquél edificio.

"Debes regresar"

Oyó decir de una voz desconocida.

-¿A dónde? ¿Cómo regresaré? – Dijo mientras caía.

"¡Regresa, regresa pronto!"

-¡No sé cómo hacerlo! – Dijo mientras llevaba su mano hacia arriba intentando alcanzar una luz que veía, mientras caía esa luz se fue acercando hasta que ya no pudo ver nada más.

-¡Ah! – Se levantó Haruka de golpe de la cama donde dormía - ¿Qué fue eso? – Se preguntó – Desde meses atrás tengo sueños como estos, pero esta vez fue diferente, esas voces ¿de quiénes eran? – Dijo llevando su mano a su frente – Me duele un poco la cabeza…

Haruka POV

Decidí levantarme, aun pensando en aquél sueño que me ha estado invadiendo desde hace 2 meses atrás, así es ya habían terminado las vacaciones de verano y hoy era nuevamente el comienzo de clases. Vi la hora 12 del mediodía, usualmente me levantaba a esta hora para poder "desayunar" y tener todo listo antes de ir a la escuela.

Empecé a quitarme la piyama y a colocarme una ropa más cómoda para estar en casa, una camisa manga larga de color rojo que deja al descubierto mis hombros, una falda negra, botas un poco más debajo de la rodilla con medias largas color negro, conjunto que me había hecho comprar Hikari en una salida que tuvimos en el centro comercial.

Salí de la habitación con destino a la cocina. Mi estadía con los Sakamaki al pasar el tiempo empezó a cambiar un poco, al igual que empecé a acostumbrarme, no del todo. Aún había cosas que no podía aceptar, como el acoso sexual de Laito por ejemplo.

Llegué al comedor, donde Kanato estaba sentado en ella junto con su querido Teddy, él me miró con aquellos ojos enojados.

-Llegas tarde – Me dijo con voz cortante - ¡Y muero de hambre! – Gritó mientras lágrimas salían de sus ojos.

-L-lo siento Kanato-kun – Intenté calmarlo.

Desde que Reiji me enseñó a cocinar le tomé más amor a la cocina, un día le preparé un postre a Kanato para que se calmara y no me acuchillara y él quedó encantado, desde ese día quiere que siempre le cocine, más bien me trata como criada pierde la paciencia cuando llego tarde así que intento no hacerlo.

-Tendrás que preparar algo muy delicioso para que se me pase el enojo… – Secó sus lágrimas.

-¡S-sí!

Me dirigí hacia la cocina empezando a cocinar, hice hot cakes para ambos y para él su platillo favorito, su preciado pudín. Puse todo en una bandeja para llevarlo hacia el comedor.

-Hoy son rosadas – Escuché una voz debajo de mí.

-¡Kyaa Shu-san! – Dije al verlo tirado en el suelo sin haberme dado cuenta de él antes - ¡No me asustes así! ¿Y de qué rosadas hablas?

-Tu bragas – Sonrió y me tomó la pierna.

-¡D-deja de hacer eso! – Dije sin poder moverme – ¡Se me caerá la comida!

-¿Kanato te matará si no llegas a tiempo, no? – Dijo sin dejar de tomar mi pierna sonriendo divertido.

-S-suéltame – Le ordené.

-Bueno, pero seguiremos más tarde – Besó mi pierna provocando que me sonrojara como un tomate, él la soltó y pude caminar, aceleré un poco el paso, Shu también había cambiado un poco, volviéndose más comunicativo.

Llegué al comedor con todo listo y coloqué el desayuno sobre la mesa, ambos empezamos a comer al terminar Kanato se veía satisfecho.

-Delicioso… Haruka-san siempre cocina el mejor pudín… - Dijo placentero – Pero sabes… hay algo más delicioso que tu pudín – Él se acercó a mi cuello y olfateo – Tu sangre es más deliciosa que cualquier otra cosa – Me mordió y empezó a succionar mi sangre, cerré mis ojos con fuerza, aunque ya no me doliera tanto como antes me seguía sin gustar el hecho de que chuparan mi sangre cuando quisieran, pero no podía detenerlos, después de todo vivía con vampiros y tenía que aceptar las consecuencias.

-Ahh~ Cuanta diversión tan temprano – Escuchamos la voz de Laito que provocó que Kanato se detuviera y lo viera enojado – No se detengan~ verlos así es tan excitante – Dijo con aquella voz tan… ¡Tan Laito!

-¡Cállate has arruinado mi desayuno! – Se quejó Kanato al borde de lágrimas mientras gritaba sin control.

-ah~ No te molestes, Kanato-kun si ya no quieres yo puedo continuar por ti – Le dijo divertido.

-¡No, ella es mi comida no tuya!

-¿Qué está pasando aquí? – Antes de Kanato tal vez tirarle una silla a Laito, Reiji llegó al parecer un poco molesto.

-¡Reiji-san!

-Enserio, uno no puede disfrutar de su té con estos gritos – Acomodó sus lentes – Si quieren tener un trío háganme el favor de ir a cualquiera de sus habitaciones – Dijo provocándome un gran sonrojo.

-¡N-no es eso Reiji-san! – Lo negué con mis manos.

-Que vulgar, que chica tan "fácil" dejándose por dos hombres al mismo tiempo – Terminó de decir yéndose del lugar sin poder explicarle nada.

-Q-que no es eso…

-Ah~ pensar en un trío hizo que me excitara – Observé a Laito muy nerviosa.

-¡Ni hablar! – Escuché a Kanato decir – No haré algo como eso – Dijo muy enojado y se fue de allí.

-Ah~ creo que solo quedamos tu y yo Kitsu-chan – Se empezó a acercar a mí y yo me empecé a alejar.

-N-no te acerques – Le dije a la persona quien menos aguantaba en esta casa.

-Pero, Kitsu-chan a ti te gustan estas cosas – Sonrió.

-Oye ¿qué le haces a la comida de Ore-sama? – Laito se giró observando a Ayato.

-¡Ayato! – Sin darme cuenta solo empecé a llamarlo por su nombre.

-Ah~ Ayato-kun ¿viniste a unirte a la fiesta? Sabes que nunca me molesta uno más~

-Cállate, ella es mía – Le dijo cortante.

-Siempre tan egoísta~

-Deberías dejarla en paz – Escuché la voz de Subaru quien había llegado.

-ah~ ¿Subaru-kun también es un egoísta? ¿O es que ambos están celosos? – Dijo divertido.

-¿¡De qué hablas!? – Habló Subaru.

-¡Yo sólo cuido lo que propiedad de Ore-sama!

Esta situación en vez de darme miedo me daba un poco de risa, era muy divertido a veces ver pelear a los hermanos Sakamaki por razones tontas o sin sentido.

-¿Y tú de qué te ríes? – Me dijo Ayato – Será mejor que vengas conmigo antes de que estos te hagan algo que solo puedo hacerte yo – Me tomó del brazo.

-¡Hey! ¿Quién dijo que era tuya? – Subaru me tomó del otro brazo.

-¡S-suéltenme, me duele!

-¡Yo también me uno! – Dijo divertido Laito tomándome las piernas.

-¡No! – Intenté quitarlos de encima pero ellos me ganaban en fuerza.

-Ni hablar, ella es mía – Ayato se acercó a mi cuello y me mordió fuerte y sin compasión.

-Maldito, ya verás – Subaru se acercó a mi hombro el cual también con fuerza me mordió.

-ah~ No puedo dejar de ser popular, también morderé – Dijo divertido Laito y mordió mi muslo.

-¡N-no, deténganse! – Dije casi al borde de desmayarme.

-¿Enserio, uno no puede disfrutar de su té? Hacen mucho escandalo – Abrí mis ojos y observé a Reiji en esta posición tan vergonzosa, todos se detuvieron y lo miraron aún sin soltarme – Y justo cuando pensé que no podías ser más vulgar, te apareces con tres hombres y en el comedor ¿dos no son suficiente?

-¡No es eso, no me dejan ir! – Me defendí.

-Con que es eso – Me miró poco convencido y suspiró – Muy bien, déjenla ir antes de que la maten de anemia – Todos obedecieron y me soltaron.

-Ah~ siempre arruinas la mejor parte – Dijo divertido Laito.

-Si hubieran estado en alguna de sus habitaciones como muy bien dije esto no hubiese pasado – Se alejó de allí dejándome con aquellos 3 hermanos.

-Seguiremos más tarde, Kitsu-chan – Me guiñó el ojo y se fue de allí.

-Tch, ese maldito cree que lo dejaré – Se quejó Ayato – Que deje de meterse con la comida de Ore-sama.

-Estoy harto de que te llames a ti mismo Ore-sama – Le dijo Subaru enojado.

-¡Púdrete, Subaru! – Empezó a dar marcha atrás para irse – Y no te atrevas a tocarla de nuevo – Le advirtió antes de irse por completo.

-¿En verdad cree que lo obedeceré? – Se preguntó a sí mismo aún molesto se giró hacia mí a lo que yo desvié mi mirada él se acercó y empecé a temblar, sentí su fría mano sobre la herida que me había hecho con sus colmillos - ¿Te duele? – Lo miré de nuevo sorprendida al ver que me preguntaba eso, pareciendo preocupado.

-Un poco… Esta vez mordieron más fuerte que otras veces – Le dije.

-Ya veo… - Vi su mirada la cual ya no parecía enojada, queriendo saber que era lo que pensaba en este momento.

-HORAS MÁS TARDE, ESCUELA-

Caminaba un poco agotada por los pasillos de la escuela con dirección hacia mi salón.

-¡HAAARUKAA! – Escuché la voz de Hikari que se oyó por todo el pasillo muchos giraron hacia ella quien veía corriendo hacia mí y me abrazó antes de poder girarme por completo - ¡Te extrañé! – Dijo rozando su mejilla con la mía.

-H-Hikari-chan, me dejarás sin mejilla – Ella se detuvo y dejo de abrazarme.

-¡Lo siento, no pude contenerme! – Sonrió cálidamente como siempre lo hace.

-¿Y Yuroishi-kun? – Pregunté extrañada al no verlo junto a ella.

-Yuro se retrasará un poco por un pequeño inconveniente – Dio una risa un poco sospechosa.

-¿Pequeño inconveniente? – Pregunté sin entender a qué se refería.

El timbre sonó y ambas nos fuimos a clases, me senté a mi lugar al lado de Subaru quien ya estaba allí, el sensei entró y Yoruishi entró justo detrás de él y se sentó en su lugar, se veía algo cansado.

-Bien, les doy la bienvenida nuevamente a clase – Empezó a decir el profesor –. Hoy tendremos un nuevo alumno quien nos acompañará de ahora en adelante – Lo miré con curiosidad preguntándome quien sería ese nuevo alumno –. Puedes entrar – La puerta fue abierta y un chico entró, su cabello era castaño y sus ojos eran morados, con una gran sonrisa en su rostro se paró al frente de nosotros y pude sentir su mirada sobre mí.

-¡Mi nombre es Daryl Murasaki espero nos llevemos bien! – Su voz sonaba muy alegre.

-Es tan guapo – Dijo una de las chicas.

-¿Tendrá novio? – Dijo otra.

-Estoy soltero – Le guiñó el ojo a aquella chica lo cual hizo que se desmayara y la otra chica la ayudo a que no se cayera del asiento.

Yo por mi parte miré con indiferencia la situación.

-Muy bien, puedes sentarte delante de Ishida – Le indicó el sensei, él obedeció y se sentó en ese lugar, él se giró y me observó.

-Un placer, Haruka-chan – Me dijo sonriendo – Era cierto que te identificaría enseguida, ese olor tuyo es peculiar y eres hermosa.

-¿Eh? – Me sonrojé por lo que dijo al fijarme todas las chicas me veían con enojo, intenté girar para no verlas y observé a Subaru quien veía a Daryl como si fuera a matarlo, terminé mirando a Daryl que era el único quien sonreía en ese momento – Esto se siente extraño – Susurré para mí misma.

La clase concluyó, en pocos segundos todas las chicas se levantaron y se dirigieron hacia Daryl al parecer ya se había vuelto "popular" ellas le hacían muchas preguntas las cuales decidí ignorar, me levanté de mi lugar y decidí ir a la biblioteca.

-Haruka ¿te apetece ir a la azotea? Hice una comida especial me gustaría compartir contigo y Yoru – Sonrió Hikari.

-¿Comida especial? – La miré extrañada.

-¡Sí, es comida extranjera hecha por mí! – Dijo alegre.

-Bueno, debe ser un honor probarla – Sonreí igualmente.

Los tres nos destinamos a salir del salón.

-¡Yoruu! ¡Hikarii! – La voz de Daryl resonó en mis oídos ¿él los conocía? - ¡No se olviden de mí! - Se levantó del lugar – Lo siento chicas, ¿después hablamos, sí? – Guiñó el ojo dejando a las chicas enamoradas él aprovechó y se fue con nosotros.

-¿Lo conocen?

-Sí, por eso Yoru tardó un poco estaba con Daryl – Me explicó Hikari.

-¡Yoruuuu! – Daryl lo abrazó por atrás provocando una cara de ¿fastidio? En Yoruishi.

-Te he dicho que no hagas eso – Sonó un poco molesto.

-¿Pero no me extrañabas? – Dijo casi en un puchero, me empezó a parecer extraño.

-Jajaja, esto me divierte tanto – Rio Hikari - ¡Yo si extrañé esto!

-EN LA AZOTEA-

-¿Entonces él también es un hombre lobo?– Les pregunté sentándome en la manta que había colocado Hikari en el piso.

-No te equivocas, Haruka-chan – Me respondió Daryl – Estaba viviendo en Inglaterra, pero me aburrí y decidí visitar nuevamente a mis dos mejores amigos – Abrazó a Hikari y Yoruishi.

-Ya veo, entonces se conocen desde hace mucho.

-Que molestia, deja de abrazarme – Le dijo Yoruishi.

-Ah~ que aguafiestas – Dejó de abrazarlos.

-¡Bueno hora de comer!

Todo comimos de la deliciosa comida que había hecho Hikari, era comida irlandesa con un nombre difícil de recordar, disfruté mucho de su comida. Al terminar ellos fueron al salón, yo decidí seguirlos después, ya que quería pasar por el baño.

Me lavé las manos y las sequé luego de terminar salí del baño.

-Ese chico de nuevo se anda cortando en el baño, parece emo – Oí decir de un chico quien salió del baño con otro.

-Si tanto quiere morir debería matarse de una vez – Se quejó el otro, ambos siguieron su camino. Aunque me daba un poco de pena, decidí entrar a el baño de chicos viendo a Azusa en los lavabos llenó de sangre sonriendo.

-¡Azusa-kun! – Él se giró a verme tenía la cara roja.

-Ah, eres tú. Cuando tiempo – Sonrió.

-¡Estás sangrando demasiado, deberías ir a la enfermería! – Le dije acercándome a él preocupada.

-No necesito eso, es más debería cortarme más, tú… ¿quieres cortarme? – Me ofreció su cuchillo que estaba en su mano.

-¿¡Por qué querría hacer eso!? – Le quité el cuchillo - ¡No te cortarás más!

-Pero… solo así puedo sentirme bien… vivo… - Sus palabras no me gustaban para nada, tal vez estaba muy dañado para poder entenderlo.

-¿Qué pasa aquí? – Me giré y observé al alto de Yuma - ¿Ah? ¿Qué haces aquí chibi pervertida? ¿Querías ver hombres? – Me dijo divertido - ¿Por qué cargas ese cuchillo? – Miró el cuchillo que le quite a Azusa lleno de su sangre - ¿Acaso cortaste a Azusa? Que sádica.

-¡No! – Lo negué con la cabeza automáticamente – Yo le quité el cuchillo para que dejara de cortarse – Él me miró sorprendido.

-Yo le ofrecí que me cortara y no quiso… - Acotó Azusa.

-Muy bien es todo, Azusa deberías limpiarte pronto entraremos a clases, tú dame ese cuchillo antes de que piensen que mataste a alguien – Obedecí y le di el cuchillo.

Salimos de allí y por suerte nadie estaba por esos alrededores, tal vez hubieran pensado muy mal viéndome salir con dos hombres del baño de chicos.

Seguimos nuestro curso por separado hacia nuestras respectivas clases, encontré a Ruki, quien me pasó por al lado como si nada, a Kou quien estaba como de costumbre con sus fans, aun así me miró y sin que sus fans se fijaran él me sonrió, recordé el brazalete que quería regresarle y no había podido, luego lo haría, cuando no estuviera "ocupado".

Las clases prosiguieron normalmente, Daryl a pesar de todo era muy divertido, pero no podía estar mucho con él ya que las chicas me miraban "celosas".

Aún no sabía lo que había pasado con Yui Komori, pero deje de darle vuelta al asunto, supongo que todo se sabría a su tiempo, pensé. Al igual que mis recuerdos, volverían cuando fuera tiempo de ello.

-HORAS MUCHO MÁS TARDE, HABITACIÓN DE HARUKA-

Normal POV

-Debes regresar.

Escuchó decir mientras ella caía.

-¿Pero dónde estás? – Preguntó.

-Tú debes recordar, tú debes saberlo.

-¡No lo sé, por favor dime! – Dijo entre lágrimas mientras seguía cayendo

Haruka despertó de su sueño, con lágrimas en los ojos.

-¿Por qué lloro? – Se preguntó mientras secaba sus lágrimas.


¡Fin del capítulo 1! ¡Espero les haya gustado!

Me gustaría saber sus opiniones sobre el nuevo personaje: Daryl. La verdad se me hizo un amor crearlo, me gustó bastante este personaje xD Dibujarlo me pareció aún mejor, ¡pronto publicaré algún dibujo de él en mi deviant art!

¡Nos vemos en el próximo capítulo!