Tenía tanto miedo de regresar, pero no podía postergarlo más, tenía que recuperar su vida, esa que perdió por cobarde, le tomó un par de años tener el valor de regresar, en realidad no, desde el primer día iba a regresar, pero tenía miedo, emily no la iba a perdonar, o al menos eso creía, ahora ya había pasado tiempo, mucho tiempo, y tenía que solucionarlo
-Em…
-¿Qué haces aquí?
-Regresé
-Dime algo
-¿Qué quieres que te diga alison? ¿Bienvenida?
-Lo dices con tanto sarcasmo, tú no eres así
-¿Que yo no soy así? Han pasado un par de años, -definitivamente no me conoces
-Lo hago Em
-Si tú lo dices, tengo muchas cosas que hacer, si me disculpas…
-Em… por favor
-No tengo nada de que hablar contigo
-Escúchame
-No Alison, ¿que ganas con regresar?
-Quererte a ti, nos quitaron esa oportunidad
-No, tú lo hiciste, No te engañes, tú perdiste esa oportunidad, nadie te la quito
-No, no fue así, si llegué
-Mientes, te espere, te esperamos hasta que ya no podíamos
-Llegue, pero ya era muy tarde, Créeme carajo
-¿Por qué debería hacerlo? Siempre me has mentido
-Lo siento
-Tus disculpas no me sirven, me destrozaste, nos destrozaste
-Quiero verlo
-¿Después de estos años?
-Por favor Em
-No, Alison, le hiciste mucho daño, se sentó cada día en la puerta esperando que llegaras, lo hizo durante mucho tiempo, hasta rendirse
-Déjame explicarte
-No necesito tus mentiras, dejaste muy clara tu decisión
Aquí vengo con una nueva historia, espero les guste, dejen sus comentarios