Atención!.- Supercampeones es propiedad de Yoichi Takahashi así que por favor no me demanden..

Un nueva amiga

Italia, tiempo actual, Ciudad de Milán, al norte de este país, llamado la gran bota del mediterráneo, pero también, la cuna del calcio, del futbol. En esta historia, destaca el personaje de Aoi Shingo, que apenas en seis meses, se convirtio en titular de su equipo, no destacaria sino fuera por una cosa:que es japones.
Tras ganarse el puesto como delantero titular en el equipo juvenil del Inter de Milán, Aoi entrena muy duro para poder llegar a la serie A italiana, donde han pasado las mejores estrellas, desde R. Baggio hasta el genial Ronaldo. Ahora que el Inter esta en el campeonato nacional, Aoi debe demostrar más que nunca, que el sera el mejor. Todo parece normal, pero aquí inicia nuestra aventura.
-Ah! - bostezo Aoi mientras veía la T.V., había terminado de entrenar con su chaleco de plomo, y como era sabado, no tenía más que hacer. Siguió cambiando de canal (tal vez el deporte más odiado por todas las mujeres, pero a nosotros nos parece divertido) hasta que finalmente apago el aparato. Se quedo viendo al techo un buen rato
-Porque todo esta tan aburrido, rayos - pensaba cuando oyo una voz de abajo (el vive en el segundo piso de la casa)
-¡Aoi! Hora de cenar!-
-Ya voy Tía - se levantó de un salto y bajo rapidamente las escaleras -Buenas noches Tía
-Sientate, hoy hice de cenar una salsa que me quedo muy bien
-Gracias, ya tenía hambre - sonrió mientras se sentaba.
La sra. Andretti, tía como el llamaba, era la viuda de un tío de Aoi que vivio en Italia por espacio de 10 años (y que en cierta forma le enseño por medio de cartas a hablar italiano a Aoi). Ella acepto al chico con la condición de que pagara la renta. Pero ya le había tomado cariño...
-Esto esta delicioso - musitaba mientras devoraba el plato
-Siempre estas hambriento, ten cuidado, no te vayas a ahogar
-Chomp!..no, para...grumpp, nada... - dijo cuanto termino la última porción - Estuvo riquisimo, gracias Tía
En eso sono el reloj de la casa, que marcaba las 9 de la noche, le ayudo a recoger los platos. -Bueno, sera mejor que me vaya a dormir, buenas noches...
-Buenas noches, oye, espera Aoi, puedo pedirte un favor
-Sí¿Cuál?
-Bueno, es que necesito que vayas a recoger a alguien mañana al aeropuerto, es que una sobrina viene de visita y...
-Oh no penso De seguro quiere que la lleve de tour
-Y como no conce la ciudad, tal vez podrías llevarla a conocer la ciudad de Milán
-Lo que pense- sonrió, por un momento dudo, pero viendo la ayuda que le había dado su tía en todo este timepo, acepto de buena gana.
-OK, cuando la recojo? - exclamo el chico. Al día siguiente, se encontraba esperando en el aeropuerto, con un dizque rídiculo letrero (bueno, el pensaba así). Traía puesto unos pantalones de mezclilla, tenis, y su clasica sudadera. No iba vestido formal, solo quería hacerle un favor a su tía, por lo que no iba muy contento para recibir a la visita. Fue entonces cuando recordo lo que le dijo su tía
-"Su nombre es Rocío Cordopatri, viene de Napolés por una semana. Parece que planea estudiar en esta ciudad y por eso viene a ver como es aquí, tratala con respeto, entendido?
-En que líos me meto - exclamo Aoi - podría estar entrenando ahora en el parque y no haciendo esto
En eso, el avión proveniente de Napolés aterrizó, y tras algunos minutos, los pasajeros pasaban frente a Shingo, que sostenía el letrero. Comenzó a recordar cuando el llego a esta ciudad y la primera vez que vió a Roberto Baggio, nunca olvidaría ese momento y...
-¿Aoi¿Eres Aoi?
-¡Qué! - exclamo el chico despertando del sueño, entonces oyo una risita y elevo la vista. Era una chica que estaba inclinada hacia él con una sonrisa algo pícara.
-Sí, lo soy - dijo apenado - soy Aoi Shingo
-Mí tía me platicó de tí, hola, soy Rocío...mucho gusto- le estrecho la mano y le dio un pequeño beso en la mejilla. A Aoi no le agrado mucho, pero era mejor que los besos que a veces le daba Karimeo (En Italia, los besos son comunes como forma de saludo).
Mientras recogían las maletas, Aoi analizo a su acompañante. Era de tez blanca, cabello castaño que le llegaba a los hombros, estatura mediana, delgada, vestía una blusa blanca con unos pantalones de mezclilla azules, pero sobre todo, tenía unos grandes ojos de color avellana. No cabía duda de que era muy bonita (se idéntica a alguien que conozco, jeje). En cierta forma, esto lo hacía sentirse incomodo.
-Le ayudo srita. Cordopatri - Cortesmente tomo las maletas ante la sorpresa de Rocio. Al principio las noto algo pesadas
-Uff, que trae piedras o que - penso - pero al menos me servira de entrenameinto
Los dos salieron del aeropuerto y mientras pedían un taxi, Aoi vió sus ropas y se sintió mal
-Rayos, debi ponerme otra cosa
-¿Qué dices?
-No, nada srita. - dijo tratando de evitar mirarla, pues sí lo hacía, de seguro se sonrojaría. Más tarde en el taxi, seguía sin dirigirle la palabra, menos la mirada. Rocío lo noto...
-¿Así que eres japones?
-Sí srita. - dijo mirando al piso del taxi - porque?
-No, por nada - se agacho hasta el nivel de Aoi y le puso una cara de espanto - ¿Acaso estoy tan fea?
-No, para nada, solo que...es que es muy linda - se sonrojo el pobre Aoi, pero al volver a ella, esperando una risa, noto que ella también se sonrojaba. Esto le dio algo de confianza
-Bueno, si soy japonés, vine a Italia, para jugar en la serie A, es mi gran sueño,y también el de ser campeón con Japón
-Ya veo - contesto - mi tía tiene razón, eres un fanático del futbol
-No es para tanto - se toco la nuca con la mano - solo que me gusta jugarlo.
-Mi hermano también juega en la serie A junior, el esta en el equipo del Napolés
-Oh, que bien!
-Bueno, me gusta el futbol, pero no tanto como para ir a un estadio...soy una fanática regular, estando en un país tan futbolero como Italia
-No diga eso, espero invitarle a algún partido y vera que es divertido
-Lo dudo, oye, a proposito¿Cómo sabes hablar italiano? (el fanfic esta escrito en español, no pienso pasarlo al italiano!)
-Es que mi tíos me enseñaron, pero aun recuerdo mi natal japones
-Que interesante, yo en cambio se inglés my friend
-I see srita. Cordopatri - sonrio mientras la chica se reía
-That´s very well! - Rocío asintio, pero luego puso cara de enojo
-¿Qué pasa srita.?
-Nada, salvo que no me digas srita.
-Pero...
-Nada de peros - puso una cara de enojo - no soy de la realeza o algo por el estilo, si me vuelves a decir srita., yo te dire Srito. Aoi, ENTENDIDO? Solo dime Rocío
-Glup, esta bien señ...digo, Rocío - dijo apenado. Rocío sonrio, se volvio a la ventanilla y luego se inclinó hacia el chofer - aqui esta bien, puede dejarnos aquí
Aoi se extraño y unos momentos después, estaba cargando equipaje de Rocío, que consistía en dos maletas y uan bolsa pequeña. Como habiamos visto, algo pesadas. Por suerte, el entrenamiento le ayudaba (por pesos similares) y no se sentía tan mal, aunque no contaba con que Rocío se moviera tan rápido. Le seguía el paso como podía, mientras la chica miraba y tomaba fotografías a todo lo que veía. Así estuvieron dos horas, visitando edificios antiguos, viendo museos, algunas tiendas (a esta altura, Aoi traía para colmo un par de bolsas con ropa nueva), etc. Aoi ya comenzaba a cansarse...
-¿Supongo que debes estar agotado?
-Este - dijo sorprendido - No tanto..
-Pobrecillo, necesitas un descanso - se rio mientras Aoi ponía una mueca de sufrimiento - Sera mejor que descansemos en esa plaza
-Ahh - suspiro mientras dejaba caer las maletas, Rocío le trajo unos helados y al terminar de comerlo, se sorprendio cuando este se puso de pie rapidamente, parecía que había recuperado su energía.
-Me sorprende qwue hallas aguantado tanto
-¿Acaso me estabas probando? refunfuño
-Más o menos...- Aoi se quedo pensativo. Sin querer habían llegado a la plaza donde acostumbraba trabajar. No pudo evitar tener recuerdos amargos
-¿Pasa algo?
-No, nada, solo recordaba
-Podrias contarmelo? - pregunto Rocío con cierto acento de curiosidad
-Bueno... - Aoi dudo sobre contarle sobre su pasado. Salvo Karimeo y Ginno, nadie más lo sabía. Por alguna extraña razón, decidio contarselo - Esta bien...
Rocio asintió y durante una hora estuvo contandole como conoció a Oliver Atton, como eso le impulso a venirse a ITalia y jugar aquí. Sus problemas iniciales con los jugadores del Inter así como el estafador que casi lo regresa a Japón. Su amistad con Ginno y su futuro...el campeonato...
-¿Y que opinas? - termino el chico temiendo que ella se habría aburrido con su plática, pero resulto todo lo contrario, estaba muy entusiasmada
-Has tenido una gran vida - dijo - En cambio yo...mi vida ha sido algo aburrida
-No te creo, porque ahora me la cuentas - dijo Aoi con una sonrisa muy picara. Rocio asintió
-Bueno, pero si te burlas - levanto la palma de la mano y el chico acepto el trato - Muy bien, pues yo...
Rocío le platicó que ella era italiana, igual que su padre, pero su madre era de origen griego. Sus padres son una de las familias más ricas de Napolés, así que ha estado en las mejores escuelas y que tiene una educación muy variada. Pero a pesar de todo, dijo que son sencillos, y también le platicó sobre su hermano que es defensa libero del Napolés. Aoi escucho atentamente...
-¿Espero no haberte aburrido?- dijo finalizando su platica
-ZZZ¿Qué decías?
-¿Acaso te dormiste? - murmuro enojada
-No, solo bromeo, tu vida es mucho mejor que la mía
-¿Lo crees?
-Claro que sí... -Aoi sonrio mientras Rocio se sonrojaba. El chico se quedo extraño de las actitudes de la chica. Parecía ser muy segura, por su forma de vestir y comportarse, pero al mínimo comentario hacia ella, se emocionaba o se sonrojara.
-Que rara es - penso - pero es muy bonita...
En eso, un balón de soccer cayo a los pies de la pareja.
-Disculpen, podrían pasarlo? - dijo un niño desde el otro lado de la plaza. Aoi se levanto y comenzó a dominarlo de una forma genial mientras Rocío lo miraba
-Allí te va - y con una genial maroma, patea el esferico que regresa al chico, que enseguida parecio reconocerlo
-¿Eres tu Aoi Shingo, el que se pone a hacer demostraciones de futbol?
-Sí, a proposito, creo que es hora de un poco de ejercicio, me lo prestas?
-Claro - dijo mientras le gritaba a los chicos que estaban con él - Hey amigos, Aoi va a hacer una demostración.
-Bien, a empezar - Shingo comenzo a dominar primero el esferico sin dejarlo caer por espacio de 5 minutos y luego comenzo a hacer piruetas con él, haciendo que los aplausos fueran numerosos. Rocío miraba entretenida la escena.
-Es increíble - musito en silencio. Al final, Aoi trato de saltar y pegar el balon con el talón, pero fallo y cayo de bruces. Esto desperto las risas de todos mientras Aoi se levantaba tratando de aparentar que fuera parte del espectáculo. Finalmente se inclinó dando una reverencia y gracias
-Eso fue todo, ahora si son tan amables - saco un sombrero - y comenzó a recolectar dinero mientras Rocío solo lo veía sonreir como idiota...
-Es un buen chico - penso - solo que algo atolondrado
Aoi seguía dando gracias hasta que el publico se retiro y el sombrero estaba hasta reventar de dinero. Este sonrió maliciosamente mientras miraba tal cantidad
-Hoy fue un día esplendido, y... - se volvio y vio a Rocío con una mueca en la cara - upss...creo que me olvide de ti, lo siento
-Veo que así te ganas el pan de cada día
-Es que yo... - escondio el sombrero apenado - no creas que soy una especie de mendigo, es que...
-No tienes que dar explicaciones, al contrario, me gusto mucho tu espectaculo
-¿Lo crees?
-Claro, fue excelente, no sabia que dominaras el balón de tal forma
-Bueno...fueron años de esfuerzo, originalmente yo no iba a hacerlo, pero cuando llegue a Italia, se me ocurrio junto a la bol.. - Aoi se tapo la boca mientras Rocío fruncia el cejo
-¿Junto a la que? - pregunto intrigada
-A la nada, a la nada - dijo tratando de zafarse - olvidado simplemente
-Ya veo - se levanto y se puso las manos en la cadera - entonces quieres otro tour por las tiendas... - sonrio malevolamente
-Este...yo...por favor Rocío, no me hagas esto
-Dime o sino...
-Es algo muy vergonzoso
-Entonces boleas zapatos?
-¿Cómo¿Quien te lo dijo? - respondio sorprendido - ¿Quien te dijo? Acaso fue mi tía..
-No, simplemente le atine - dijo sacando picaramente la lengua mientras Aoi se caía de espaldas
-De seguro debes pensar que es un trabajo denigrante - se apeno
-Bueno, en cierta forma sí.. - Aoi se quedo mudo de la pena - je, solo bromeaba, no te asustes, en realidad cualquier trabajo es bueno, si da para comer...al fin, te ayuda a sostenerte o no?
-Sí, en cierta forma, me da buenos dividendos, pero realmente no lo necesito
-¿Entonces porque trabajas?
-Es por una persona que me ayudo cuando estaba llegue aquí...es una larga historia
-Veo que solo me contaste de algunos detalles, luego me diras el resto
-Eso espero y... - de nuevo el balón cayo a pies de los dos.
-Me permites? - dijo bromeando
-Por supuesto - se rio Rocío. Aoi asintió y cuando pateo el balón, se resbalo sin querer y cayo de bruces. El esferico llego a su destino, pero Aoi yacía en el suelo doliendose. Rocío no pudo evitar carcajearse de la escena
-No te burles, eso me dolío...
-Es por eso que me río - dijo entre dientes. Aoi se levanto, pero noto que algo faltaba
-Mis monedas - comenzo a buscar en el suelo - ¿Donde estan?
-Te preocupas por unas monedas...no creí que fueras tan tacaño
-No es por eso, son importantes para mí - exclamó mientras revisaba abajo de las mochilas
-Te refieres a esto? - señalo una pequeña bolsa tirada a un lado de la fuente
-Eso mero - se lanzo sobre la bolsa y la froto del polvo.
-Que apego al dinero - fruncio el cejo Rocío
-No es por eso, como te decía - saco 4 monedas que se las mostro - son mi talismán
-No les veo nada especial - las miro con indiferencia - solo que son de 4 países distintos
-Así es - las volvio a guardar - son de EUA, FRANCIA, JAPON Y COREA
-¿Y?
-Son de los 4 países que han organizado o organizaran las últimas copas del mundo, USA 94, Francia 98 y en el futuro Corea/Japón 2002.
-Aun no les veo el chiste
-Es que Oliver me las dió
-Te refieres a ese chico japonés que me platicaste, al capitán de la selección japonesa
-Exacto, son mi promesa de ir a la copa mundial con él
-Vaya que eres un fanatico del soccer, no me parece tan importante
-Bueno, sin ellas ya me hubiera dado por vencido muchas veces - Aoi sonrio mientras veía la cara de aburrimiento de Rocío - Creo que ahora si te hastíe, sera mejor que vayamos a casa de Tía
-Esta bien, pero antes - Rocío abrió una maleta pequeña y saco un violín de madera - me prestas tu sombrero?
-Sí, porque?
-Ya veras - sonrio pícaramente y comenzo a tocar una hermosa melodía mientras Aoi se sentaba a escucharla. La música del violín comenzo a inundar el ambiente y los peatones que iban de paso se paraban a escuchar tan hermoso sonido. Aoi simplemente estaba impresionado mientras miraba a Rocío ejecutar con maestría el instrumento de cuerda.
-Es increíble - dijo mientras la gente se arremotinaba. La melodía era muy relajante y a la vez entretenida. Cuando termino, las personas aplaudieron y comenzaron a depositar billetes en el viejo sombrero ante la espectación de Aoi. Cuando se retiraron, Rocío guardo el violín a la vez que Aoi examinaba cuanto dinero tenían
-Esto es sorprendente - musito - recolectaste más dinero que yo
-Es cuestión de ver quien es el mejor
-¿Que me quieres decir?
-Nada, no te enojes, solo que yo también he tenido mis trabajos
-¿Quieres decir que tocas el violín para ganar algunas monedas?
-Cuidado, no son monedas, son billetes - sonrio mientras le daba todo lo ganado a Aoi - toma, es para tí
-Pero no es necesario...
-De todas formas, al fin, todos los días funciona, con que crees que puedo comprar tanta ropa
-Tramposa, de seguro lo haces, además del dinero de tus papás
-Más o menos, pero no me regañes, para algo tiene que servir todo lo que te enseñan
-De todas formas eres una tramposa - refunfuño Shingo.
-Que gruñon saliste, bueno...mañana lo volvere a hacer
-Otra vez!
-Claro, este es un buen lugar, no objetaras o sí?
-Quien te entiende - levanto las mochilas - mejor vamonos
Rocío no dijo nada y siguió al chico que todavía refufuñaba.

Más al rato, fueron a comer un restaurant italiano, Aoi pidio unos rabioles (que se había vuelto su comida favorita en Italia) mientras Rocío pidio espaguetti, pero 3 porciones que termino comiendose. Aoi solo la miraba comer muy sorprendido
-¿Como diablos le hace para mantener esa figura con lo que come? - penso mientras ella iba por un cuarto platillo
-no te preocupes - dijo notando la cara de Aoi - yo pagare
-No es eso, sino la canti...upss, lo siento
-No te preocupes, no siempre como así, pero como es ocasión especial, decidi comer lo que sea, mañana otra vez a la normalidad. Es que necesito mucha energía
-¿Para que? - dijo Aoi mientras iba a tomar un vaso de agua
-Pues vamos a visitar más tiendas
-Burfff - Shingo escupio el agua - ¿A hacer que!
-Sí, así que termina rapido
-No es justo - dijo desmoralizado (como ven, aquí la coprotagonista es la que come más, no el protagonista, ejemplos: Serena, Lina Inverse, etc.).
Al terminar, No cabe decir que Rocío encontro más tiendas en el camino mientras Aoi tenía que hacerla no solo de maletero, sino de mayordomo y cargador. Al final, traía una montaña de cosas y Rocío todavía visitaba más lugares (y más cosas que cargar)
-Disculpa, no dijiste que no habría más compras?
-Pero Milán tiene muchos más lugares de los que imaginaba, vamos, solo un poco más
-Se hace tarde - dijo tratando de señalar el reloj - la tía se preocupara
-No hay problema, ella sabe que llegare tarde a la casa
-¡Qué!
-Así es Aoi, todavía hay luz y hay que seguir
-Oh no! - le salio una gota mientras la chica seguía viendo aparadores. Finalmente, como a las 7 de la noche, Rocío decidio terminar su travesía y emprendieron el camino a casa (y no en taxi). Aoi estaba sumamente agotado, había olvidado el ideal del entrenamiento y solo quería acostarse en su linda cama. Por otro lado, Rocío parecía estar llena de energía y caminaba a un buen paso (para lástima de Aoi). En el camino, pasaron frente a algunos chicos vestidos como pandilleros (bueno, eran pandilleros sí) y se acercaron a la pareja
-Oye lindura - le dijo uno de ellos - no quieres salir con nosotros
-Lo siento, pero no eres mi tipo - dijo ignorandolos Rocío
-Pues nadie pidio tu opinión, así que vete preparando - los maleantes se pusieron alrededor de la pareja. Aoi no tenía la minima idea de lo que pasaba, con tanto paquete que traía
-Dile a tu amigo de las cosas que no se meta - exclamo uno de ellos
-Oye, que pasa Rocío?
-Solo unos chicos que estan de visita, pero ya se van - dijo la chica muy confiada. Esto irrito a los pandilleros
-Acaso crees que bromeamos?
-No, pero yo tampoco, vayanse o saldran lástimados
-Eso lo veremos - uno de ellos se lanzo pero Rocío lo recibio de una patada en el estomago que lo hizo caer de bruces. El resto de la pandilla la rodeo
-No te sera tan fácil con nosotros - dijo uno sacando un cuchillo. Rocío vio la situación con algo de preocupación, pero entonces...
-Disculpa - se oyo atras de los maleantes - pero si la tocas...
Aoi saco un puñetazo que noqueo a uno de los maleantes. Los demás se lanzaron pero Shingo los detuvo a base de patadas, esquivando sus ataques como si fuera Bruce Lee. Rocío observaba con admiración. Finalmente quedo el del cuchillo
-Me las pagaras! - se lanzo con todo, pero Aoi dio un giro y con un golpe en la muñeca, lo despojo del cuchillo y lo pateo hacia Rocío que lo recibio con un fuerte golpe en la cara. Este cayo muy adolorido y saliio corriendo junto a sus demás compañeros. Rocío se acerco a Aoi que recogía los paquetes que había dejado en el suelo
-Gracias por todo, me salvaste
-No es nada, tu pudiste haberlos controlado, sabes defenderte muy bien
-De todas formas, te mereces una recompensa
-Otra vez dinero? - penso Aoi pero lo que recibio fue un beso en la mejilla. Al acto se sonrojo mientras Rocío sonreía
-Ahora sí la tía debe estar preocupada, vamos...
Aoi tardo en reaccionar, pero rapidamente estaba trás Rocío que corría calle abajo

Ya en la casa, la tía le dio la bienvenida a Rocío mientras regañaba a Aoi por no traerla temprano, claro que el se excuso diciendo que ella tenía permiso
-¿Lo engañaste cierto? Cuando aprenderas
-Lo siento - se disculpo Rocío
-Me engaño! - dijo Aoi entre enojado y sorprendido - Rayos! mejor me voy a dormir, nos vemos mañana
-Pero...
-Hasta mañana - Aoi subió rapidamente las escaleras mientras Rocío y la tía se reían
-Pobre muchacho, lo hiciste sufrir mucho
-Sin embargo nunca se quejo realmente, es un buen chico
-Ya lo creo, muy honrado y trabajador, vamos, hice de cenar..
-Que bien! te acompaño tía..
Mientras, arriba, en la habitación de Aoi..
-Que chica - murmuro Aoi mientras miraba el techo - como pudo hacerme eso!
Pero luego comenzo a recordar otros momentos divertidos que tuvo y sonrio
-Sin embargo, no es tan mala, espero entenderla bien - dijo mientras apagaba la luz de su cuarto. Mientras, Rocío ya estaba en su habitación desempacando y noto que estaba al otro lado del cuarto de Shingo.
-Creo que mañana le hare una broma - sonrio malevolamente - pobrecito, no se la merece, pero me divierte
Finalmente, todas las luces de la casa se apagaron. Aoi y Rocio, acostados, meditaban sobre el día que había tenido
-Buenas noches Rocío/Aoi- dijeron al mismo tiempo y cerraron los ojos. Otro día se gestaba...

Fin del capítulo...

Notas del autor
Mi primer fanfic de supercampeones, al fin pude hacer uno. Espero que me este quedando bien...como no he visto los mangas recientes de Takahashi San, no se como llenaron el hueco de Aoi durante estos dos años, antes de que entre a la selección juvenil así que yo lo estoy haciendo con esta historia. Los nombres que uso y que usare son de personas que conozco, pero cualquier coincidencia con la realidad es circunstancial (bueno, casi). Prometo mejorar el siguiente cuando se me quite este bloqueo de escritor. También hare uno de Al Jones, uno de mis personajes favoritos (y casi no utilizado portero del Newppy y de la selección japonesa)...Ahora disfruten de este tan peculiar personaje de Supercampeones...ah, también hice el cambio con las monedas, originalmente eran 3, pero como la serie fue hecha antes de la elección de Corea y Japón como sedes del mundial del 2002, solo pusieron a Japón, así que yo también meti la moneda Coreana, dando el total de cuatro. Si este fanfic se prolonga, tal vez veamos 5 monedas cuando se eliga la sede del 2006. Nos vemos en el siguiente capítulo...