Mi propósito para vivir.

Bueno antes de empezar primero una pequeña aclaración: Mi usuario antes era Andrea-Taisho29 y subí esta historia, pero me dí cuenta de que le faltaban muchas cosas así que la haré de nuevo y espero que les guste Así que no se trata de plagio ni nada, soy la mismaxD

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Capítulo 1.-La vida cotidiana.

Yo soy Kagome Higurashi, una de las herederas de la gran compañía ''Higurashi''. La compañía pertenece a mi padre Akihiro Higurashi y como soy hija única, tendré que administrarla cuando salga de la universidad. Mi madre es originaria de Inglaterra, ella es Naomi Johnson, ex –propietaria de la compañía ''Prateria''. Se podría decir que soy una chica que no carece de nada material, pero sin embargo, de amor.

Yo vivía en Inglaterra con mi familia, hasta mi cumpleaños número 8. Mi padre falleció ese mismo día en un accidente automovilístico. Muchos chocan por no poner atención al camino, otros por estar haciendo otra cosa y mi padre… Bueno, mi papá sostenía una conversación telefónica conmigo mientras iba al volante, me preguntó sobre lo que quería de regalo, yo solo respondí ''te quiero aquí papá''.

Lo siguiente que escuché fue lo que aún no puedo sacar de mi cabeza: un choque estruendoso y el grito horrorizado de mi padre. Fueron solo 5 segundos, luego se cortó la llamada.

Desde ese día mi vida cambió para siempre , nos mudamos a Japón para que mi madre administrara la empresa, nos quedamos viviendo con mi abuela, la cual, era casi mi madre y la única que cuidaba de mí ya que Naomi (madre) me culpa por el hecho de que mi padre esté muerto y es algo que me lastima mucho.

Entré al colegio Shikon no Tama, más conocido como ''la cuna de los ricos'' ya que cuenta con maternal hasta universidad.

Jamás fui sociable, porque si quieres mucho a alguien y luego lo pierdes, es una decepción inmensa, la cual, no estaba dispuesta a pasar.

En la primaria conocí a una chica la cual siempre se me ha pegado como chicle: Sango Motoharu. Gracias a mi frialdad no tuve la necesidad de tener amigos, pero ella, es la que no se ha cansado de mí… Aún.

Hoy inicio mi último grado de preparatoria con 17 años y 9 sin mi padre, mentiría al decir que no lo extraño…

NORMAL POV.

El despertador sonó dando a entender que sus vacaciones habían terminado y que la tortura volvía a comenzar. Kagome subió la mano perezosamente intentando alcanzar el ruidoso aparato, golpeando a ciegas hasta que por fin dio con su objetivo.

Se levantó y bostezó, haciendo más lentamente cualquier acción. Fue a bañarse pensando qué tal estaría su año, su ultimo año para asistir a la universidad.

Se vistió lo más rápido que pudo para tener tiempo de almorzar algo delicioso preparado por su abuela. Bajó y se encontró con un delicioso omellette con jugo de naranja, tostadas y fruta picada, a lo que se sentó y empezó a comer desesperadamente.

-No comas tan rápido o te atragantarás- susurró amablemente su abuela mientras salía de la cocina y se sentaba en una de las múltiples sillas del comedor.

Kagome tragó fuerte, haciendo que se atragantara.

-Perdón…-tosió repetidamente-Abuela- La mencionada solo rió negando levemente con la cabeza.

-Tu padre estaría orgulloso de verte en estos momentos-suspiró-Cómo lo extraño…

Kagome al escuchar eso dejó de comer instantáneamente poniendo sus manos en sus ojos mientras sollozaba lentamente.

-No, abuela, no…-su voz salió entrecortada-Él no puede verme, él ya no está. ¿Por qué siempre tienes que mencionarlo a el?

La abuela no pudo evitar que se le aguaran los ojos al ver a su nieta en tal estado.

-Porque quieras o no, el estará presente en cada paso que des mi niña- se levantó y fue a donde estaba Kagome, limpiándole las lágrimas-Y así como el, yo te estaré apoyando hasta el último momento de mi vida y aunque muera, seguirás teniendo a esta vieja terca a tu lado-ambas ríen- así que deja de llorar y ve a la escuela ¿sí? No queremos que no te dejen entrar debido a que pareces un zombie- le dio una sonrisa.

Kagome solo se dedicó a asentir mientras le regresaba una leve sonrisa a su abuela, y haciéndole caso, tomó su maleta con todo lo necesario y fue a la escuela.

Kagome siempre caminaba para ir al colegio, ya que se le hacía completamente estúpido e innecesario llegar en una limosina.

Antes de cruzar la entrada del colegio, se dedicó a ver lo que sería su tortura o su deleite por un año ya que la idea de vivir ahí no le gustaba en lo absoluto.

Entró sintiendo una nostalgia increíble porque aunque lo ocultara deseaba tener algo que otras chicas o chicos tenían, un ''propósito para vivír''.

Kagome caminaba en línea recta hacia el edificio de dormitorios femeninos, hasta que alguien se metió en su camino.

-¡Kagome! ¡No sabes cuánto te extrañé en el verano! Intenté contactarte pero no respondías ni mis llamadas ni mis mensajes así que pensé que estarías ocupada-Murmuró la chica con entusiasmo mientras la abrazaba.

-Sango, si no te quitas en 3 segundos te conseguiré una orden de restricción-Sango solo se dedicó a asentir y mirar hacia el suelo tristemente.

Sango Motoharu, chica mitad japonesa, mitad americana futura heredera de dos compañías fusionadas de autos bastante importantes. Delgada, linda, agradable, cabello castaño hasta debajo de los hombros que siempre lo llevaba recogido en una coleta, ojos color miel.

Kagome siguió caminado haciendo como si su reciente encuentro con aquella chica no hubiera existido. De lo que no se percató fue que ahora, a su lado, estaría la chica con la que tanto discutía.

-Con que una orden de restricción ¿eh?- dijo Sango sonriente, haciendo caso omiso a las asesinas miradas que Kagome le enviaba.

La aludida simplemente resopló.

-Soportaré lo que tenga que soportar mientras no tengas contacto físico conmigo, podría demandarte por acoso sexual incluso- después de lo dicho se dedicó a acelerar el paso pero se olvidaba de algo importante: Sango formaba parte del equipo de atletismo desde que tenía memoria.

-Vamos Kagome, no seas tan cruel, y bueno, ¿ya pensaste sobre con quién ir al baile de bienvenida?-Kagome simplemente paró de caminar mientras sus ojos se oscurecían-¿Sabes Sango? No necesito ir a un baile para sentirme más miserable de lo que ya me siento, no entiendo por qué hago el inútil intento de que lo comprendas-Dicho esto simplemente corrió hasta llegar al edificio de chicas y así recoger la llave de su habitación junto con su posible compañera.

-Ultimo año ¿cierto?-Mencionó la Sra. Jenkins (secretaria, vigilante y encargada del edificio de chicas) mientras escribía algunos datos en su ordenador.

-Soy Kago…- La Sra. Jenkins la interrumpió- Querida, sé tu nombre, aparte de que es mi trabajo sería un pecado no saberlo- le guiñó el ojo y prosiguió a entregarle un par de hojas y sus llaves.

Kagome solo tomó las cosas y fue rumbo al tercer piso, habitación 53C. No era muy difícil llegar, solo tomaría el ascensor y subiría tranquilamente.

Con lo que no contaba era que su némesis estaría adentro del ascensor.

-¡Querida! Pensé que en las vacaciones te dedicarías a hacer ejercicio, por lo visto, me equivoqué- rió falsamente acompañada de las otras Barbies mientras que antes de que Kagome subiera al ascensor agregó –lo siento está lleno.

¿Quién era esa chica tan despreciable? Kikyo Nakamura, toda ella era como una típica adolescente americana (solo que era japonesa) chica popular, rumores de cirugías plásticas, líder de las porristas, etc etc. Su familia posee una gran cadena de hoteles reconocidos internacionalmente.

Kagome no se consideraba fea: 1.59 de estatura, delgada, cabello negro azulado hasta algo más debajo de los hombros, ojos cafés. Era constantemente molestada por ser algo parecida a Kikyo, es por eso que se odiaban mutuamente.

Kagome iba tan perdida en sus pensamientos que no se percató de que la puerta de su dormitorio estaba abierta. Entró cautelosamente esperando a ver a la persona que estaría con ella por el resto del año, en cuanto la divisó abrió los ojos desmesuradamente.

-¿¡Tú?!

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Hola a todos, soy Andrea subiendo de nuevo esta maravillosa historia, repito, soy Andrea-Taisho29, solo que cambié mi nombre, espero que les haya gustado este capítulo, realmente me esmeré corrigiendo cosas y así.

Dejen sus reviews, gracias por leer, y espero que esperen con ansias el siguiente capítuloxD ¡Sayonara!