Lazy Town no me pertenece y este es el segundo fic que hago
Era de noche en Lazy Town, todos estaban en la cama, todos menos Robbie Rotten. Robbie estaba terminando su último invento para deshacerse de Sportakook. Sportacus el solo pensar en su nombre le producía un hormigueo en el estómago. A decir verdad siempre se lo había producido. Pero no sabía lo que era aquel extraño sentimiento y como no lo sabía pues prefería deshacerse de él. ¿para qué engañarse? Le amaba, mucho más de lo que nunca había amado a nadie. Amor menuda tontería eso era lo que siempre había pensado, unas lágrimas cayeron por sus mejillas
-Robbie… - dijo una voz, inconfundible, a sus espaldas.
Oh no, estaba tan metido en sus pensamientos que no se dio cuenta de la incursión del duende en su guarida -¿Qué haces aquí?, ¿no se supone que deberías estar durmiendo? – pregunto el auto-proclamado villano
-sí, yo estaba en mi súper-dirigible, durmiendo, pero mi cristal se puso a pitar. Mire por mi binocular y al no ver nada, supuse que se trataría de ti – dijo el héroe, para después bostezar
ya o sea que se ha levantado solo por mi -pues has fallado en tu suposición – dijo Robbie
-elemental mi querido Robbie, pero siempre pensé que alguien tan listo como tú se aseguraría de no dejar pruebas. Pruebas de que hace nada estabas llorando – dijo Sportacus
-es que hace nada estaba llorando – dijo Robbie
-y ¿Por qué llorabas? – pregunto el héroe
-¿me prometes que no te reirás? – pregunto Robbie, con algo de miedo
-te lo juro – dijo Sportacus
-es que cada vez que te veo o que pienso en ti siento como mariposas en mi estómago – dijo Robbie.
Sportacus se le acerco y le dio un tierno beso -sabes algo yo también las siento – dijo Sportacus
un poco corto ¿eh? Pero lo que cuenta es la intención
