Naomily.

Sólo una mirada, una puta mirada y ya todo estaba de cabeza. Una mirada y Naomi ya estaba perdida. Sólo una mirada y la rubia estaba más confundida de lo que podía estar en su vida. Sólo una mirada y sus pensamientos se centraban en una chica de ojos color chocolate y pelo rojo. Esa cabellera roja que tanto le gustaba a Naomi pero que no admitía ni siquiera en la soledad de su habitación. Sólo una mirada y no lograba concentrarse, una mirada y vivía frustrada no queriendo aceptar lo que sentía.

Pero Naomi sabía que con esa mirada se sentía como nunca en su vida lo había hecho. Con esa mirada se encontraba sonriendo pensando en ella, en Emily. Esa mirada y soñaba con esa cabellera. Esa mirada y todos los días la buscaba con los ojos en el instituto. Esa mirada y se sentía extraña, extrañamente bien.

La rubia no lo aceptaba, no decía si, tampoco decía no. Tenía un conflicto interno, pero de alguna u otra forma, sabía que estaría con ella, porque Emily le correspondía.

Pero por ahora, lucharía contra eso, contra esa mirada.

Chicos…

Naomi pasó noches saliendo con tipos que ni conocía, pero se daba cuenta que no funcionaba cuando los besaba y se imaginaba a Emily, cuando se acostaban y pensaba qué se sentiría que la pelirroja le besara el cuello de esa manera, ¡joder! Una vez hasta vio el pelo rojo.

Una mirada y estaba perdidamente enamorada de Emily Fitch.

Naomi se resignó, no podía con esa mirada. Tenía miedo, pero quería estar con ella, con la chica que le quitaba el sueño. A la mierda todo, quería estar con Emily y hundir su nariz en esa cabellera roja y aspirar su aroma.

Por eso estaba ahí en su cama con ella, por eso la miraba mientras dormía plácidamente, por eso sonreía. La amaba.

Emily abrió los ojos lentamente y dirigió su mirada hacia los ojos de Naomi. Ahí estaba, esa mirada fue la que volvió loca a la rubia. Ese chocolate derretido le ganó a Naomi Campbell

─ Te amo ─ susurró la rubia depositando un pequeño beso en la frente de Emily.

─ Y yo a ti ─ respondió Emily. Su Emily.

Sólo una mirada y todo estaba bien.