Everybody Leaves In the End
Tomó la mano de Brittany y apretó con fuerza sus helados dedos, hacia pocos momentos le dijo que no era necesario decir nada, pero demonios! Sentía que a pesar de todo, de Sam, de las canciones, de la distancia… Brittany era su persona, sentía por ella un amor más fuerte que el de cualquier otra persona en el mundo y el saber que esta era la despedida, saber que… saber que posiblemente esa sería la última vez que se verían le rompía el corazón.
Brittany miró a la mujer frente a ella, sabía que posiblemente todos creían que no sabía lo que sucedía en realidad, que estaría pensando en nubes y algodones de colores, pero la verdad era, que no podía dejar de pensar en cómo las cosas habían sucedido demasiado rápido y de cómo, al final, en su ultimo día en Lima, era esta, mujer maravillosa que había tenido la suerte de amar la que estaba a su lado… Era Santana, la que siempre cumpliría su promesa de un "para siempre".
Santana la miró fijamente, acarició su mejilla intentando recordar sus rasgos, intentando guardar en la memoria los detalles de ese rostro, de esa personalidad que le hacía dar vueltas el corazón.
- Cuando vuelvas todo saldrá mejor- se forzó a decir pese a que sabía que nunca habría un regreso, ese era realmente el fin de ellas, de su amor, de su amistad.
- Sí -dijo la rubia, con los ojos brillantes- recomenzaremos.
Santana no quiso preguntarse cuantas promesas más serían capaces de hacerse la una a la otra, ni cuantas de esas mantendrían. La miro a los ojos intentando comunicarse como antes, intentando explicarle a esa mujer que la miraba con sus grandes ojos llenos de sueños que no, que ese era el fin.
Brittany desvió la mirada, los silencios, aunque no le gustaban, muchas veces eran mejor que las verdades que no quieres escuchar, se volvió intentando contener la angustia de la despedida, fijando su atención en las personas que se apresuraban y atropellaban a su alrededor intentando no perder su vuelo.
Santana la llamó por su nombre, Brittany se volvió nuevamente hacia ella y vio que tenía la cara cubierta de lágrimas.
- No -le dijo dulcemente
La morena sintió que el corazón le dolía. Ellas no deberían tener lagrimas… ni siquiera deberían estar despidiéndose, ellas eran la maldita mitad de la otra, con romance o sin él, Brittany era su jodida otra mitad y ella estaba segura de que también era su contraparte, ninguna de las dos podría volver a tener esa conexión con nadie más en el mundo.
Bajo las lágrimas, la sonrisa volvió al rostro de la morena, en cuanto sintió la mano de Brittany acariciando su rostro, borrando sus lágrimas, respiró profundamente.
- Vete- le dijo - todo saldrá bien.
La morena la apretó contra su pecho y la dejó ir, soltó cada uno de los dedos de su mano lentamente, intentando olvidar la sensación de vacío que le estaba dando el dejar, finalmente, libre al amor de su vida.
Brittany apretó el mango de su maleta con fuerza, le dio la espalda y se alejó lentamente. Santana no vio más que su sonrisa triste.
Cuando su amiga hubo dado unos pasos intentó alcanzarla, pero la rubia ya estaba demasiado lejos.
- Por favor -le dijo a su espalda en un susurro- cuídate mucho.
… Pero ella ya no podía oírle.