Discalimer: Zankyō no terror y sus personajes pertenecen a Shin'ichirō Watanabe, Kazuto Nakazawa y el estudio MAPPA.
Hvítur
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Un ruido rompe el silencio de la noche y los ojos de Twelve se abren despacio ante tal sonido. Está en su cama y acaba de despertarse, no podría asegurar qué es el ruido o saber de dónde procede sin embargo, lo hace.
Lo sabe.
Se incorpora en su cama y agudiza su oído tratando de escuchar algo más. Las fuertes respiraciones que suenan de forma agoniosa al otro lado de la pared hacen que todo sea negro.
Se levanta de su cama con el rostro serio. Porque no se ha confundido, ha acertado una vez más y preferiría no haberlo hecho. Llega a la puerta tras la cual su compañero ha vuelto a tener una pesadilla. Una de tantas. Cierra los ojos un momento y esboza una sonrisa antes de entrar en esa habitación.
El negro se hace más intenso.
Nine levanta la vista y enfoca a su compañero. Trata de formar una palabra de disculpa pero de sus labios solo las respiraciones agitadas logran salir en ese momento.
Twelve no dice nada tampoco. El silencio es adecuado ahora. Llega hasta la cama de Nine y se sienta al lado de este. Sin decir nada, sin preguntar nada, sin dejar de sonreír. Poco a poco Nine se va calmando, su respiración empieza a regularse mientras el dolor en su cabeza aumenta. Sus manos se aferran a su cabeza con fuerza, como si ese acto pudiera ayudarle a que los dolores cesen. No lo hace, ni nada puede hacerlo.
En negro se va difuminando hasta desaparecer.
Twelve a su lado cierra los ojos y empieza a tararear una melodía. Ese sonido relaja a Nine. Es una melodía que conoce. El silencio sigue existiendo solo roto por el tararear de Twelve y el negro deja de existir en la habitación.
–¿De qué color es?
Nine consigue preguntar al cabo de un rato, y en su voz siempre seria y tranquila no hay ni rastro del episodio reciente que ha experimentado.
—Blanca, como la nieve.
—Todavía.
—No cambiará.
La respuesta siempre es la misma. Siempre es blanca y parece que no dejará de serlo. Sea cual sea el momento, el color perdura.
«Música de una tierra fría» piensa Nine.
—Música de una tierra fría.
Pronuncia Twelve cuando acaba de tararear antes de comenzar a entonar la siguiente.
Y el blanco vuelve a cubrir la habitación cuando Twelve vuelve a entonar otra melodía, en el cuidadoso orden de reproducción que Nine siempre selecciona en su reproductor.
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Me vi Zankou hace dos días en un solo día y me dejó totalmente destrozada, hubo muchas cosas que no me gustaron pero en general la disfruté mucho aunque el final me desgarrada. Me parece una obra tan triste y humana.
Lo de los colores es por la sinestesia de Twelve, diciendo eso solo tenéis que ver qué sonido es el negro y cual el blanco.
El titulo significa «blanco» en islandés.