Bienvenidos a mi primer fanfiction oficial ! Iba a escribirlo en inglés, pero noté la falta de fanfictions de aventura en español asique mi idoma triunfó. :)

Estará dividido en arcas como la serie original, y la pareja principal será SasuSaku, aunque agregaré bastante NaruHina, NejiTen y no estoy segura si quedarme con ShikaIno o ShikaTema. Uds deciden.

Antes que nada quiero aclarar que esta no es la clásica historia en que Sasuke regresa y se enamora de Sakura en tres capítulos, porque eso sería falso, y odio los OOC.

El primer capítulo es tan aburrido como necesario, pero les juro que los próximos son cada vez más divertidos. Espero que les guste, porque me tomó mucho esfuerzo hacerlo!

Disclaimer: Naruto no me pertence. Gracias a Kami-sama le pertenece a Masashi Kishimoto, porque si fuera mío no lo leerían ni mis padres :S... ON with the story

El equipo 7 llevaba más de tres horas recorriendo el espeso bosque que delimitaba la frontera entre el País del Fuego y la Aldea oculta entre la hierba, a la que habían sido enviados por la Hokage para realizar una estúpida misión de reconocimiento. O al menos así lo veía el hiperactivo ninja cabeza hueca número uno de Konoha, Uzumaki Naruto. El jinchuriki había pasado la última hora tratando de descifrar porqué no se estaban dirigiendo de una vez por todas a su aldea. Ya habían cumplido la misión¿cierto? Había intentado varias veces, totalmente en vano, preguntarle a su sensei el motivo de su desvío, pero al notar que el ex-ANBU no se dignaba siquiera a voltear hacia él, se resignó a guardar silencio y a seguirlo en su recorrido.

Para empeorar su malhumor, el clima en la zona era insoportablemente húmedo, y las amenazadoras nubes grises que se acercaban rápidamente hacia ellos eran la clara indicación de que pronto comenzaría a llover, un hecho que no alentaba mucho las esperanzas del rubio de regresar a su casa temprano como lo había previsto.

Naruto entornó sus ojos para obtener una visión más detallada del horizonte. El sol se estaba ocultando, y el cielo ya se había teñido de ese clásico color cobrizo del atardecer, oscurecido por las malditas nubes. Notó con exasperación que no había nada fuera de lo común a la vista. El único sonido que se escuchaba era el de las ramas quebrándose bajo el peso de sus cuerpos, potenciado por el chakra que empleaban para impulsarse de una árbol a otro.

Kakashi echó un vistazo a su estudiante. El jinchuriki parecía frustrado por la perdida de tiempo que, a su criterio, estaba siendo el recorrido.

Soltando una queja más parecida a un gruñido que a otra cosa, comenzó a buscar frenéticamente en sus alrededores algo fuera de lo normal, sin éxito.

-¡Argh, sensei!¡Hemos estado aquí por horas!- exclamó el rubio exasperado. -¡No hay nada fuera de lo común en este maldito lugar!- agregó señalando las copas de unos árboles poco particulares.

Sakura dejó escapar un suspiro y miró aprensivamente a su compañero.

-Naruto, has estado quejándote desde que pisamos este lugar, no creo que eso sea de gran ayuda- dijo con severidad volviendo la mirada al frente.

Y tal como Kakashi imaginaba, algo en la mirada de Sakura le decía que ella también lo había notado. Desde que habían partido hacia Konoha, el Jounin se había estado sintiendo algo inquieto al distinguir dos fuertes presencias de chakra no muy lejos del lugar donde se encontraban. Sin mencionarles nada a sus estudiantes, había avanzado en esa dirección, pero aparentemente, Sakura, que poseía un buen control de chakra, también las había distinguido.

-Sakura- llamó, dirigiendo una mirada significativa a la kunoichi.

-Hai- respondió la joven asintiendo en entendimiento.

Naruto los observó sospechosamente por unos segundos, pero decidió restarle importancia al asunto y seguir con su marcha.

Así continuaron con su recorrido, en sumo silencio, y con la desventaja de que una llovizna constante les impedía ver el camino con claridad. Después de una hora de avanzar sin cambios aparentes, Kakashi frenó súbitamente, causando que Naruto casi cayera de una rama por el repentino movimiento.

-¿¡Qué fue eso!?-preguntó el shinobi enfurecido.

-Sakura-prosiguió el jounin ignorando a su alumno. -¡Lo sientes?-

-Hai. Las dos presencias están desapareciendo.-

Naruto los observó como si acabaran de hablar en un idioma desconocido.

-¿De qué estás hablando Sakura-chan?- preguntó desconcertado.

-Hace un par de minutos comencé a sentir la presencia de dos chakras muy poderosos, pero repentinamente están desapareciendo- explicó. La kunoichi agudizó sus sentidos para tratar de obtener alguna señal de las presencias. Naruto hizo lo mismo.

-Cada vez es más difícil distinguirlas- dijo Kakashi reanudando la marcha a un ritmo más acelerado que antes. Naruto y Sakura lo imitaron, hasta igualar su velocidad.

A no más de quinientos metros en un claro del bosque, distinguieron lo que parecía ser una antigua casa abandonada y en mal estado. Avanzaron unos metros sigilosamente para acortar la distancia, y se escondieron detrás de un arbusto. Camuflarse era algo que, a estas alturas, hacían casi por inercia.

-Quédense aquí y vigilen el perímetro mientras yo entro- ordenó kakashi con severidad . -No hagan nada estúpido. Especialmente tú, Naruto-. Ignorando la mueca amenazadora que le dirigió el jinchuriki, el jounin desapareció en una nube de humo.

En cuestión de segundos, Kakashi llegó al portón de la casa. El frente estaba cubierto por enredaderas y a lo alto se podían ver unas pequeñas ventanas que no habían sido cubiertas por las plantas. Los lados estaban construidos con piedras irregulares apiladas que al parecer se habían ido desprendiendo con el paso de los años. Con un chirrido, el jounin empujo la pesada puerta de roble para encontrarse con la única habitación del edificio. Se adentró sigilosamente a la oscura sala tratando de observar sus alrededores. Una vez que sus ojos se acostumbraron a la falta de luz pudo distinguir lo que parecían ser dos bultos en el centro de la habitación. Se acercó un poco más para observar con más detenimiento, pero la escena que lo esperaba lo dejó boquiabierto.

Ni siquiera durante sus años de ANBU había presenciado algo tan impresionante. Y eso no era decir poco. Dos cuerpos aparentemente mutilados yacían uno al lado del otro sobre un gran charco de sangre. Uno de ellos estaba recostado sobre su espalda con un sable clavado en su abdomen. El cabello que caía desordenadamente sobre su rostro hacía imposible que el jounin lo reconociera. El otro yacía boca abajo, en sentido opuesto al primero. Ambos estaban cubiertos por largas capas que impedían distinguir siquiera sus géneros. Kakashi se agachó hasta estar a su altura y deslizando la punta de su dedo índice sobre la superficie del charco comprobó que la sangre aún estaba fresca. "Probablemente las presencias de chakra provenían de aquí" murmuró para sí mismo estirando su brazo hacia uno de los cuerpos para retirar un poco de cabello de su rostro. Sin embargo, nunca hubiera imaginado que detrás de esa cortina de cabello ensangrentado se encontraría con el rostro de un mutilado criminal desertor de su aldea...Uchiha Itachi.

Con el corazón latiendo erráticamente caminó con una lentitud insoportable hacia el otro cuerpo. La corta distancia que los separaba le había parecido de kilómetros. El jounin sabía con lo que se iba a encontrar, pero aun así no podía evitar que una sensación casi desconocida invadiera su cuerpo y su mente. Miedo. Inclinándose sobre una rodilla tomó el cuerpo por los hombros y lo volteó con cuidado. Como lo había previsto, el cuerpo pertenecía a su antiguo alumno, Uchiha Sasuke.

Notó como su mano temblaba levemente al tomar el pulso del joven. Al encontrar la débil señal de vida, dejó escapar el aire que había estado conteniendo involuntariamente. Tomó el cuerpo de Sasuke con firmeza y lo cargó sobre sus hombros. Sabía que no había tiempo que perder si quería salvar al Shinobi que alguna vez había considerado como a un hijo. Y probablemente lo seguía haciendo...

REVIEWS ONEGAI!!!