El amor es lo más importante del mundo y quien diga que no miente. Gracias al amor nos levantamos por los mañanas con ilusión, deseosos como Hércules de poder efectuar nuestros trabajos y hazañas que son el día a día cotidiano.
Mi ser se levanta con ilusión por tenerte, por poder cerrar los ojos e imaginar que nos unimos, que somos como unos paquetes extraviados que buscan a su destinatario con desesperación y anhelo. Buscamos abrirnos y ver en nuestro interior lo más hermoso que hayamos visto. Así es como tú me ves, así es como yo te veo.
Ilusión por demostrarte el significado de dicha palabra y de tatuártela por todo mi adorado templo que es tu cuerpo,centímetro a centímetro, milímetro a milímetro, sin dejar un recodo sin recorrer, queriéndote transmitir con cada toque de tu piel con la mía lo que me haces sentir en todo momento. Saboreándote muy poco a poco a riesgo de que se termine mi manjar, como un niño que termina su helado e implora por otro, yo imploraré por ti cada segundo porque no imagino una vida sin tus labios en los míos, sin tu cuerpo en mi cuerpo, sin tu ser en mi ser.
¿Entonces, qué es el amor? El amor es algo con lo que cualquiera sueña, algo que se anhela y que yo nunca alcancé hasta que tú apareciste en mi camino, mi ángel celestial, para arroparme con tu manto de comprensión, amor y ternura dejándome hipnotizado y postrado a tus pies, como un creyente se arrodilla ante su Dios.
Tú, mi hermosa musa, mi inspiración en todo lo que hago, mi otra mitad, amada mía eres eso y mucho más.
Eres tan especial que no hace falta decírtelo para hacerlo valer, porque desde siempre has tenido ese fulgor que enamora y que haría rabiar hasta a la mismísima Afrodita. Ese brillo del que me enamoré y del que me sigo enamorando cada día.
Te lo digo a diario y aún con osadía y atrevimiento de parecer pesado, te diré y te repetiré eternamente que eres el amor de mi vida, esa persona que siempre esperé y que me hace sentir pleno en todos los sentidos. Sólo tú consigues eso, mi amor, tú eres esa persona especial que siempre estuve esperando. Sólo tú.
Y qué decir de este corazón tan mío corporeamente del que ya eras dueña indiscutible desde el momento en el que lanzó su primer latido al mundo, porque a pesar de que todavía no existieras en él, yo sabía que estabas destinada a ser para mí.
A pesar de que nuestro temido monstruo llamado "distancia" quiera que elijamos caminos separados, y a pesar de las muchas trabas que nos encontremos en nuestro camino, ¿qué es el amor sin lucha? ¿Qué es el amor sin dificultades? Eso no es amor, solo conformismo, solo una idea abstracta y subyacente de lo que en realidad es el amor. El amor es un día a día constante con el que quiero luchar a tu lado, mi guerrera.
El amor es un estado que solo unos pocos logran realmente alcanzar, porque amar no es tener pareja, amar es saber que con ella vives, con ella tocas el cielo, con ella eres todo y aún sin verla ni tocarla la sientes tan cerca que duele por momentos. Amor es sufrimiento y a la vez el momento más hermoso que hayas podido experimentar, porque el amor puede matar, pero también hacernos renacer.
Por eso te pido y te pediré hasta el fin de mis días que siempre estés a mi lado, que nunca me faltes y que nuestro amor sea eterno, tan eterno y perfecto que el resto se muera de envidia, tan eterno que no parezca de este mundo, tan perfecto que seamos un solo ser que habita dos cuerpos, dos cuerpos dispuestos a amarse para toda la eternidad.
Entonces, ¿qué es el amor? El amor eres tú.
Te amo, mi princesa roja.
Tú y Yo por siempre, mi querida alma gemela.
