Kingdom Hearts:
El corazón de la oscuridad
Prologo.- La reunión
Un sabio rey dijo una vez: "Este mundo esta hecho de luz y oscuridad, por lo que no puede existir si uno de esto desaparece" Si esto es cierto, por más que intentemos hacer un mundo donde reine la luz, al final, nos será imposible y lo mismo pasa con la oscuridad. Al concluir, podemos afirmar solo una cosa, la luz y la oscuridad son entidades eternas, y aquellos que siguen tanto la luz como la oscuridad vivirán eternamente dentro de los corazones de estas.
-Así que es en este lugar donde todos ellos terminaron – pensaba un misterioso sujeto vestido con una chaqueta oscura sin capucha, la cual tenia la imagen de un león de color blanco gravada en la parte trasera de esta – el reino de "los olvidados"... – se dijo a sí mismo mientras se detenía para observar a su alrededor.
Aquel lugar era completamente oscuridad, se podría decir que era como entrar a un túnel donde no encontraríamos una luz al final; incluso, la oscuridad era tan profunda que no se podía distinguir ningún sendero que seguir, uno, solo podría seguir caminando hasta encontrarse con alguien o hasta quedar completamente loco por la desesperación de no encontrar nada.
-Debo darme prisa, la misión... – dijo mientras continuaba su camino, sin saber si encontraría a aquellos que buscaba. Al cabo de unos minutos, se empezaron a escuchar unas extrañas voces provenientes de lo más profundo de la oscuridad, las cuales parecían ser arrastradas por el fuerte viento que soplaba más y más fuerte con cada paso que él daba.
-¿Quien eres tu y a que has venido a nuestro mundo? – preguntaron las voces.
-Mi nombre no es importante pero mi propósito aquí si... – contesto el sujeto mientras seguía caminando.
-¿Y se puede saber cual es tu prepósito?
-Estoy buscando... a aquellos que intentaron usar "el reino de los corazones"
Las voces, que parecían estar cada vez mas cerca quedaron en silencio ante la respuesta del sujeto. De igual manera, el viento dejo de soplar y por un momento lo único que se escuchó fueron los pasos de aquel sujeto.
-¿Cómo te has enterado de "ellos"? ¿Quién te lo ha dicho? – dijeron las voces al mismo tiempo que el viento volvió a soplar.
-La verdad, no creo que tenga sentido darles esa información pero, se las diré ya que es lo último que escucharan en lo que les queda de vida – dijo mientras aparecía frente a el un keyblade, el cual tomo con su mano derecha.
-Un keyblade, eso quiere decir que tu eres un...
-Veo que aun envueltos en esta profunda oscuridad pediste ver mi arma. En fin, es momento de que me encargue de esta oscuridad – dijo mientras levantaba la punta del keyblade hacía el "cielo" - ¡Destello de oscuridad! – en ese momento, de la punta del keyblade se disparo una pequeña esfera de color morado pálido, la cual al alcanzar una altura de unos 20 metros exploto iluminando todo el lugar con una luz de un color semejante que el de la esfera.
-Y se hizo la luz... – dijo el sujeto mientras volteaba hacía enfrente para observar a las personas que tenia a algunos metros de el – así que eran ustedes, Organización 1 Xemnas y Organización 2 Xigbar...
-Parece que nos ha descubierto – dijo Xigbar mientras tomaba sus armas.
-Puede que sea así... –dijo Xemnas mientras observaba al muchacho, al cual podía ver mas claramente ahora que el lugar se había iluminado –o puede que sea al revés.
La apariencia del muchacho era parecida a la de cualquier humano salvo por sus orejas y ojos. Sus orejas eran un poco alargadas mientras que sus ojos eran un poco rasgados y desprendían un color amarillento semejante al los mismos ojos de los heartless. Fuera de eso, su apariencia era completamente normal, su cabello era largo de color negro, el cual le cubría un poco ambos ojos.
-Que empiece el juego...
El sujeto bajo lentamente el keyblade y con un elegante movimiento lo coloco en dirección a su pierna derecha, como si estuviera esperando a que ellos hicieran el primer movimiento.
-¡Este sujeto se esta burlando de nosotros!
-¡Xigbar, espera! – grito Xemnas pero ya era tarde. En un intento de acabar con el sujeto, Xigbar tomo sus armas y sin pensarlo se lanzo contra el sujeto.
-¡Tonto!, los ataques directos no funcionaran contra mi – dijo mientras levantaba el keyblade y, con un rápido movimiento de su brazo partía en dos a su atacante – todo a terminado para ti...
-Eso crees tú...
No había palabras que describieran con exactitud la mirada de sorpresa que se dibujó en el rostro del sujeto al ver que la figura de Xigbar que había partido a la mitad empezaba a desaparecer y, al mismo tiempo detrás él aparecía Xigbar.
-¿Quién es el tonto ahora? – Dijo Xigbar mientras apuntaba hacia el sujeto con una de sus pistolas - ¡muere! – El ataque de Xigbar fue ineludible para el sujeto el cual, al recibir los disparos contra su brazo cayó de rodillas.
-Maldición... esto me pasa por confiarme.
-Este será tu castigo por haber querido pelear contra nosotros – dijo Xigbar mientras apuntaba directamente a la cabeza del sujeto con una de sus pistolas - ¿algún ultimo deseo antes de que seas tragado por la eterna oscuridad?
-Jajajajaja, yo ¿ser tragado por la oscuridad? Creo que el que esta en esa situación eres tu – dijo el sujeto mientras veía que debajo de Xigbar se empezaba a abrir una puerta hacía la oscuridad, la cual iba absorbiendo poco a poco a Xigbar – en fin debo acabar contigo ahora que tengo la oportunidad.
Xigbar por más que luchaba no podía liberarse de aquella oscuridad que lo había atrapado y que poco a poco lo iba hundiendo. Todo lo que podía hacer era ver como el sujeto le apuntaba con su Keyblade. Poco a poco, extraños destellos de color morado empezaron a aparecer de la punta del Keyblade lo cual significaba solo una cosa...
-Se esta preparando para ejecutar el Ragnarok – pensó Xemnas al ver aquella imagen – si lo logra todo abra acabado para Xigbar.
-¡Ragnarok! – grito el sujeto e inmediatamente de la punta de su arma se disparo un rayo de un color morado oscuro el cual se dirigía directamente hacia Xigbar.
-No lo permitiré – dijo Xemnas quien se interpuso entre el rayo de luz y su compañero, quien solo podía observar sin poder hacer nada.
El grito de dolor de Xemnas resonó por cada rincón de aquel inmenso lugar. Su cuerpo, que yacía en el piso casi calcinado por recibir aquel ataque poco a poco iba desapareciendo ante los ojos de su amigo.
-¿Cómo es posible? ¿Cómo es que Xemnas fue derrotado de un solo golpe? – se preguntaba Xigbar mientras veía desaparecer a Xemnas
-Despreocúpate, ese no era el verdadero Xemnas – dijo el sujeto mientras se ponía de pie, y al mismo tiempo, la oscuridad que detenía a Xigbar desapareció – el verdadero Xemnas se encuentra por allá – dijo señalando hacía un punto al que la luz no llegaba.
Xigbar sin saber si creerle o no decidió ir a ver si lo que decía era cierto. Y en efecto, en aquel lugar que la luz no alcazaba a iluminar se encontraba arrodillado el cuerpo de Xemnas, que aunque no había recibido el ataque directamente si había sentido el gran dolor que tubo su doble.
-¡Xemnas!, ¿te encuentras bien? – pregunto Xigbar mientras lo ayudaba a ponerse de pie.
-Este su... sujeto no es un maestro del key... keyblade común.
-Al parecer, aunque no recibiste directamente el ataque si saliste seriamente dañado – dijo al ver el estado de Xemnas – esta vez... me asegurare de acabar contigo de una vez por todas.
-Esto es malo – pensó Xemnas al ver que aquel sujeto se acercaba poco a poco a ellos – ni hablar tendremos que usar nuestra máxima técnica...
Con una sola mirada de Xemnas hacía Xigbar basto para que este comprendiera la idea de su líder.
-¿Estas listo? – Pregunto Xemnas a Xigbar el cual asintió con un movimiento de la cabeza – bien, entonces empecemos – tras decir esto ambos desaparecieron.
-Aunque se escondan tenga por seguro que los encontrare – dijo el sujeto quien se detuvo un momento a observar el área buscándolos.
-¡Quien se esconde! – Gritaron Xemnas y Xigbar al mismo tiempo – solo te conducíamos a nuestra trampa y ahora que estas donde te queríamos acabaremos contigo.
-Acabar conmigo...
En ese momento, desde la parte superior de aquel lugar empezaron a llover disparos que golpearon toda la superficie del suelo. Era como ver una lluvia de estrellas fugases las cuales impactaban una y otra vez el suelo de aquella área. Al cabo de un tiempo los disparos cesaron y Xemnas y Xigbar volvieron a aparecer.
-¿Lo logramos? – pregunto Xemnas mientras esperaba a que se disipara la cortina de humo que se había formado por la fuerza de impacto que tubo su ataque sobre la superficie del terreno.
-No hay nadie en el mundo que pudiera sobre vivir a nuestro ataque conjunto...
-¿Quieres apostar?
-¿Qué? – Xemnas se quedo paralizado al ver que detrás de Xigbar había aparecido el sujeto listó para atacar - ¡Xigbar, cuidado! – grito Xemnas pero ya era tarde, no había forma de poder impedir lo que estaba apunto de suceder.
-¡Muere! – grito el sujeto mientras levantaba su keyblade y con un rápido movimiento partía a la mitad a Xigbar, quien tras esto simplemente desapareció como lo había hecho antes el doble de Xemnas.
-Xigbar – susurro Xemnas mientras veía desaparecer a aquel miembro de su organización.
El sujeto, quien ya se encontraba en el piso dirigió su mirada hacia Xemnas. Al verlo, sonrió al ver la cara de miedo y desesperación que tenía el en el rostro.
-Tu querías saber mi propósito, bien te lo diré – dijo el sujeto mientras encajaba su keyblade en el suelo – estoy aquí para "reclutar" a aquellos que son de tu organización y darles lo que tu no pudiste.
-Quieres decir que les darás un...
-Si, así es. ¡Yo les daré un corazón! – esta frase sorprendió a Xemnas, quien al oírla descendió y se coloco frente al sujeto – y ahora que he cumplido tu ultimo deseo... acabare contigo.
El sujeto levanto su mano derecha y casi como si fuera una orden un agujero de oscuridad apareció bajo Xemnas y poco a poco lo fue absorbiendo. Xemnas no opuso resistencia, ya estaba demasiado débil como para intentar hacer algo para escapar; lo último que escucho fue la risa de aquel sujeto la cual se burlaba de el y de su patética organización.
-Bien, se que estuvieron observando la pelea desde el principio así que salgan o tendrán el mismo final que su líder y su compañero – tras decir esto varias figuras encapuchadas aparecieron alrededor de el sujeto – es hora de empezar la reunión...
Mientras tanto, en un lugar muy lejano. Tres jóvenes leían una carta con una oscura e insólita noticia.
Avance: ¿Quién es este misterioso sujeto que venció a Xemnas y a Xigbar? y ¿Cómo lograra darles un corazón a aquellos que tanto lo buscaron?
¿Tendrá algo que ver la carta con este sujeto? Esto y quizás mas en el próximo capitulo: Capitulo 1: Una carta del destino.