Los personajes de Naruto no me pertenecen, son propiedad del Groso Masashi Kishimoto. Los personajes no reconocidos sí los he creado yo.
Lo más importante: GRACIAS POR LEER !
En la tarde fresca y agradable de ese bello sábado, precisamente en la oficina del gran Hokage de la Hoja, Uzumaki Naruto, se llevaba a cabo un acto sexual desbocado, los involucrados eran el mismo Hokage y su bella esposa heredera Hyuga, Hinata.
-Na na rutoo…-El rubio aceleraba aquel placentero acto, hace mucho que deseaba tomar a su esposa, pero no podía por numerosos motivos, pero esta vez fue diferente…-Mi amor…-lo último que salió de la bella Hinata, para inmediatamente gritar a causa del tan placentera corrida, un orgasmo delicioso.
Ambos se miraron, se amaban mucho y cada vez su matrimonio crecía para bien.
-Hinata…-observaba como su mujer estaba sudada y agitada, expuesta siempre para él, su gran cuerpo perlado, definitivamente nunca dejaría de amar a esa hermosa mujer…-Cada vez más hermo…-Pero no pudo culminar su alago, alguien venía.
¡Toc Toc!
Naruto maldecía, pero que podía hacer, estaban en la oficina central, no en su cama…-¿Quién?-preguntó con su sensual e imponente voz de hombre
-Azura, Hokage-sama, vengo a informar una urgente misión que ha surgido!-sentenció el Anbu. Ante eso inmediatamente los dos se vistieron a gran velocidad.
-Pasa…-El Anbu ingresó y saludó con una reverencia a la pareja…-Dime Azura, que ha acontecido?-Hinata tomó asiento al lado de su marido.
-Uzumaki-sama, nos han hecho llegar una información trágica desde la lejana Aldea Cristal, unos ninjas infiltrados de la Aldea Polar los han invadido, dejando graves heridos, llevaron documentos legales de Konoha…-Naruto lo interrumpió
-Documentos Legales? Te refieres a esos que firmé como garantía de protección que tenían por parte de nuestra aldea?-preguntó el sensual rubio.
-Así es, están planeando utilizarlo para generar disturbios entre aldeas renegadas-Hinata sólo escuchaba
-Pero no podrán, si yo firmé sólo para la protección de la Aldea Cristal, ahí lo especifica-El Anbu retrocedió un poco
-Ese es el problema Hokage-sama, hubo un error, nuestro especial encargado de ello, le dio a usted un documento incompleto, por ello, sin especificación, los renegados lo alterarán, y entre la conmoción que conseguirán por parte de las otras aldeas, ninguno querrá ver si el documento fue forzado, generarán disturbios, destruyendo a su paso Aldeas débiles y matando inocentes, ya sabe usted que todos desean ser protegidos por una potencia como lo es Konoha…-culminó preocupando a su Hokage
-Mier-Dattebayoo! Eso requiere una misión inmediata; pero ahora mismo, no tenemos a nadie de élite para esta misión jurídica-política podríamos llamarlo en términos modernos…-Naruto pensaba
-Ninjas de élite para esta misión sólo tenemos cuatro ahora, si no van ninjas de gran concurrencia a nivel mundial, no retrocederán, ellos quieren llamar la atención…-Opinó el Anbu
-Tal cual… Y de quiénes hablas?-preguntó Naruto al ninja inferior
-De Uchiha-sama, Haruno-san, Hyuga-sama, y usted mismo…-culminó
-Negativo… Sasuke no irá jamás, yo tampoco, y no mandaré a Sakura-chan ni a mi mujer entre tantos hombres…-culminó el rubio notoriamente celoso. Hinata se paró y lo miró directamente.
-No somos inútiles, somos perfectas. ¿Qué más quieres amor? Somos fuertes y de influencia, esta misión es un juego para nosotras, no tengo problema en ir, seguro Sakura tampoco…-Naruto la escuchaba atento…-Es más Sakura la semana pasada se andaba quejando de que nunca más tuvo misiones. No hay problema en ir ahora mismo, hay que hacerlo ya, o quieres una revolución? No hay tiempo que perder, no hay nadie más-culminó Hinata
-Disculpe mi atrevimiento, pero quisiera aportar que con los heridos que hay, Haruno-sama encaja perfecto…-aportó el Anbu
Naruto miró a su mujer y sonrió con amor…-Qué haría sin ti, constantemente a mi lado…-Hinata apretó su mano con la de su marido
-Anbu, ve a avisar a Sakura la misión y dile a Sasuke que iré en la noche a cenar-datebbayo y que prepare algo…-El Anbu asintió, y en una nube de humo desapareció.
-Amor, ya sabes, compra ramen del Ichiraku, Sasuke jamás prepararía nada-le dijo su mujer
-JAJAJA! Maldito teme, ya lo sé, sólo quiero molestarlo…-Miró a su mujer… Prepárate amor-se incorporó y fue a un estante, sacó unas armas, se las pasó a su mujer, ésta las guardó en su bolso ninja con demás cosas importantes. Dejó sobre la mesa y fue a sentarse en el regazo de su hombre, lo comenzó a besar y acariciar, el obviamente se dejaba gustoso. Así permanecieron dándose besos, mientras esperaban a su amiga.
En la casa Uchiha- Haruno, abrazados en la cama, tras una intensa sesión de amor, los dueños de casa descansaban. No decían ni una sola palabra, pero ellos eran así y así era perfecto.
¡Toc Toc! ¡Toc Toc! ¡Toc Toc! ¡Toc Toc! ¡Toc Toc!
-Rayos! Voy!- Exclamó la hermosa Sakura Haruno. Se incorporó de la cama y ante la atenta mirada de su marido comenzó a vestirse. El azabache se incorporó, e hizo lo propio.
-Iré yo…-emitió y bajó. Sakura lo siguió.
Abrió la puerta y vio a un ninja…-Qué quieres…-habló Sasuke al anbu
-Uchiha-sama…-hizo una reverencia, justo llegó Sakura…-Haruno-sama…-los saludó
-Que necesitas…-volvió a hablar Sasuke. Con lo élite que era, perfectamente pudo ver como ese sucio anbu, débil y maldito según él, miraba a su mujer con destellos que él conocía. Miserable…-pensó
-Uchiha y Haruno-sama, ha ocurrido y surgido algo importante, el Hokage necesita para ello de Haruno-san, para una misión junto a Hyuga-san…-culminó sorprendiendo a la pelirrosa
-Dile que no quiere…-Sasuke iba a cerrar la puerta
-Sasuke, espera!..-Sakura se hizo a un lado…-Acepto, ya voy, estábamos ansiosas ya, por una misión…-habló Sakura. El ninja relató todo, Sasuke no tuvo otra que aceptar.
Cuando el ninja estaba por irse, comunicó a Sasuke el recado de Naruto, éste maldijo y fue a buscar a su mujer, el anbu se despidió y desapareció.
-Sasuke, adiós…-le dijo a su marido, estaba bien equipada. Éste sonrió y se acercó a ella.
-Cuídate…-le dijo, luego se besaron con amor, eran de pocas palabras…-Creo que iré contigo…-dijo el azabache
-Mmm Sasuke, es mi misión, ya te daré lo que quieres cuando regrese-se volvieron a besar hasta que el aire terminó…-Bueno, adiós, partiremos justo ahora…-Sasuke la soltó y con la mirada le indicó como siempre miles de cosas, ella sonrió y con un último beso desapareció rápidamente como lo buen ninja legendario que era.
Sasuke se quedó pensativo, luego subió para darse un baño y esperar al dobe.
Cuando Sakura llegó, fue inmediatamente hasta la oficina de su amigo.
-Hola!-saludó
-Sakura-chan, que suerte que aceptaste-la abrazó su amigo. Luego ella fue a saludar a su amiga.
-Obvio, ya me estaba oxidando…-comentó divertidamente
-Sí, sí Hinata me dijo lo mismo…-el rubio le pasó unos pergaminos
-Sakura, vamos!-exclamó su amiga. Pero antes de irse se acercó a darle un beso a su marido
-Vayan con cuidado, confío en ustedes, en ese pergamino está mi resolución, léanlo y lo demás que ya saben…-Naruto se despidió.
Las dos mujeres ninjas saltaban de rama en rama, iban a una gran velocidad, y con gran fuerza. No eran ninjas comunes.
-Sakura, si seguimos así podríamos llegar en la mañana-habló la Hyuga
-Vamos muy lento, quiero ir más rápido, puedes aumentar la velocidad?-preguntó la pelirrosa. La peliazul negó, ese era su máximo…-Está bien, no hay problema alguno Hinata-dijo Sakura
Siguieron a ese ritmo y pronto llegaron al primer pueblo del largo trayecto hasta la Aldea Cristal, comenzaron a caminar, compraron algo de cenar y se pusieron a conversar. Justo cuando iban a retomar el viaje, una tormenta azotó todo el lugar, obviamente seguiría su camino, así que decidieron ir a descansar, en la mañana partirían para llegar al medio día.
-Nº 19…-la recepcionista les pasó la llave
-Gracias…-fueron para descansar, el lugar tenía un pequeño baño y una cocina, con una sola habitación.
-Sakura, dormiré un rato, sí?-comunicó la Hyuga
-Está bien Hina-chan, yo estaré trabajando por un antídoto delicado…-Hinata se retiró para dormir y Sakura fue a la cocina.
Media hora después, Sakura trabajaba arduamente por un antídoto, utilizando lo poco que había en la cocina.
-Este antídoto me será sumamente útil para cruzar a esos animales…-hablaba Sakura
-Qué haces?-preguntó Hinata, ya había terminado de descansar
-Hina! Pues es un antídoto muy especial, por lo difícil que es conseguir algunos ingredientes, mientras viajábamos divisé una de las plantas, con la excusa de tomar agua, paramos y lo tomé…-Hinata escuchaba mientras preparaba un té.
-Y porqué es muy especial? Acaso es un anticuerpo?-preguntó la Hyuga al par que le pasaba una taza de té
-Es especial, porque lo que se consigue con él, es sumamente único…-Sakura sonrió, había terminado, entonces traspasó el líquido a una taza limpia
-Por ejemplo?-preguntó la peliazul
-Y que puedes crear especies animales, por ejemplo tomas una vaca y lo cruzas un lobo jajaja es sólo un ejemplo, entiendes? Y bueno, lo mismo con los humanos, se puede crear fácilmente a un ninja sin igual, tomando sangre o esperma, lo que sea por más pequeñito que sea, una vez que este líquido se introduce comienza a buscar y añadir todo lo que no sea del cuerpo mismo, por eso es especial… Si supieran que lo estoy haciendo en un lugar cualquiera en medio de una tormenta, me matarían jeje…-culminó dejando a Hinata con dudas disipadas
Tomaron cada una su té hasta que a sus oídos llegaron sonidos extraños que ellas conocían muy bien…gemidos. Se miraron y taparon la boca para no reír, pero Hinata se levantó y siguió el ruido, justo salía más hacia la habitación de ellas. Sakura comenzó a reír al ver como Hinata posaba su oreja por la pared, llena de curiosidad y gracia tomó su té y lo terminó de un gran trago y fue junto a su amiga.
-Quiero ver…-comentó Sakura entre risillas, así que Hinata le pasó un Kunai y ésta hizo dos orificios a la pared.
-Imagínate que se enteran que la esposa del Hokage y del último Uchiha anden así de curiosas espiando a la gente en su intimidad…-comentó Hinata
-Jajaja. Bueno, veamos nadie se enterará…-se acercaron lentamente, buscaron y lo que sus ojos encontraron las dejó anonadadas y retrocedieron automáticamente.
Eran dos mujeres teniendo relaciones.
-Que… loco, no?-pronunció Hinata
-Ni lo digas…-pero no se aguantaron y siguieron mirando, en verdad eso era algo que nunca se les había cruzado por la mente, pero ahora el verlo tan de cerca, podrían concluir que se sentiría bien tenían muy bien definidas su sexualidad, ambas y estaban casadas con dos hombres, pero no quitaba el hecho de poder y querer experimentar algo nuevo.
Sin querer fueron acercándose y antes de darse cuenta ya estaban una sobre la otra en la cama. Algo resultaría de esa pequeña y secreta locura de amigas.
*Continuará*
MUCHAS GRACIAS POR LEER! :)
