Disclaimer: Los personajes de Yu-Gi-Oh! MD; GX & 5D's no me pertenecen, son de sus respectivo autor. Yo solo los tomo prestado con la intención de saciar mi deseo por ver a mi pareja yaoi favorita.
Notas de autora y advertencias:
I. El contenido del siguiente fic (y como lo dice el Disclaimer), es yaoi (chicoxchico); por tanto, está bajo su responsabilidad seguir leyendo el fic, si no eres tolerante a éste género, recomiendo abstenerse de leer.
II. En un principio, esto iba a ser one-shot; pero tengo problemas con el final, y mi ansiedad me gano, asique decidí hacerlo fic con capítulos cortos.
III. Es la primera vez que estoy en este fandom, asique espero que tengan tolerancia conmigo, incluso entenderé las críticas constructivas si mi fic abusa de OOC en los personajes. Lo siento, no me salió adecuar a los personajes como me hubiera gustado, me quede a mitad de las últimas series, estoy siguiendo 5D's actualmente, pero no le encuentro muy bien la personalidad de Yusei me disculpo de ante mano.
IV. No pondré duelos, porque no se me dan bien (ya lo intente y créanme que no son lo mío) y la verdad, me quería basar en otro aspecto más que de los duelos.
V. La línea argumental que sigo es a partir de la película Yu-Gi-Oh! Lazos a través del tiempo; en dónde los chicos se despiden en la azotea en la época de Yugi Muto. Por tanto, se define como un Universo Semi-alterno a la película.
VI. Los protagonistas del fic son Judai Yuki y Yusei Fudo. Desde que los vi, los shippie como pareja. Además se me ocurrió escribir desde que entre al fandom y noté que no hay mucho de ellos dos, solo en ingles y dos fics en español, asique espero poder aportar un poco al fandom.
VII. Sin más preámbulos, iniciemos con el primer capítulo.
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"Hoy te deseo como nunca antes
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Por eso te pido me des un chance
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Sé que ahora mismo piensas en mí
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Aparta el orgullo y regresa aquí"
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Y después de la promesa que se hicieron en la azotea, Yusei reviso la D-wheel para asegurarse de que todo funcionara perfecto y poder regresar a sus eras.
Judai se calzo la mochila al hombro.
—Bueno… — Yusei se puso de pie después de mirar su motocicleta, Judai y Yuugi se acercaron hacia el duelista del futuro —, todo está listo, Judai... — el bicolor saco dos cascos debajo del asiento, y le entrego uno al castaño.
—En verdad muchachos, les deseo mucha suerte — declaró Yuugi con los brazos cruzados y con una sonrisa —. Y no se olviden... que tenemos un duelo pendiente.
— ¡Sí! — declararon al unisonó.
Yusei se sentó primero, y luego golpeó con la mano el asiento trasero, Judai se sentó y con su brazos, rodeó la cintura del bicolor, haciéndolo sonrojar a la vez que le subía un cosquilleo desde su estomago hasta sus hombros. Sus ojos se escondieron bajo su flequillo en ese instante.
— ¡Adelante hermano! — exclamó el joven.
—S-sí — asintió Yusei aún rojo como un tomate — ¿por qué me siento así? — pensó —. No puedo dejar de sentir como mi corazón late con tanta fuerza.
Tomó un respingo para concentrarse en invocar al dragón carmesí, en instantes, el espíritu emergió del cielo mientras Yusei arrancaba su motocicleta.
—Sujétate con fuerza — sugirió Yusei a su acompañante.
El dragón absorbió a los dos al mismo tiempo que la motocicleta empezó a funcionar. Judai apretó con fuerza la chaqueta de Yusei.
Yuugi saludo agitando la mano mientras la motocicleta desaparecía tras los destellos rojos que iba dejando el dragón. Miró al cielo sin quitar su sonrisa de su rostro y los rayos del sol alumbrándolo.
—Aibou — le dijo a su otro yo —. Hemos salvado al mundo... y hemos hecho grandes amigos.
—Hai mi otro yo — contestó en su mente el pequeño Yugi —. Ojala que algún día los volvamos a ver.
El faraón asintió y luego volvió a su forma original.
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Mientras tanto, la motocicleta de Yusei aparecía en los cielos de Venecia, cayendo en los tejados de uno de los edificios de la plaza San Marcos.
El sol resplandecía sobre la ciudad, a diferencia de cómo estaba antes de que ellos viajaran al pasado. Judai no dejaba de apretar la chaqueta de Yusei mientras cerraba los ojos un poco miedosos.
El bicolor se volteó a verlo y sonrió al verlo así... tan indefenso.
—Hemos llegado, Judai — le dijo al detener la motocicleta.
El chico abrió un ojo, y luego el otro. Tomó aire y se relajo tirando su espalda hacía atrás.
—Pensé que estaba en el inframundo — declaró de una manera graciosa mientras se quitaba su casco. Yusei se rió por la expresión del chico.
A Judai le llamó la atención que Yusei se riera de esa forma, durante el duelo contra Paradox lo había visto serio, y sobre el final del día, de a poco iba mostrando su sonrisa. Lo malo era que el día se acabaría en cuestión de minutos.
Su corazón lloraba... su cuerpo estremecía...
Mientras se ponía de pie, Yusei hizo lo mismo. Judai le entrego el casco.
— ¡Vaya! Es un día hermoso — comentó el castaño para romper un poco el hielo, ya que el silencio entre los dos lo estaba poniendo algo nervioso... pues es bien sabido que Judai se caracteriza por ser un muchacho hiperactivo y que no puede estar callado tampoco. Estiro los brazos, pero cuando miro a su compañero, enseguida notó que había cambiado su sonrisa, estaba más serio, mientras qué Yusei apoyaba su cuerpo contra la motocicleta.
El bicolor parecía concentrado en algo, pensativo. Miraba al cielo, y Judai no dejaba de preguntarse si tal vez había dicho algo que le haya molestado a Yusei.
Pero antes de que quisiera preguntarle, Yusei se le adelanto.
—Sé que debería volver enseguida para saber sí mis amigos están bien...
Yusei no cambio su expresión, al contrario, parecía como si se estuviera arrepintiendo de algo.
—Lo sé — dijo en un débil hilo de voz el castaño mientras se paraba frente a él —. Supongo que aquí se termina todo hasta que sea la ocasión ¿no crees? — fingió una sonrisa amable, pero por primera vez, ni él se sentía cómodo con esa situación.
La verdad... es que siento la necesidad de estar a tu lado...
—Creo... c-creo que podría quedarme unas horas más — al bicolor le temblaron las piernas como nunca al decir eso.
—Yu-Yusei... — fue lo único que pudo emitir Judai.
—No conozco Venecia... y desde dónde vengo, todo... — Yusei se auto-interrumpió, sabía que no debía revelar ciertos hechos del futuro, más de los que ya había contado, el hecho de que ahora los duelos se hicieran arriba de una motocicleta, era demasiada información, asique prefirió dejar eso a medias.
Judai comprendió enseguida por el raro gesto que hizo Yusei.
—Bueno, entonces... — Judai pegó un saltito y sonrió —, ¡vayamos!
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Espero que les haya gustado el primer capítulo. Confieso que tengo mucho miedo jaja asique estaré esperando comentarios. Gracias por leer.
