Sentado desde su pupitre, Dave Strider, miraba al ojiazul que estaba sentado un par de mesas más allá de la suya rodeado de gente. Otro día más que volvía a pasar de él, para variar. Desde luego Egbert había cambiado mucho desde aquella vez.
-…-
Eran amigos de la infancia, y desde siempre Dave había intentado ser un chico guay, siempre se hacía el macho sobre todo delante de John, pero John sabía perfectamente lo que había detrás de lo que quería aparentar…
[Hace 12 años, cuando tenían 5]
-¡John! ¡No te rías! ¡Soy tu héroe! ¡Y soy el chico más guay de toda la ciudad! –Gritaba desde el sofá en el que se mantenía de pie con esas gafas de sol picudas como las de su hermano que llevaba en ese entonces, y una manta atada a su cuello a modo de capa. Dejaba reposar ambas manos a los lados de su cintura como si así consiguiese imponerse.
-¡Hahahahaha! –El moreno no podía dejar de reír desde el suelo, tumbado y agarrándose la tripa mientras miraba a su amigo.
-Si no dejas de reírte no tiene gracia. Se supone que estás en apuros y te tengo que salvar. –Le informaba mientras se bajaba del sofá y se acercaba hasta donde estaba su amigo para darle u chorlito en la frente.
-¡Ah!
-¡Eso por no tomarte en serio a tu héroe!
-¡Pero Dave! Es que no lo podía evitar… ¡Era muy gracioso verte así!
El otro se giró cruzándose de brazos ofendido por su comentario. Nunca podía jugar a estas cosas con Egbert, siempre se acababa riendo y no le tomaba en serio. Le molestaba que no pudiese verle como un héroe, realmente soñaba con ser un héroe muy guay, al menos, para los ojos de John. Como por arte de magia su molestia se esfumó al sentir unos brazos que le abrazaban por la espalda.
-Jo…No te enfades Dave…Solo bromeaba… ¡Claro que eres un héroe! –Le intentaba animar el moreno con una gran sonrisa en los labios.
El rubio pudo sentir como sus mejillas se acaloraban y esto producía un leve color rojizo en ellas. No puedo evitar sonreír y girarse en sus brazos para corresponderle al gesto y acomodarlo entre los suyos. El otro apoyó la cara en su pechó y cerró los ojos, realmente a gusto de aquella manera.
-Soy tu héroe, tu caballero, tu único caballero ¿Me oyes? Nadie más puede serlo. –Advirtió mientras apretaba algo más el abrazo para acurrucar al ajeno.
John asintió con la cabeza como respuesta y esbozo una gran sonrisa de las suyas.
-…-
-Tu caballero, tu único caballero…-Se repitió a sí mismo en voz casi nula aún sentado en su pupitre cuando se dio cuenta de que ya había tocado la sirena que indicaba que las clases habían acabado por ese día.
Cuando dejó de embobarse se levantó recogiendo sus cosas y guardándolas en la mochila. Cuando fue a dirigirse a la mesa de John para ir juntos a casa volvió a recibir la misma respuesta que llevaba recibiendo casi todo el curso; "Hoy me iré con tal a casa. Espero que no te importe."
Ya no sabía ni porqué seguía intentándolo. Asintió con la cabeza y salió solo de la clase, como no era nada nuevo ya llevaba preparado "entretenimiento" para el camino. Sacó su móvil y auriculares y, tras colocarse estos últimos en los oídos, inició una lista de reproducción de raps.
Cuando al fin llegó a su casa se dirigió directamente a su cuarto para dejar allí sus cosas. Soltó de cualquier manera la mochila sobre la cama y el móvil junto a los auriculares aún enchufados sobre la mesa al lado de su ordenador, ordenador que inició tras dejarse caer en la silla de su escritorio. Como si fuese un ritual abrió su página de comics he inició Pesterchum. Como esperaba; "ectoBiologist desconectado". Últimamente nunca estaba, siempre se iba por ahí de fiesta con sus nuevos amigos, joder, ese no era John, ese no era *su* John.
Soltando un profundo suspiro mientras se dejaba caer en el respaldo miraba la pantalla donde podía ver a solo una persona conectada "tentacleTerapist". Lo cierto es que era una gran amiga, casi una hermana para él, cuando tenía problemas siempre le escuchaba, y parecía ser la única que le apoyaba. Se incorporó para iniciar una conversación con ella pero antes se quitó las gafas, cansado, cosa que no debió haber hecho. Cuando las miró y las dejó sobre la mesa se le vino otro recuerdo a la cabeza.
[12 años]
-Solo es un pequeño regalo. ¡Felicidades!
El rubio empezó a desenvolver el regalo que acababa de recibir del ojiazul. Lo cierto es que no se esperaba gran cosa pero por alguna razón el regalo le hizo bastante ilusión; eran unas gafas de sol. Se quitó las suyas y se probó las nuevas, tras mirarse al espejo esbozó una pequeña sonrisa ladeada, lo cierto es que le gustaba como le quedaban.
-¡Ahora sí que pareces un chico muy guay!
-Siempre lo he sido, Egbert. Pero gracias
El moreno le sonrió y se lanzó a abrazarlo contento de haber acertado con el regalo. Sabía lo mucho que intentaba mantener una fachada de chico guay, y últimamente en el colegio se estaban burlando de él por sus ridículas gafas. No le importaba que fuese un chico guay, le parecía algo inofensivo, y mientras él supiese como era en realidad estaría bien.
-¿No te pondrás celoso si cuando entremos al instituto las chicas se lanzan a por mí?
-¡No es como si tuviese razones! Pero igualmente…Eres mi caballero ¿no?
-Claro. –Afirmó con una sonrisa ladeada mientras volvía la vista al espejo, en el cual se veía al moreno abrazándole entusiasmado por la espalda.
Bueno, pues me inspiré para esto cuando estaba intentando escribir "Between camaras" _U
Ya seguiré ese fic lo prometo. Pero ahora tengo más trabajo porque este no se termina aquí, no se como de largo será pero lo cierto es que de momento no creo que mis ideas me den para mucho (?)
Espero que os guste y seguramente no os haya dado los feels que a mi me ha dado al escribirlo pero eso es porque yo se lo que va a pasar -risa malvada y le tiran piedras por la obviedad(?)-
Hasta la próxima o/
