Nota preeliminar y obligatoria de leer:

Buenas a todos nuevamente. Como leerán, he vuelto con otro fic de Megaman NT Warrior (o más corto, Megaman.EXE). Y como ya sabrán, este fic contiene yaoi (relaciones entre hombres) y lemmon (relaciones sexuales explícitas entre hombres), ya que ningún fic se escapa de mis retorcidos y pervertidos gustos. También, hay algunas escenas que probablemente les den asco. Aclaro que son mutilaciones y explícito detalle del mismo (o sea, mención de cómo está mutilado, si se le ven los órganos, o cómo está puesto el cuerpo y dichos órganos). Por lo tanto, les sugiero discreción ante ciertas escenas del mismo.

Si no te agrada este tipo de género, por favor, te pediré de la manera más cordial que cierres la ventana o que vayas hacia atrás. Por el contrario, quédate y disfruta.

Acepto cualquier pregunta, duda y/o crítica a excepción de aquellas que se refieran a que esto es un ultraje, algo inmoral o cosas por el estilo cuando yo he escrito anteriormente lo que tenía el siguiente contenido. No me hago responsable si no leíste esto primero.

Otras aclaraciones; aparte de mi ya sabido carácter pervertido, este fic será un universo alterno, lo que significa que es una historia diferente a la orginal. También es un crossover (es decir, mezcla de animes y/o juegos), con Boktai, pero aún así espero que disfruten de la historia tanto como yo lo hago de hacerlas.

Parejas: LanxChaud Saito(Megaman)xBlues(Protoman)

Como no tengo nada más que escribir por el momento, los dejo para que sigan con su lectura. Atte, Dreigon Master of Dragons.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Dos cuerpos yacían en el suelo, ensangrentados y sin vida.

-No... ¿Por qué, por qué? Ellos... no...

-Cállate. Es por la culpa de ambos que estos dos jóvenes murieran.

-No es cierto, no es cierto...

Sus lagrimas y las de su hermano rodaron por su rostro y cayeron al suelo. Estaban encadenados al ataúd. Los cazadores tomaron las tapas, y cerraron los ataúdes.

Grabaron sobre ellos una especie de emblema y sin más se retiraron.

-Hermano... –dijo el menor, luego de media hora, sintiéndose con mucho sueño.

-¿hum?

-¿Los volveremos a ver?

-No lo sé.

Ambos guardaron silencio un largo rato.

-Si reencarnan...

-Los encontraremos.-dijo severamente el mayor.-Aunque pasen trescientos años...