No sabia que pensar, el solo quería ir a visitar a su amada, que ella no sabía claro está, despues de mucho tiempo de verla a escondidas, no lo tomen por acosador hacia eso una vez cada año.
Resulta que ella se había ido del jardín para hacer su patrulla, el simplemente se sentó a esperarla, cuando de repente sintió que alguien lo llamaba.
Camino siguiendo su instinto, hasta que finalmente llego a su destino.
El Soul Dew.
Su mirada no salió de él, como si estuviera en trance, y antes de que se diera cuenta ya estaba tocándolo.
Ni siquiera sabía que había cerrado los ojos hasta que los abrió y vio su entorno completamente cambiado, ya no estaba en una fuente con arboles rodeándola, ahora estaba en un espacio negro azulado con el Soul Dew flotando en frente de él.
Pero no era el único ahí.
Al levantar la mirada del orbe, se encontró con la de alguien que nunca pensó volver a ver.
-Latios -logro decir despues de unos muy largos momentos incomodos-
- Hola Ash -saludo el eon sin querer asustar a su amigo-
-Que… ¿Qué esta pasando? -mirando a su alrededor-
-Estamos en el Soul Dew y…Discúlpame por la llamada improvisada, pero tenia que llamarte lo más rápido posible…Y antes de que legara mi hermana.
- ¿Por qué?
-No creo que a Latias le hubiera gustado tu estado de trance.
-el se estremeció- Gracias me hiciste recordar cosas que quise REALMENTE olvidar -refunfuño por lo bajo recordando a cierto Rey fantasma-
-Lo siento -se disculpo apenado el eon, hasta que su mirada se torno seria- Escucha Ash, yo…Necesito tu ayuda.
-el lo miro igual de serio- ¿Qué necesitas?
-Quiero volver al mundo exterior, y necesito que alguien de un poco de Aura al Soul Dew para poder salir -dijo apuntando al orbe que seguía flotando entre los dos- Yo también daré un poco de la mía para que no te esfuerces mucho y…Puede haber efectos secundarios.
- ¿Cómo cuáles?
-Cabe la posibilidad de que te transformes en un Latios.
Los ojos de Ash se abrieron en shock, solo un pensamiento llego a su cabeza.
- ¡Finalmente podre estar con Latias! -grito su conciencia, por lo que Latios no pudo escucharlo- ¡Te ayudare! -por alguna razón, Latios lo vio mas feliz que nunca, aunque el lo tomo como la felicidad de volver a ver a un viejo amigo-
-Bien -sonrió por la energía de Ash- Pon tus manos en el Soul Dew y concentra tu Aura, yo haré lo mismo.
Ambos pusieron sus manos en el orbe y cerraron los ojos concentrándose en su aura y transfiriéndola al orbe.
La energía azul empezó a salir de ambos lados llenando el orbe, hasta que brillo en su totalidad.
-Ya esta Ash -aviso Latios sacando sus garras del orbe, Ash hizo lo mismo algo cansado- ¿Estas bien?
-Si, algo cansado -el miro el orbe- ¿Y ahora qué?
-Pues se supone que tendría que explotar…Me pregunto porque tarda tan-
Justo en ese momento el orbe estallo en una energía de luz envolviendo a Ash y Latios rápidamente, haciendo que ambos queden en la inconsciencia.
…
Volviendo al mundo real, Latias había llegado al jardín, con Bianca diciéndole que había una sorpresa para ella en él, ella muy confundida se dirigió al jardín.
Mientras pasaba por el columpio, y antes de que pudiera pensar algo, sintió una gran masa de energía venir…De la fuente.
Rápidamente voló hacia la fuente del Soul Dew y en cuanto llego, vio que salía luz de la fuente, se acerco lentamente a los escalones de la fuente, viendo detenidamente la luz de la fuente, hasta que de pronto algo pareció explotar y dos destellos de luz salieron de la fuente chocando contra el piso frente a ella, causando que de un salto del susto.
Ella miro a los dos seres y jadeo.
Uno lo reconoció al instante, un Latios, pero no cualquier Latios, era el Latios Alpha, su hermano.
El otro también lo reconoció, pero su color la confundió, era un Mew, y su pelaje era de un color blanco puro.
-Me pregunto quien será… -murmuro mirando fijamente a el Mew-
Dos horas más tarde.
Estaba abriendo los ojos pesadamente, la cabeza le dolía y ni hablemos del cuerpo, todo se sintió como si hubiera estado en un huracán y luego hubiera chocado contra una pared.
- ¿Qué estaba haciendo? ...Oh si -de repente sus pensamientos cobraron sentido…Incluso la ultima parte, que no era del todo mentira-
- ¡Hermano! -escucho una voz que hace mucho tiempo deseo ver en persona-
- ¡Herma -fue interrumpido por el abrazo mortal de Latias- Uhhh …Ufff ...Hermana …Me …Alegra…Verte…Pero…Necesito…Aire… -Latias lo soltó rápidamente, el respiro hondo y sonrió nerviosamente- Hola Hermana.
- ¡Hermano estoy tan feliz de verte! ¡Te extrañe! -exclamo con lágrimas en los ojos-
-Yo también hermana, yo también -sonrió Latios-
-Huuu…Mi cabeza… -escucharon murmurar a unos metros de ellos-
Ambos voltearon y vieron al Mew Blanco sentarse y llevarse una pata a la cabeza.
- Hermano ¿Sabes quién es él? Apareció junto a ti -pregunto Latias-
Latios sudo nerviosamente ante esta pregunta, sabía que quizás Latias no estaría muy feliz de saber lo que el hizo para volver a la vida, mucho menos a quien tuvo que usar para que funcionara.
Pero lo que le llamo la atención, era en lo que se convirtió esa persona.
-Raro… Se supone que él se convertiría en un Latios, pero ¿Un Mew? ¿Algo paso en la transferencia? -se preguntó mirando al Mew-
De pronto el Mew volteo a verlos y sonrió a Latios.
-Veo que funciono.
De repente el aire pareció volverse frio, como si estuvieron en pleno invierno, ambos hombres se estremecieron al ver la mirada oscurecida de Latias.
Latios tembló cuando su hermana levanto la cabeza con una sonrisa dulcemente enfermiza con los ojos cerrados.
-Explica ahora.
Latios realmente deseo estar muerto en ese momento.
…
Latios yacía con un chichón enorme en la cabeza con los ojos hechos remolinos tirado en el suelo, mientras el Mew era analizado por Latias, el sudo.
- ¿Estas bien? ¿Mi hermano no se pasó con la transformación?
-No, tranquila Latias, yo hice esto por mi propia voluntad, es más, el me advirtió que me convertiría en un Latios si aceptaba, bueno…No sabía que también podría pasar en otro Pokémon… -murmuro mirando sus patas-
-Porque no se supone que te transformarías en otro Pokémon, solo en un Latios -respondió el finalmente levantándose con una garra en el chichón- Y no se por que exactamente en un Mew.
-Yo puedo explicar eso -dijo una voz tan calmada y melodiosa que todos pensaron que estaban hablando con una ángel-
De la fuente del Soul Dew salió una luz que lentamente tomo la forma de una criatura que alada del tamaño de un árbol, ella era de distintos tonos azules oscuros, una dulce sonrisa adornando su rostro mientras un brillo sobrenatural parecía rodearla.
-…Se parece a un Vivillon -dijo Ash despues de un momento de silencio-
La criatura dio unas risitas suaves.
- Es un gusto conocerlos, mi nombre es Mizu, y soy la encarnación del sustento al que llamáis Soul Dew -respondió tranquilamente Mizu-
- ¿Encarnación? -pregunto Latios enarcando una ceja- ¿Por qué antes nunca habías aparecido?
-Porque no existía hasta hace unas horas.
- ¿Qué? -preguntaron todos-
-Jejeje Verán, yo antes no existía porque al alma de los Latios siempre estaban en el Soul Dew, y la esfera no podía crear su propio sustento al tener un alma que ya tenía conciencia, pero cuando Latios pidió la ayuda de Ash para combinar sus auras para revivir a Latios el Soul Dew actuó por si mismo y uso esa aura para crearme.
-Ya veo… Pero ¿Por qué se transformo en un Mew? -pregunto Latios apuntando al mencionado para enfatizar su punto-
-Esto fue obra de mis hermanas, los otros sustentos, el Árbol del Comienzo y el Templo del Mar, ellas querían recompensar a Ash por todas las veces que salvo al mundo, interrumpieron por un momento la transferencia para eliminar el aura que lo transformaría en Latios cambiándola por una que lo transformaría en el Pokémon que su aura y poder dictaban -explico Mizu-
-Por eso demora mas de lo que pensé… -comento Latios, hasta que lo ultimo lo choco- Espera, ¿Su poder? ¿No fue el impulso de tus hermanas?
-No, él ya tenía ese poder desde hace mucho tiempo, y si lo piensas bien tiene sentido.
Todos abrieron sus ojos en shock, sobre todo Ash, no solo ahora podía estar con su amada ¡Sino que ahora era ridículamente poderoso! El miro sus patas, sin saber que responder a eso.
- Otra cosa más, Latios…Lamentablemente tu ya no puedes ser uno de los Guardianes de Altomare.
- ¡¿Qué?!
-Veras, tu habías muerto y cuando un Latios cumple su tarea a su muerte ya no puede volver al puesto, incluso si vuelve a la vida.
Latios abrió los ojos en shock, el francamente recordó esa parte que Lorenzo le conto cuando había tomado su responsabilidad, aunque el esperaba que pudiera ser la excepción.
-Pero, aun tienes un trabajo por hacer, mis hermanas te lo encomendaron, junto con una petición de un reciente sustento como yo -continuo Mizu-
- ¿Otro sustento? ¿Cuántos hay? -pregunto Ash-
-Originalmente solo había dos, el Árbol del Comienzo y el Templo del Mar, pero ahora somos cuatro, yo y el otro que ya lo has visto.
- ¿Enserio? ¿Cómo es? -pregunto nuevamente ya dándose una idea de como son exactamente lo sustentos-
-Lo llaman "El Reloj Solar".
- ¡¿El Reloj Solar?! -exclamo en shock-
- ¿Enserio lo has visto Ash? -pregunto Latias-
-el salió del shock y asintió rápidamente- Si, pero… ¿Latios tendrá que ir tan lejos? -ante esta pregunta los hermanos miraron a Mizu atentamente-
-suspirando ella asiente- Lamentablemente es así, pero es necesario que todos los sustentos tengamos un, o dos, guardianes para protegernos, como Mew protege el Árbol del Comienzo y Manaphy el Templo del Mar.
-Ya veo… -murmuro Latios bajando la cabeza, pero la levanto con una mirada seria- ¿Yo tendré a alguien conmigo?
-Si, junto con el sustento apareció su guardiana -respondió con una sonrisa dulce-
-Siento que ya conozco a esta guardiana… -murmuro Ash-
- ¿Dónde la encuentro? -pregunto nuevamente Latios, le confiaron esta tarea no iba a decepcionar a los sustentos del mundo-
-En Ciudad Fluxus, Kalos.
-Realmente siento que ya la conozco -volvió a murmurar Ash-
-Iré ahí lo más pronto que pueda -dijo Latios-
-De acuerdo, Joven Latios -se volvió hacia Latias y Ash- Ash, tú y Latias serán los nuevos Guardianes de Altomare, espero poder convivir con ustedes el tiempo que pueda.
- ¡Por supuesto! -hablaron al unísono, hasta que voltearon a verse y se sonrojaron desviando la mirada-
-soltando una risita suave Mizu pone una mirada dirigiéndose a los cuatro- Recuerden esto, nadie debe saber de los sustentos, ni siquiera el resto de legendarios, solo los respectivos guardianes y Arceus ¿Entendido?
- ¡Si Señora!
-asintiendo ella comienza a desaparecer- Confió en ustedes, jóvenes Guardianes -ella desapareció-
Hubo un largo silencio y los Guardianes de Altomare miraron a Latios.
- Hermano ¿Cuándo piensas ir?
-suspira- Pensaba irme ahora, no quiero dejar sola a mi compañera.
-Entendemos -hablo Ash- Por cierto, Latios, si ella resulta ser una niña rubia con ojos azules -una mirada casi asesina pareció en los ojos de Ash espantando a la vida a Latios- Sera mejor que la protejas ¿Ok?
- ¡S-Si!
- ¡Bien! -volvió a sonreír tan rápido que casi nadie creería la mirada que dio- Cuídate en Kalos.
-Lo mismo hermano, quizás podamos vernos pronto -sonrió Latias-
-Claro -asintió Latios con una sonrisa- Cuiden Altomare por mi ¿Sí?
- ¡Claro! -volvieron a hablar al unisonó sonrojándose cuando se dieron cuenta-
-soltando una risita Latios levita más alto- ¡Nos vemos! ¡Cuídense! -exclamo alejándose del jardín-
- ¡Adios hermano!
- ¡Suerte y recuerda, si resulta ser ella, cuídala o te mato! -exclamo Ash haciendo que Latios baje un poco de altura, pero rápidamente se recuperó-
- ¿Por qué eres tan protector con esa niña? -pregunto Latias-
-Porque es como mi hermana menor, si le pasa algo, yo no sé qué haría.
-Te entiendo, pero sé que estará en buenas garras, es Latios despues de todo.
-Lo sé, solo para asegurarme, ahora… ¿Crees que puedas enseñarme a levitar? -pregunto mirando que todavía estaba sentado en el suelo-
- ¡Oh claro! Esto puede tomar un tiempo… -murmuro para sí misma-
Mientras los nuevos Guardianes de Altomare se preparaban para futuras enseñanzas, Latios voló por el mar con dirección a Kalos, el ni siquiera sabia donde quedaba, es como si alguien le dijera por dónde.
-Me pregunto cómo será el lugar de este "Reloj del Sol" -dijo para si mismo- Espero que al menos mi compañera ya sepa que hacer.
Latios no se esperaba lo que encontraría al llegar.