Disclaimer: Todo lo reconocible de Harry Potter es propiedad de J.K. Rowling
Este fic participa del reto "Amor a través de los tiempos" del foro "La Sala de los Menesteres".
Ya sé que debería de andar actualizando mis long-fics, pero es febrero y aunque estoy más sola que un perro y con espíritu de Halloween en realidad, se me antoja hacer una lluvia de fics con temáticas románticas. Así que no me pude resistir al ver el reto, que siendo Drabbles no tardaron mucho en llegar a mi cabezota. Aunque tras re-leerlos, caigo en cuenta que más que amor se percibe mi despecho... en fin, pequeños detalles.
^^ ¡Gracias por leer!
Hombres Necios
1.- Morimos por tu estupidez y mi impulsividad
Había ido a buscarla por ordenes de su madre. Le había tomado poco más de un año dar con ella, pero lo había logrado al final. ¿Y como no? ¿Quién mejor que él para encontrar a Helena? ¿Quién sería más persistente que él, cuya motivación era el amor? Si, iba a llevarla de regreso con su madre, la venerable Rowena que ya estaba al borde de la muerte, pero más que nada la llevaría con él, de vuelta a su lado. No importaba que no le correspondiera, con estar bajo el mismo techo que ella se daba por bien servido.
Sin embargo, las cosas no resultaron ser tan fácil como a él le hubieran gustado. ¡Mujer terca! ¿Qué no entendía que no le iba a pasar nada malo? ¿Qué no entendía que a nadie le importaba que hubiera robado a su propia madre? No, no lo entendía y aferrada a no dejarse llevar, lo había sacado de sus casillas. Él solo había gritado, se había acercado y por Merlín que él jamás le hubiera hecho daño. Pero ella se tenía que resistir, tenía que apuntarlo con su varita y él como buen Slytherin tan solo se había adelantado para asegurar su supervivencia. Había sido un impulso, casi un reflejo de auto preservación. Tarde fue cuando se dio cuenta que acababa de atravesarle el pecho a la mujer que amaba con su propia espada.
—Lo siento... de verdad lo siento —susurró entre lagrimas, hincado a un lado del cuerpo inerte de la mujer—. ¡Maldición! ¿Por qué tenías que hacer esto?
Estaba molesto con ella y sobre todo consigo mismo. Se odiaba por lo que había hecho y sabiendo que no sería capaz de vivir con la culpa, tomó aquella misma espada y su propio abdomen atravesó, recibiendo la muerte con paciencia, resignado a arder en el infierno por su pecado. No obstante, sin saber como y sin explicación, de repente se encontraba de regreso en Hogwarts. Quizás todo había sido un sueño, se dijo. Pero entonces la vio, traslucida y de un color platinado, su gran amor caminaba hacia a él. Mentira, no caminaba, iba flotando. No había sido un sueño... Estaban muertos los dos.
—Te odio —murmuró la mujer, pasando a su lado, inexpresiva y con una voz fantasmal.
—Y yo siempre te amaré —fue lo último que le dijo él, comprendiendo que había un castigo peor que el infierno para él. Pasaría la eternidad contemplado su crimen, viviendo sin vivir y contemplando como el alma de aquella mujer de la que se había enamorado profundamente se iba marchitando por su culpa. Era su culpa, él la había matado y por eso se había ganado el apodo del Barón Sanguinario.
¿Y qué tal? Después de pensar un buen rato caí en cuenta de que ahí hay una pareja intrigante a la que se le podría sacar mucho, pero no seré yo la que se de a esa tarea. Aún así me intrigó y ojala les gustara un poquito c:
¡Gracias por leer!
