Capítulo beteado por Carlie Stoessel, Beta FFAD: www facebook com / groups / betasffaddiction

Aquí les dejo mi primer fic, espero que disfruten de la historia.

La obra Crepúsculo le pertenece a Meyer; La trama es mía, los personajes que no aparecen de la saga son inventados.

Derribando barreras

…

Prólogo

"Nunca sabemos hacia donde va nuestra vida, pero eso al final nunca importa, porque a pesar de tratar de mantener un ritmo y una estabilidad, la vida nos tiene otro camino, ya sea para bien o para mal"

Subí a aquel avión con el alma en la mano y mi corazón a mil por hora, mis ilusiones y sueños ya hace mucho tiempo se habían ido.

Extrañaré Inglaterra que por tanto tiempo me dio un hogar donde vivir, extrañaré no estar cerca de mi abuelo, que es para mí, como mi padre, extrañaré esa libertad de ser quién soy sin que nadie me juzgue y señale sólo por mi apellido.

No me voy porque quiero, me voy porque necesito demostrar que ya no soy esa niñita con esperanzas e ilusiones tontas, sueños de niña en donde todos son felices, buscando siempre la felicidad y creyendo en cosas que nunca van a pasar. Aprovecharé esta oportunidad que me dio mi abuelo al pedirme que lo ayudara con la sede de la empresa que queda en Estados Unidos; para poder comenzar esta nueva aventura, regresando al lugar en donde viví mis primeros años de vida.

Esa conversación la recuerdo como si fuera ayer.

Flashback

—Bella, ahora que te graduaste y me has ayudado de una manera excepcional en la empresa, necesito que te hagas cargo de la sucursal que está en Estados Unidos.

Sólo llegué a escuchar las palabras Estados Unidos, lo demás no lo quise seguir escuchando, no quería dejar a mi abuelo, el gran hombre de negocios, Robert Dewyer. Es alto, de tez clara, con un pelo blanco que todavía conserva algunas tonalidades de castaño claro por su color original, su acento totalmente británico, y lo más importante, sus sentimientos hacia sus seres más queridos, ya que daría todo por ellos. Él, mi padre, mi todo.

Mi temor más profundo se hacía realidad: Volver a enfrentarme a todo, aunque yo sabía que ese día llegaría, nunca esperé que fuera tan pronto.

Mientras seguía hablando, me quedé observando la oficina que conservaba tantas anécdotas de todos los años que pasé aquí, que tenía una vista impresionante, en la que se podía observar todo el centro de Londres. Tenía diplomas, reconocimientos, títulos y demaces, que contaban de una manera rápida, la excelente persona que dirige esa gran empresa.

Años de gran esfuerzo, sudor y sangre de nuestros antepasados, invertidos para poder lograr lo que hoy tenemos, una gran empresa con millones y millones de dólares, invertidos en ella, posicionándonos en una de las compañías más reconocidas.

—Padre, ¿por qué no le asignas ese puesto a Félix, él es un gran trabajador y sabes que lo haría como si fuera yo? —Cuando terminé de decir esto, mi padre se levantó de su silla y se me quedó viendo, como si lo siguiente que me iba a decir fuera la parte culminante del tema, ya que él sabía porque evitaba tanto ese viaje.

—Cariño, dijiste la palabra clave: "Como", y ese "como" no eres tú, Bella. Tú sabía que este día llegaría y, realmente me gustaría no tener que enviarte de nuevo; pero tú eres la única en quién confío y, además, tarde o temprano te vas a tener que hacer cargo de todo, como mi sucesora y heredera absoluta. —Lo siguiente que sentí fueron unos brazos que me levantaban de la silla y me abrazaban, y como ese hombre, que controla a miles de personas, con tanto cariño me decía—. Te quiero Bella, eres mi gran orgullo, siempre lo has sido, aunque tú consideres que no, para mí lo eres. Toda la vida me voy a lamentar no haber estado cuando más me necesitaste y es un gran error que siempre llevaré conmigo, hasta el día de mi muerte.

Siempre era un tema duro de tocar hablar de mis primeros ocho años de vida alrededor de mi mamá y papá. Por lo general evitaba tocar el tema, sólo con mi padre lo podía hablar sin insultarlo, porque era uno de los pocos que conocía tanto mi interior como mi exterior.

—No, no te disculpes y te lamentes, por favor. Tú menos que nadie lo tiene que hacer… Y cambiando de tema, está bien, lo voy a hacer, pero con unas condiciones: Dimitri se va conmigo, quiero un apartamento grande donde permitan perros y quede cerca de un parque, Muffin se va conmigo, un carro para manejar, nada de choferes; aceptaré mínimo dos guardaespaldas, que serían Alec y Jason, un avión privado. Lo tomas o lo dejas. —Levanté la ceja esperando el gran veredicto por parte de mi jefe.

Después de un gran suspiro y una vuelta por su escritorio, dijo con voz contundente:

—Está bien, lo tomo, ¿contenta? Sales en tres días y espero que todo esté listo para entonces —dijo mientras juntábamos las manos y nos veíamos a los ojos—. Te quiero y eso nunca lo olvides, aunque no sea tu padre biológico, como abuelo, estoy muy orgulloso, y es como si lo fueras. Siempre vas a contar conmigo y cualquiera duda o problema que tengas, aquí estoy, mi casa es tu casa e igual con mis empresas y negocios. Hablando de eso, me enteré que te fue estupendo con el proyecto del hotel Enterprise y quedaste magnífica, como toda una Dewyer.

Fin Flashback

Aquí voy rumbo a un nuevo cambio, porque de eso estaba basada mi vida, cambios constantes para bien o para mal y espero, de todo corazón, que este sea para bien.

Esta historia es una de las tantas que espero subir, espero de todo corazón que les guste…

Vive y deja vivir... La vida es una sola...