Pueden pegarme si quieren, pero tenía esta idea en la cabeza y no me la podía quitar de encima XD espero que les guste, los personajes de CDM no me pertenecen, Azahara le pertenece a LadyAbsynthe y Vega es de mi propiedad, pido disculpas por las posibles faltas de ortografía.

El sonido del teléfono se hizo presente en aquella oscura habitación, pasaron dos, tres minutos y el aparato no dejaba de sonar hasta que una mano se alzó y lo descolgó.

— Espero que sea urgente.— Gruñó la joven que había sido despertada, llevaba varios días sin dormir y por una vez que lo conseguía van y se lo arrebatan.

— Lo es, Berry, te hemos enviado el nombre de una empresa que ha intentado infiltrarse en nuestra compañía, necesitamos que tú y las chicas averigüen todo sobre ellos, de inmediato.— Ordenó una voz masculina antes de colgar la llamada.

— No pienso perturbar los sueños de mis compañeras, yo sí sé que es el respeto.— Con pereza se levantó de la cama y estiró ambos brazos por encima de su cabeza, su mirada se dirigió al reloj que tenía en su mesa, las tres y cuarto de la madrugada, una bonita hora para trabajar.

Con cuidado fue caminando entre toda la ropa que tenía tirada en el suelo de su habitación hasta llegar a su precioso equipo, un ordenador de mesa que contaba con cuatro pantallas, lo único que desprendía luz era el monitor y gracias a este se podían apreciar pequeños mechones granates caer por la cara de la joven.

— Veamos que podemos encontrar aquí.— Susurró a la par que sus manos empezaban a teclear a una velocidad impresionante, estaba tan concentrada pasando las barreras de seguridad que pequeñas gotas de sudor bajaban por su níveo rostro.

La noche parecía tranquila en el edificio, varios chicos se encontraban reunidos en la sala de juntas celebrando el nuevo fichaje de la empresa.

— Bienvenido al equipo, Michael.— Nathaniel felicitó al nuevo compañero que se había unido aquella mañana a ellos.

— Muchas gracias.— El chico, un joven de cabello castaño y ojos azules les agradeció a todos los presentes mientras sonreía.

— ¿Alguno de ustedes sabe dónde está mi hermano?— Preguntó Alexy, llevaba varios minutos sin verlo y se estaba preocupando.

— Pues no, la verd— Castiel fue interrumpido por el grito de una persona.

— ¡Nos están atacando!— La voz de Armin resonó por toda la oficina, cuando todos sus compañeros llegaron él se encontraba defendiendo los datos de la compañía de aquel hacker desconocido.

— ¿Cómo cojones ha podido pasar nuestros sistemas de seguridad?— El pelirrojo se mordió el labio, él mismo había trabajado en ese sistema junto a Lysandro, estaba furioso por ver que un desconocido había logrado sobrepasarlo.

— No lo sé, pero es muy bueno.— Las manos del moreno se movían a una velocidad increíble, parecía que estaba ganando hasta que se fue la luz en toda la oficina.

— ¿QUÉ?— Gritaron todos los chicos a la vez.

El teléfono volvió a sonar y esta vez no tardó ni tres segundos en contestar.

— ¿Y bien?— La voz ronca del hombre logró que un escalofrío recorriera la espalda de la chica.

— Tenemos lo necesario de momento.— Respondió mientras jugaba con varios mechones de su cabello.

— No esperaba menos de ti, Vega.— Dicho esto finalizó la llamada.

— He hecho bien en no decirle que les he dejado una sorpresa.— Susurró con una sonrisa mientras caminaba hasta su cama, por un momento asomó la cabeza entre las cortinas de la ventana, dejando que la luz de la luna la iluminase, su cabello granate iba recogido en un moño mal hecho, sus orbes azules brillaban por la emoción, y lo que más destacaba en Vega era su marca en forma de copo de nieve que abarcaba todo su ojo izquierdo.

Poco a poco el sueño se fue apoderando de ella, y se durmió con una enorme sonrisa en el rostro.

— Venga, joder.— Castiel maldecía por lo bajo al ver que la luz no volvía, estaba a punto de darle un puñetazo a la mesa pero la voz de Armin se lo impidió.

— Lo ha logrado.— Masculló entre dientes el moreno mientras miraba la pantalla de su ordenador.

— Y encima ha dejado su firma.— Nathaniel se acercó a la pantalla para analizar la imagen que aparecía.

— ¿No puedes localizarlo?— Preguntó Lysandro, a lo mejor no había sido cuidadoso, dejando alguna pista sobre su ubicación.

— Intentaré encontrar algo.— Respondió Armin poniéndose manos a la obra.

Mientras todos sus compañeros hablaban de lo sucedido, Michael no dejaba de analizar la firma del hacker que los había atacado, un copo de nieve con las palabras Frost Berry en el medio, ese nombre le sonaba, lo había escuchado antes.

El día se veía nublado para los trabajadores de la empresa, nadie había dormido porque estaban ocupados intentando buscar la localización del hacker que los había atacado. El grupo de Castiel y los demás chicos se encontraba en el despacho de la directora, la tensión podía sentirse en el ambiente.

— Lo sentimos señora Adelaida.— Lysandro inclinó su cuerpo hacia delante como si de una reverencia se tratase.

— Con un "Lo siento" no vamos a recuperar la información robada.— Adelaida era una mujer rubia, con clase, y sus orbes verdes transmitían odio.

— Pero a lo mejor la información que ha conseguido Armin, sí.— Esta vez fue el turno de Michael, el castaño apoyó su mano en el hombro del moreno.

— ¿Y bien?— Preguntó la mujer apoyando sus codos en la mesa.

— El hacker suele frecuentar la cafetería Dolce cerca de la gran avenida.— Contestó el moreno ojiazul con simpleza.

— Entonces está claro, trabajaréis allí, os haréis con la información de cada cliente hasta dar con ese perro.— Su mano se había cerrado en un puño, les hizo un gesto con la otra mano para que salieran de la oficina.

— Michael aún no nos has contado nada sobre ti, ¿tienes hermanos?— Preguntó Alexy abrazando a su hermano gemelo.

— ¿Hermanos?— Cerró los ojos por un momento y la imagen fugaz de una chica de orbes azules pasó por su mente, estuvo dudando por un momento hasta que negó con la cabeza.

— Vee, arriba.— Detrás de la puerta se podía escuchar la voz de una chica, estuvo esperando varios minutos hasta que se cansó y abrió la puerta a la fuerza.

— Cinco minutos más.— Susurró Vega tapándose con las mantas.

— Llegaremos tarde a comer.— La chica, una joven de tez oscura que medía alrededor del metro cincuenta y ocho se acercó lentamente hasta quedar al pie de la cama, su cabello corto y ondulado no llegaba a sobrepasar su nuca, de un bonito color rubio praliné, con sus orbes morados miraba toda la habitación.

— ¿Has dicho comida, Zaza?— De un momento a otro Vega se había puesto de pie y se encontraba mirando que ropa se iba a poner.

— ¿Te tocó trabajar?— Preguntó Azahara mientras se sentaba en la cama, su rostro no mostraba emoción alguna.

— Sí, a las tres de la madrugada me llamó el estuuupendo jefe.— Esa no era la palabra que iba a decir y Azahara lo sabía, Vega tuvo que cambiarla porque en ese momento su jefe se encontraba ahí plantado, en el marco de la puerta.

— ¿Todo bien, Vega?— Preguntó Evan, un chico de cabello negro y orbes violetas mientras sonreía.

— Claro señor.— Contestó nerviosa caminando hacia atrás, se metió en el baño para cambiarse.

— ¿Vais a algún lado?— Esta vez se dirigía a la rubia.

— Vamos a la cafetería a comer señor.— Contestó Zaza automáticamente, como si de un robot se tratase.

— Perfecto porque tengo hambre.— Evan se relamió el labio.

— ¿Piensa venir con nosotras?— Vee acababa de salir del baño y se maldijo a sí misma, ¿ahora de quién hablaría mientras comía?

— Claro, así os pagaré por el trabajo de anoche.— Evan les cedió el paso, Azahara iba a decir algo pero Vega no la dejó, era consciente de que Berry había hecho todo el trabajo pero ambas eran una sola persona.

Con un paso lento Vega caminaba detrás de su jefe y su amiga, hasta que una pregunta la devolvió de vuelta a la Tierra.

— ¿Has conseguido alguna pista sobre su paradero?— Preguntó Evan mientras salía a la calle y evitaba a las personas que caminaban por la calle.

— Por desgracia no, pero siento que estoy cerca.— Vee sonrío mientras la imagen de su hermano se hacía presente en su mente, justo en ese momento Michael chocó con ella, pero no le hizo caso y siguió caminando.

— Perdón.— Michael se disculpó, pero cuando alzó la mirada sólo vió la melena granate de Vega, por un momento la imagen borrosa de la ojiazul se hizo presente de nuevo en su cabeza.

— ¿Habla de tu hermano?— Azahara dirigió su mirada por un momento a su compañera.

— Sí.— Uno de los motivos que la llevaron a ser lo que era fue su hermano, tras su desaparición hizo todo lo posible por dar con él, el único hombre que dió con ella fue Evan, el moreno le brindó ayuda y ella no pudo negarse a su oferta.

— Te entiendo.— Y era verdad, Zaza también estaba buscando a ciertas personas, aceptar ese trabajo fue lo mejor que pudo hacer.

— Bueno señoritas Berry, Bloom.— Dijo Evan guiñándoles un ojo.

— Gente nueva.— La cara de poker de Azahara no cambió ni un poco al ver que las camareras que siempre las atendían ya no estaban.

— A mi me gustaba Violeta.— Vega era todo lo contrario, su rostro reflejaba decepción ante aquella noticia.

— Bueno, la comida será la misma ¿no?— Evan cogió la carta y empezó a mirarla.

— ¿Saben ya que van a comer?— Michael no despegaba la mirada de su bloc de notas.

— Yo quiero un entrecot con patatas.— El moreno no tardó en pedir su comida.

— Yo pediré una hamburguesa mediana con patatas también.— Azahara dejó la carta a un lado y posó sus manos en su regazo.

— Yo quiero...lasaña de carne.— Vega fijó su mirada en su jefe, ese hombre no dejaba de molestarla, como si disfrutase con ello.

— De acuerdo, en seguida traeré la comida.— Michael cerró la libreta y por un momento su mirada se fijó en Vega, le entraron ganas de acariciar la marca que tenía en forma de copo de nieve, él conocía a alguien que también tenía una igual, su pecho le dolió de repente al recordar que horas atrás les había negado a sus compañeros la existencia de un hermano, él tenía una hermana, sí, pero le habían dicho que estaba muerta, ver a esa chica con la misma marca que su hermana había abierto sospechas.

Les dejo aquí la ficha, agradecería que me la pasasen por pm XDD espero que les haya gustado, si tienen alguna duda estaré encantada de aclararla.

Nombre:

Apellido:

Edad: {18-21 años}

Nick: {Será como la firma que dejáis cuando atacais.}

Apodos: {Como os suelen llamar vuestras compañeras.}

Nacionalidad:

Habilidad: {Todas serán muy buenas con los ordenadores, pero pueden añadir si manejan algún arma, algún arte marcial, etc}

Descripción física:

Descripción psicológica:

Historia: {Infancia, la relación con sus familiares, como entraron en el mundo de los ordenadores, cómo fueron contratadas por la Compañía Amoris…}

Chico: {Están disponibles Nathaniel, Lysandro y Michael.}

Gustos:

Disgustos:

Extra: {Cualquier cosa que quieran añadir.}

Que tengan una linda noche.