Este es mi primer fanfic en español y por ello seria un honor recibir algun consejo, critica constructiva, o si no entienden algo de la lectura. Asi que no duden en expresarse si asi lo desean. Eso me ayudaria mucho a mejorar. Me inspiré en el poema "Felicidade" (felicidad) interpretado por el grupo O Teatro Magico, denle una oportunidad y escuchenla en youtube. Espero disfruten la historia. Muchas felicidades a todo/as.


Ymir es una joven empresaria. Confiada, imponente, competitiva y ambiciosa. Es un gran prospecto en la compañía para la cual trabaja. Con su lema: "viviré por mi misma" se ha abierto paso en la vida, forjándose un destino prometedor. En unos meses partirá hacia "la Gran Manzana". La asertividad con que maneja los riesgos y su ímpetu al enfrentarse a lo errático le ha ganado el privilegio de representar a su compañía en la bolsa de valores. Esta es la oportunidad de su vida. Ymir esta decidida a ser alguien.

Christa es una payasa trovadora que se dedica a tocar canciones que ella misma compone con su guitarra. Es aun una niña y con esto, al igual que con su trabajo de recolección de latas de aluminio para reciclar, trae el sustento del día para ella y su madre. Su madre esta enferma, pero a pesar de ello trabajó hasta que la debilidad la consumió y sufrió un accidente en su trabajo. Ahora no puede hacer mucho en sus condiciones de salud. Así que a la mas pequeña le toca la carga, obligándose a posponer sus estudios en la secundaria.

Capitulo 1

El gran orbe amarillo se asoma reclamándole, una vez mas, a la gran pálida el señorío de los cielos. Con esto se marca el comienzo de un nuevo día, para que el soñador siga soñando, el desengañado siga su redescubrimiento, el ignorante aprenda una lección y quien sabe, el día en el que para alguno que otro inquilino de este planeta su suerte sufra un vuelco.

Detrás de la pared completamente de cristal , yace una espectadora, que como todos los días, presencia el amanecer callada y quieta, sin mucho en que pensar,-*ring ring* - hasta ahora.

X: Ymir?

Ymir: Si, diga.

X: Disculpame Ymir, se que hoy entras mas tarde pero el jefe necesita verte ya. Dice que es importante.

Ymir: Ya, bien. Dile que estaré allí dentro de una hora.

–-o-o-

La alarma suena, marca las 6:00 am. Christa se apresura a salir de la cama, sintiendo el cálido recibimiento del sol en su cuerpo. Se siente gratificante, así que en un gran bostezo estira sus brazos y se dispone a prepararse para un largo día.

Christa: Buenos días mamá!

Madre: Buenos días mi sol andante. -*tose*

Christa: Eh, no me gusta esa tos mami. Otra vez te quedaste dormida y dejastes la ventana abierta?- junta su rostro en la frente de su madre en busca de fiebre.

Madre: Solo es la garganta reseca, un vaso de agua lo arregla. Ten, el desayuno.- dándole un beso en la frente a la pequeña- regañona.

Christa: Hum, gracias. - respondiendo sin estar muy satisfecha, que digamos, con la explicación.

–-o-o-

Café en mano Ymir se apresura hacia el estacionamiento. Entra y prende la radio mientras le da un sorbo a su café.

Locutor: Se nos anuncia que hay un embotellamiento en la vía principal por motivos de reparaciones. Para todo aquel varado sigue sintonizando que te tenemos buena música para que tu corazón no se agobie!

Ymir: Que?- se quema la lengua con el café- Mmm... maldita sea, quema! - Por unos segundos se queda mirando al espejo retrovisor, revelando unos hermosos ojos castaños inmersos en conjurar una solución. - La parada de autobús! Tengo, exactamente 10 minutos.

Ymir se baja del auto para tomar la parada mas próxima. De un trayecto de 15 minutos hacia su trabajo en auto, ahora se convertirán en media hora con suerte, cuidado si toda una hora a través del sistema de trayectos del transporte publico. Pero definitivamente es la mejor opción a estar dos horas parada en el embotellamiento.

Ymir: Uff, hace siglos que no vengo aquí.- paga y ocupa un asiento, sin mas conmociones.

Comienza a observar el trayecto a través de la ventana. Dentro de sí se despierta una sensación poco familiar, melancolía, ya que ella es mas del tipo de personas que se ocupan por el aquí y el ahora. En el comienzo, cuando no tenia nada solo un corazón lleno de expectativas Ymir tomaba este trayecto todos los días para dirigirse a su trabajo. Ahora no hace falta, con su "diosa" puede viajar a todas partes, así es como le gusta llamarle a su auto deportivo.

Ymir: Lo estas logrando, eh titan.- se dice a si misma y sonríe al reflexionar sobre su vida.

Al fin llega a la ultima parada. Un vez se baja del bus la recibe un deambulante pidiendo dinero y extendiendo su mano mugrienta. Estas situaciones le irritan mucho a Ymir.

Deambulante: Señorita, seria tan amable de darme alguna moneda que le sobre, yo le juro que es para comer.

Ymir: No me sobra nada, y si quieres comer vete a trabajar en vez de acosar a la gente, vago.- con una mirada que evoca frialdad y alejamiento.

La empresaria continua su camino. Comienza a hacer inventario en su mente de los asuntos primordiales a discutir con su jefe. Se detiene justo al frente de un edificio. En el mismo se visualizan unas enormes letras doradas donde se lee: " TRES MURALLAS, CO." El edificio tiene una arquitectura imponente y exquisita, invocando al estilo de la Torre Nina de Hong Kong, solo que en tamaño miniatura. Justo cuando Ymir abre la puerta se le vuelve el recuerdo del disgusto de hace unos minutos antes.

Ymir: A la miseria no se le debe de alimentar. Así de simple.

–-o-o-

Termina su desayuno con celeridad, unas tostadas con jalea y huevos revueltos con un poco de jugo de uva. Fue un buen desayuno, ya que no todos los días es tan abundante. Christa se levanta de la mesa, agarra su garrote y bolso en hombro se acerca a la puerta.

Christa: Adiós mama, y acuérdate de tomar tus medicamentos. Por la noche te prepararé el baño terapéutico.

Madre: Mi hija ten mucho cuidado. Que Dios te bendiga.

Frente al contacto directo de los rayos del sol, sus cabellos dorados se iluminan reflejando luz y sus pómulos se tornan rosaditos por la calor. Su tez es tan clara, que tiene que cubrirse bien para no terminar achicharrada. Camina a pie fuera del barrio, haciendo mente de sus rutas a cubrir hoy. Trabaja para el ayuntamiento a tiempo parcial, manteniendo las áreas de la Plaza de los Soñadores y áreas periféricas libre de basura. Con el garrote recoge las latas de aluminio que luego se canjearan por dinero.

Christa: Buenos días, Don Cirilo, Eulodio, Narciso y Don Pedro!- saluda entusiasmada con las manos.

Ancianos: Hola Christa! Niña de mis ojos, buenos días! Hola!- responden con alegría los ancianos.

Siempre estaban allí en la plaza, aprovechando el frescor de las mañanas para hacer sus partidas de domino. Una que otra vez en su tiempo libre Christa se les unía en las jugadas, era toda una experta gracias al entrenamiento "riguroso" de sus amigos con juventudes acumuladas.

Christa: Tal vez me les una hoy a una partida.- guiñando su ojo y sonriendo.

Don Narciso: Claro que si, y tu vas a ser mi compañera. Lo ven? Yo la escogí primero. Ahora si que la racha me va a durar,he he.

Christa: He he, ay Don Narciso. Cuenta conmigo.