Los personajes le pertenecen a Kishimoto. El creador del manga de Naruto.

Diálogos — Bla, Bla, Bla —

Pensamientos "Bla, Bla, Bla"

©Ares-sama

Importante: Leer las notas de autor al final del capítulo. Esta historia tiene una versión beta en mi perfil que pronto será borrada.

Summary: Naruto tiene que enfrentarse a la cruda realidad ser el Hokage no era tan fácil, el mundo real era demasiado injusto para poder cumplir su palabra con Nagato, la cuarta guerra Shinobi iba a comenzar y sobre todo debía enfrentarse al pasado oscuro del clan Uzumaki.


En el mundo solo reina el odio, la mentira y la ambición.

Antiguo proverbio Uzumaki

El sexto Hokage

"El amor genera sacrificio, lo cual genera odio"

Cada paso que conseguía dar era peor que el anterior, su cuerpo se encontraba en un frágil estado, pero su fuerza junto con su inquebrantante determinación lo forzaba a permanecer de pie mirando a la antigua compañera del líder de Akatsuki quien se encontraba envolviendo los cuerpos de sus antiguos compañeros. La tristeza en el rostro de aquella Kunoichi que se llamaba Konan lo afectaba profundamente.

"El amor genera sacrificio y el sacrificio genera odio"

Naruto observaba en silencio y quería consolarla, pero como hacerlo. Tal vez había tomado la determinación de detener el ciclo de odio más sin embargo aquel dolor que sentía en el pecho no podía detenerse, se preguntaba si todos sus amigos estaban bien, se preguntaba si alguna vez llegaría a perder el control de sí mismo como había ocurrido, estuvo a punto de liberar al Kyubi la mayor masa de odio que existía en este mundo.

Konan termino con su triste labor, se le quedo mirando en silencio por unos segundos mientras una pequeña sonrisa se generaba, era tal vez una comisura de labios para algunos pero era la primera sonrisa verdaderamente genuina que conseguía producir.

"El amor de las personas no es tan barato como para que te puedan perdonar con frases bonitas"

Era cierto, ambos se habían perdonado.

— ¿Qué hay de ti? No creo, que quieras regresar a Akatsuki —

—No me importa más Akatsuki, Yahiko y Nagato eran todo para mí, los sueños de ambos ahora han sido entregados a ti Uzumaki Naruto —

Naruto alzo la mirada perdidamente y asintió en silencio incapaz de decir algo más, tenía una gran carga sobre sus hombros.

—Además Amegakure te ayudara para que ese sueño se haga realidad, pero que acciones tomara contra nosotros Konoha ahora que saben… —

— ¡No las tomaran! Te doy mi palabra —

La voz de Naruto fue fuerte y no dudo en interrumpir a la antigua Kunoichi antes que pensara en las posibilidades de otra guerra, Konan quedo impresionada por aquella determinación su pequeña sonrisa se hizo aún más grande y extendió su mano mientras su jutsu de papel comenzaba a formar un ramo de flores.

—Yo también creeré en ti, confiare mi sueño a tu persona, por ello te daré un último regalo —

Naruto no dijo nada más a pesar de lo inquietante que estaba por aquellas palabras, pero Konan solo se despidió en silencio mientras comenzaba formar las alas de ángel detrás de sus espaldas, lentamente comenzó alzar vuelo seguido por lo que era ahora los dos ataúdes de sus antiguos camaradas.

Era el momento en que regresara a la aldea, tenía que ir ver como se encontraban aquellas personas que eran importantes para él. El camino fue lento y doloroso, cada paso que daba sentía como su cuerpo lo castigaba por la cruenta batalla que había tenido minutos antes.

Fue en ello que se dio cuenta que estaba realmente perdido en aquel bosque. No eso era imposible, conocía los alrededores de la aldea a la perfección, pero cada momento se daba cuenta que no importaba cuanto caminara todo terminaba en el mismo lugar.

Sintió un pequeño escalofrió y luego al risa de una niña, esto no era bueno pensó para voltear su rostro y no encontrar nada, luego prosiguió en silencio nuevamente, la risa volvió y Naruto estaba comenzando a pensar que algo no estaba bien.

Cuando volteo su rostro nuevamente esta vez listo para luchar no había nuevamente nadie, pero si un templo en ruinas. Uno que podría jurar que antes no estaba ahí, no había nada en ese lugar hacia tan solo unos segundos.

Naruto sudo y pensó que estaba sucediendo tal vez estaba en estos momentos soñando y su cuerpo estaba desangrándose en algún lugar de las afueras de Konoha. Pero todo parecía tan real.

El templo tenia una antigua marca en forma de espiral en sus columnas, el techo estaba medio caído pero algo dentro de este lo llamaba, entonces escucho otra vez la risa de una niña y vio a una pequeña de cabellos rojos sonriéndole.

Naruto intento no gritar, no se llevaba bien con las cosas sobre naturales y si esta era la muerte sentía defraudado por el recibimiento que estaba teniendo. Entonces la niña lo miro fijamente en la entrada del templo y sus ojos se conectaron, fue cuando noto los ojos de Nagato esas mismas espirales y luego todo fue consumido por la eterna oscuridad.

Era como si alguien hubiera absorbido toda felicidad en su cuerpo, paz o tranquilidad.

Sentía que flotaba en un mar de pensamientos.

"¿Puedes elegir entre Sasuke y Konoha?".

Esa conversación. Esa voz era de...

"Naruto... Es un hermoso nombre"

Esa era la voz de una mujer, no era también la voz de Itachi. Pero todo era tan oscuro de un momento a otro el Kyubi estaba cerca, era su Chakra podía sentirlo.

"Ninguno de los dos ha tenido suerte, ¿verdad? Mantienes el mundo a raya... pero yo te mantengo a raya a ti."

"Si usas tu poder, sólo vendrá odio de él. Estate tranquilo, muy dentro de mí."

Eran dos mujeres enfrente de él, ¿Quiénes eran ellas? Y sus cabellos. Por qué estaba teniendo estas imágenes.

"Sólo con vivir las personas lastiman a otras sin darse cuenta, mientras la humanidad exista el odio existirá, la paz verdadera no puede existir en este mundo maldito"

"jamás podrás escapar del destino de tu maldito clan"

La voz de Sakura a quien le estaba diciendo esas palabras con tanto odio pero luego estaba enfrente de dos mujeres, ambas con el símbolo de Konoha en sus frentes pero sentía que algo no estaba bien con ellas. Se encontraban en el bosque de la muerte, porque estaban en ese lugar.

"Dime la verdad Kushina, ¿no me odias?

Somos amigas Mikoto, tebanne

Kushina eres una pésima mentirosa"

Ambas mujeres chocaron, ambas mujeres luego se desvanecieron y todo volvió a la oscuridad por unos segundos.

Solo quería que alguien detuviera todas esas voces, ¿Por qué las escuchaba? Quienes eran las esencias y presencias que estaba recordando. No eran suyos.

"Entonces acabare con esta maldición... si hay tal cosa como la paz, la encontrare... porque jamás voy a rendirme"

Entonces se despertó, como si hubiera sido un horrible sueño. Estaba bañado en su propio sudor, su cuerpo estaba paralizado, pero podría sentir tranquilamente los rayos del sol bañándolo por entre las hojas que conseguía escaparse del frondoso bosque. Estaba solo, no vio el templo o aquella risa de la niña, solo fue un sueño, un maldito sueño sobre algo que iba a ocurrir o que tal vez ya había pasado.

Se estaba enloqueciendo por las heridas pensó, mientras intentaba lentamente ponerse de pie agotado por la batalla que había tenido y algo tembloroso por la sensación que había experimentado. Tal vez no fue un simple sueño y no quería saber la respuesta a ello.

Puso su mano sobre la corteza del árbol y se ayudó a levantar con lentitud, algo no estaba bien lo sabía pero no podría saberlo en esos momentos, vio las flores que tenía en sus manos, eran las que Konan le había dado y decidió hacer algo primero antes de marcharse.

Tomo las rocas con dificultad y pensó en decirse tonto a sí mismo, aun así prosiguió y sonrió tranquilamente cuando termino y tomo un kunai roto que tenía en su bolso y comenzó a marcar el nombre con algo de dificultad. Luego se levantó con algo de dificultad para poner las flores sobre la tumba simbólica del maestro de Konan, Nagato, Yahiko y el suyo. Una tumba para Jiraiya con los deseos y reconciliación de sus antiguos discípulos.


Daba fuertes respiros, agitado, agotado. Su pecho le dolía de una manera impensable, cada cinco pases tenía que detenerse tocar el árbol más cercano frotar sus ojos que el ardor parecía regresar a momentos y luego tomar otra gran bocanada de aire y seguir caminando.

Estaba algo asustado, no por el dolor, sino porque sabía que hace una hora algo lo había llamado y no quería estar más en aquel bosque, pero justo cuando iba a caer nuevamente por el dolor en sus piernas alguien lo atrapado justo a tiempo.

—Lo has hecho muy bien —

—Kakashi-sensei —

—Tranquilo mereces descansar —

—Pero… —

No dijo nada en lo restante del viaje, solo cuando salieron del bosque Naruto consiguió abrir con fuerza sus ojos, toda la aldea lo estaba esperando, los gritos de júbilo eran dichos con gran alegría, aquellas palabras, aquel reconocimiento que tanto había deseado y merecido estaban siendo dados.

— ¡Bienvenido Naruto-san! —

— ¡Creíamos en ti! —

— ¡Naruto! ¡Eres un héroe! —

— ¡Gracias! —

Gracias, esa fue la palabra que más le gusto cuando todos corrieron a saludarlo, abrazarlo y decirle lo muy orgullosos que estaban.

Sus amigos más cercanos solo permanecieron en silencio, mirando con orgullo y una pequeña sonrisa.

—Todos estaban esperando por ti, Naruto —

Fueron las palabras finales de Kakashi mientras le ayudaba a descargar para luego darle un pequeño empujón y lo mandaba directo a la gran multitud.

Shikaku Nara solo estaba en silencio agradeciéndole a Naruto por salvar a a la aldea, mientras presenciaba la aparición de un Anbu a sus espaldas.

— ¿Que ocurre ahora? —

— Reunión de emergencia —

— Entendido —

Era el momento de actuar, demasiado pronto para su gusto. Dio una pequeña sonrisa al ver como la chica Haruno golpeaba con fuerza al nuevo héroe de Konoha.


En el gran salón del fuego estaban reunidos tanto el Daymio, sus consejeros y los de Konoha, la reunión había sido convocada con la mayor de las urgencias. La situación era reamente grave, aunque Konoha conservaba su poder militar en lo que respectaba a su número de shinobi, gracias a las acciones de Naruto.

Sería difícil defender todo el país con la aldea ninja destruida.

—No escatimaremos en gastos para la reconstrucción de la aldea —

Los consejeros civiles eran los más decididos a recuperar Konoha a su antigua gloria, de solo pensar en las consecuencias económicas que sufrirían si las demás naciones exigieran territorios o acuerdos económicos desfavorables para no declara la guerra era algo inaceptable.

—Lo primero que debemos hacer es hacer una evaluación de daños y reconsiderar muy bien nuestras relaciones con otros países —

—De seguro el país de la tierra aprovechara las circunstancias actuales —

Shikaku permanecía en silencio, el líder del clan Nara esperaba este tipo de discusiones los hombres del Daymio estaban tan concentrados sobre las consecuencias exteriores que no pensaban en el problema interno, si, había otra amenaza interna en Konoha y la mirada estaba centrada en ese viejo halcón de guerra.

Danzo por su parte permanecía totalmente inamovible, bajo otras circunstancias habría aprovechado este momento, lo habría hecho pero… sus espías le habían informado del grave incidente en el país del rayo. Parecía que alguien, un cierto Uchiha había descubierto algo que no debía, que otra explicación tenia tales actos.

—Hay otro asunto que debemos considerar primero, ¿quién será el próximo Hokage? —

Todo el salón permaneció en silencio, aquello era el tema a tratar al final de cuentas, era el verdadero motivo por el que habían sido convocados pero nadie esperaba que el viejo consejero fuera a mostrar tan pronto sus garras.

—No podríamos, esperar a que Tsunade se recupere —

Koharu la vieja consejera fue la primera en sonreír ante las palabras de Danzo también al ver como el Daymio del fuego fiel a su débil carácter había respondido con titubeo.

—Mi señor, Gran Daymio actualmente Tsunade se encuentra en coma además no podemos ignorar el hecho que en gran parte de sus actos como Hokage han llevado a Konoha a esta situación, en parte ella es responsable —

El Daymio permaneció en silencio, pensando en cómo salir de esa habitación rápidamente los Shinobi siempre tenía la mala costumbre de alzar demasiado su voz en su presencia y eso no le agradaba.

—Es una lástima que Jiraiya no este aún con vida, lo habría escogido inmediatamente, el en verdad me gustaba —

El Daymio luego permaneció en silencio por unos minutos, mientras todos en la mesa estaban a la espera que mencionara un nombre. Pero la falta de carácter del líder de la nación pronto se hizo evidente.

— ¿Entonces quien será? —

Dijo sin la mayor de las preocupaciones mientras miraba a los consejeros de Konoha en espera de una opinión.

—Bueno… —

Pero las palabras de Danzo fueron interrumpidas por Shikaku quien se adelantó en dar un candidato.

—Propongo a Hatake Kakashi —

Todos permanecieron en silencio mirando al Daymio y este dio una pequeña sonrisa.

—El hijo del colmillo blanco, también fue el discípulo de cuarto Hokage —

Todos los consejeros civiles aplaudieron las palabras del líder de la nación, elogiándolo por el conocimiento de su propia aldea ninja.

— ¡Kakashi fue derrotado! y fácilmente por el líder de Akatsuki, un hombre así no merece ser Hokage además fue el maestro de Uchiha Sasuke y su deserción nos enseña que no está preparado para liderar a otros —

Las palabras de Danzo calaron en todos, mientras el líder Nara y el líder de los Anbu permanecían en silencio claramente molestos por las palabras del antiguo líder de Raiz, claramente fue visto como un insulto hacia un gran compañero Shinobi.

— ¿Entonces a quien propones Danzo? Aunque no comparto mucho del punto de vista de Kakashi lo considero la mejor opción de todas —

Fue el viejo Homura quien replico, antiguo compañero del tercer Hokage y por lo tanto consiente de la eterna rivalidad entre Danzo y el antiguo líder de la aldea.

La pequeña sonrisa que comenzó a formarse en el rostro de Danzo dio la sensación que iba a proponerse a sí mismo.

—Yo propongo a Uzumaki Naruto —

Todos quedaron en silencio en el salón, nadie dijo nada, ni opino en el tiempo suficiente para que cayera un alfiler y se escuchara en todos los rincones del lugar.

— ¿El hijo del Cuarto Hokage? —

—Es cierto, el derroto a Pain, y salvo a la aldea —

—sería una buena señal para todas las aldeas ninjas que nuestro poder sigue intacto, además él es el portador del Kyibi —

—Pero dicen que es un Jinchuriki muy inestable, testigos dicen que convoco al Kyubi en medio de la batalla —

—Pero consiguió controlarlo —

Todos los consejeros comenzaron hablar de aquella posibilidad, pero Shikaku permaneció en silencio no comprendía las acciones de Danzo, no tenían sentido, ¿Por qué no se posiciono a sí mismo? Que estaba pensando ese viejo halcón de guerra, algo malo de seguro.

Homura hablo con fuerza y claramente contrario aquella idea de solo pensarlo le daba una sensación de escalofríos recorriendo toda su columna vertebral.

—Están olvidando que Naruto es el hijo de Uzumaki Kushina quien es la sobrina nieta de Uzumaki Mito, lo que lo convierte en el único miembro vivo de la rama principal de los Uzumaki, si el llegara… —

—Le diremos la verdad desde el punto de vista de Konoha, después de todo —Danzo se mostró molesto por las palabras de su viejo colega — Uzushiogakure y Konoha fueron grandes aliados, no solo eso, fueron aldeas hermanas, Konoha es el único hogar que conoce estoy seguro como ha demostrado que seguirá luchando por la aldea además olvidas que Kushina durante un pequeño tiempo fue mi discípula consiguiendo ascender a Chunnin fácilmente — No quiso recordar algo de su viejo pasado pero sintió esa tonta necesidad de defender algo este.

Shikaku abrió los ojos con horror, comenzaba a ver el plan de Danzo ese bastardo de seguro iba a envenenar la mente de Naruto.

—Si lo nombramos Hokage, estoy seguro que otros Uzumaki sobrevivientes se unirán a la aldea— El Daymio hablo con claridad y una sonrisa en su rostro se fue formando, había tomado una decisión eso era claro para todos.

—Mi lord, aunque quedaran Uzumaki no creo que su número llegara a ser realmente significante — Koharu no creía que quedara alguno, realmente siempre considero al Jinchuriki como el último de ellos.

—No importa, además el señor del viento siempre me restriega su Kazekage prodigio por su juventud—

—Pero mi Lord nombrar a un Hokage por algo tan trivial—

Pero el Daymio ignoro el comentario de su consejero más importante.

—Por el siguiente edicto. Yo el señor Feudal del país del fuego nombro a Uzumaki Naruto como el sexto Hokage —

Todos permanecieron en silencio mientras una pequeña sonrisa se formaba en el rostro de Danzo, los consejeros se preguntaban si el Daymio lo había nombrado por sus habilidades como Shinobi o solo por su relación de rivalidad con el Daymio de viento, los verdaderos líderes de Konoha miraban directamente a Danzo, no les sorprendió las acciones del señor Feudal este era demasiado fácil de manipular y ya se imaginaban una tonta razón detrás de su proclama.

Shikaku se levantó prontamente le tendría que pedir a su hijo Shikamaru que se volviera una sombra para el nuevo Hokage.

Danzo sonrió en silencio, recordando a su antigua Alumna, fue una lástima que al final Kushina se negara a seguir con sus enseñanzas. Maldita seas Minato pero al final yo gane.


Notas de autor

Espero que le den una oportunidad a este fic, estoy seguro que les gustara en verdad. El principio es tal vez algo confuso pero créanme que todo se ira aclarando.

La leyenda del Rokudaime ha sido tal vez el fic que mas le he dedicado tiempo este año, pero llegue a un punto que no estaba muy contento con lo que estaba escribiendo o hacia donde me dirigía así que quise hacer una especie de reinicio cuando comencé a sentir que podría escribir algo mejor.

En el transcurso de la semana borrare la versión Beta, que aunque seguiré con la misma historia de fondo he considerado que cambiare algunos asuntos y alargare bastante ciertas partes de la narrativa.

En este fic participaran muchos personajes tanto canónicos como de relleno de la serie, intentare no usar OC salvo que sea realmente necesario.

Las parejas son canon.

la historia seguirá el canon de la serie hasta cierto punto, luego de eso sera una historia totalmente alternativa.