Noche
Me hice ninja para poder evitar muertes como las de mis padres. Para dejar de temer a las armas, siendo yo una arma de la villa. Por que eso es lo que somos los ninjas armas más o menos valiosas, pero armas al fin y al cabo. Por esa razón no debemos de tener sentimientos dicen los mejores. Pero yo conozco a alguien que es el mejor y que cree que los sentimientos hacen más fuertes a las personas. Que los sentimientos son los que deciden por nosotros que caminos queremos tomar y que sentido queremos darle a nuestra vida. Que algunos como el odio te pueden hacer un ninja frío e invencible y otro como el amor te pueden hacer entregar tu vida por lo que quieres. Eso me lo dice aquella persona que dice no comprender el amor. La persona que ha vivido en la oscuridad, pero que ahora esta llena de luz. Yo nunca conocí a mi sensei antes de que cambiase, pero se que el me cambio a mi. Quito el miedo de mi mente, me enseño todo lo que el había aprendido antes. Y yo intente enseñarle que era el amor. ¿Pero quién era yo para explicárselo si tenía pavor de demostrarle el mío?
Amor.
Aquella palabra de cinco letras que tanto costaba comprender.
-¿Qué es lo que se siente cuando se esta enamorado?
Le pregunte de repente.
-Bueno… sientes que lo único que quieres hacer es estar con esa persona, siempre piensas en ella y sientes que nunca quieres separarte de ella.
Medité sus palabras unos minutos.
-¿Puede que yo este enamorado?
-Claro todo el mundo puede estarlo.
Aunque creo ya haberla comprendido un poco más.
Y mas ahora que sabia que le gustaba alguien. ¿Quién podría ser? ¿Alguien de su escuadrón talvez? Pero Gaara no suele relacionarse mucho con la gente. Y ellos todavía le tienen miedo la gran mayoria. Pero seguro que es una chica hermosa, inteligente, fuerte: perfecta. Y yo haciendome falsas ilusiones.
-¿y que deberia hacer si estoy enamorado?
-Diselo.
-¿El que?
-Que la amas, si no se lo dices nunca lo sabras.
-¿Pero y si no me ama ella a mi?
-Entonces es una tonta.
Note como se me aceleraba el corazón nada más e pensar lo que iba a hacer.
Salí a la azotea a ver las estrellas. Cuando alguien me hablo.
-Sabes tenías razón.
-¿Gaara-sensei que hace aquí?
-Pensaba sobre lo que me dijistes.
- Ah, si claro. ¿Y?
-Te amo.
