Extraños.
.oOo.
Resumen:
Sus miradas se mantenían fijas la una en la otra y aun así no había nada del todo familiar o del todo desconocido. Eran extraños ante una dolorosa realidad. Unidos por un vínculo de sangre, secretos y amor.
.oOo.
Declaimer: Los personajes y universo pertenecen a Kishimoto. El único fin de este fanfic es entretener a los Fans del SasuKarin.
Advertencias: Universo Ninja. Violencia. Lemon. Ooc. Oc.
Actualizaciones: Este proyecto es para Universo Ninja del SasuKarin month por lo cual durara solo diez días. Actualizaré cada día o día por medio.
―Si no te gusta el SasuKarin te invito a retirarte―
.oOo.
¡Feliz SasuKarin month 2017!
.oOo.
Extraños
Prologo
La ansiedad lo arremetió. Aquel mal presentimiento que lo perseguía hace semanas era cada vez más fuerte.
Esa estúpida sensación de que algo iba mal se intensifico cuando iba de regreso a su preciada aldea oculta del sonido y cuando pudo visibilizar su hogar la imagen le quito el aire. El vació en su vientre se acento.
Él observo la destrucción.
La completa destrucción de su hogar…
De su vida.
El humo se podía apreciar a distancia, una evidente señal de que algo realmente iba mal. Apresuro su paso, corrió como si lo persiguiera la muerte… o algo similar. Los pulmones le dolían y nada lo detuvo hasta por fin llegar a su hogar.
Todo estaba destruido. La puerta de los túneles, las guaridas.
Con gran valentía avanzo hasta encontrar la verdadera destrucción.
La muerte se había adueñado de su hogar.
De su vida.
Y él no pudo evitarlo.
.
.
.
.
Su cuerpo estaba tenso, adolorido y exhausto. Se movía mecánicamente, un pie delante de otro sin cesar y a una velocidad apresurada.
A decir verdad, le dolía mucho más que el cuerpo, le dolía el alma y más. Mucho más.
No podía detenerse a pensarlo. No podía hacerlo ahora cuando estaba tan cerca de lograr su objetivo.
«Solo fija un objetivo, no apartes la vista hasta lograr la meta. No te detengas, no te rindas»
Le decía una lejana voz, la cual no era su conciencia, era un recuerdo. Desde la destrucción los recuerdos lo perseguían y él intentaba dejarlos atrás con cada paso. Mas le era imposible.
Era inútil. No se podía huir de la realidad
No se puede huir de la muerte
Sus rodillas flaquearon, sus piernas cedieron y termino de rodillas en el piso. Podía ver la puerta hacía su objetivo: Konogakure.
Y estando tan cerca se sentía distante. Perdido.
«Solo mantén la calma y no apartes la vista de tu objetivo. Marca tu camino Ninja a través de la calma y veras a través de la tormenta»
Los recuerdos seguían golpeándolo.
¿Por qué? ¿Por qué estaba pasando eso?
¿Por qué tenía que seguir firme cuando había perdido lo único que tenía?
Sabía lo que había pasado, entendía los hechos… pero comprender que no la vería más era agonizante.
Tenía deseos de destrozarlo todo… Nada tendría sentido si ella no estaría ahí para él.
Tan solo respirar y estar ileso se le hacía una burla del destino.
No quería pensar, no quería sentir.
Solo quería transformar en violencia todo su dolor.
«Recuerda estas tres reglas:
Fija el objetivo, no apartes la vista de la meta.
Mantén la calma en la tempestad y lograr todos los objetivos que te propongas.
Y por último… Nunca cedas a la oscuridad. No es fácil el camino de retorno de ella… no cedas nunca a aquellos impulsos que luchan por arrastrarte. Eres mucho más que impulsos… Eres mucho más que un ninja, eres mucho más que tu sangre.
Tú tienes tanta capacidad como desees.
Puedes ser amor u odio. Luz u oscuridad…
Solo ten cuidado con el camino que elijas. Nunca hay caminos fáciles, pero hay caminos que te llevaran a la felicidad…
Y la oscuridad solo te traerá dolor, como a mí»
Recordarla era como abrirse la herida y disfrutar viendo la sangre correr. Dolía cerrar sus ojos y recrear su imagen. Sus ojos amables, su sonrisa sarcástica, su cabello furioso como el fuego.
Karin no era perfecta en muchos aspectos de la vida, pero era una excelente persona. No había nadie tan compañera como ella.
Era lo mejor que tenía en su solitaria vida.
Cerro los ojos con fuerza. El objetivo estaba claro, la calma comenzaba a acudir a su persona y aún tenía algo que hacer…
Respetarla hasta el último suspiro.
Llego hasta la ubicación de su objetivo con pasos seguros y el alma rota. Respiro profundo y dijo: ―Necesito ver al Hokage.
.
.
.
.
Delante de él estaba la máxima autoridad de la aldea oculta de la hoja: El Hokage. Naruto Uzumaki lo miro con sus ojos color cielo que trasmitían tranquilidad. Su rostro, en cambio, se veía agotado, las ojeras estaban marcadas bajo sus ojos y su tez habitualmente morena se notaba pálida, lo que lo hizo preguntarse si él se veía igual o peor. No dormía hace cuatro días y el cansancio comenzaba a apoderarse de él a medida que la adrenalina menguaba. Seguía siendo un humano, después de todo.
―Keisuke― Le llamo la atención Naruto. El ninja del sonido llevaba al menos dos minutos mirándolo raro.
―Si, disculpe. Mi presencia de debe a que necesito darle personalmente el informe de la situación actual de Otogakure.
Naruto suspiro y asintió, esperando a saber que tan grave era la situación para que fuera enviado Keisuke y no un correo electrónico o algo así.
Keisuke tomo unos segundos en busca de las palabras precisas para expresar lo sucedido.
― Hace tres días la aldea fue atacada por un desconocido con un poder brutal, según los supervivientes. Hubo destrozos materiales importantes y varias bajas en nuestras filas de elite, entre ellos Orochimaru. Se ha realizado un control de daños y la situación es crítica. No tenemos ningún dato sobre el atacante. Solo apareció ataco y se fugó. Por ahora no hay ningún motivo evidente, no se ha robado nada, ni ha secuestrado a nadie.
― ¿Orochimaru ha…? ―Naruto no podía creer lo que oía.
―Así es, se sacrificó para detener a su oponente y aun así solo logro causarle heridas graves. El atacante se fue por sus propios medios, con las manos vacías tal y como llego.
Naruto apretó la mandíbula. Hacía tres días desde que había recibido una señal de alerta por parte de la aldea del Orochimaru. La alerta era breve y solo decía que sufrieron un ataque sorpresa de un enemigo desconocido y que la aldea de la hoja debía estar atenta ante un posible ataque similar.
El Hokage había enviado un equipo para comprobar la información y brindar ayuda, equipo que había desaparecido y no se había logrado retomar contacto.
La situación era complicada si el enemigo tenía suficiente nivel como para derrotar a Orochimaru y solo salir herido.
―Entonces es una verdadera situación de emergencia y debe ser tratada con la mayor delicadeza posible. Supongo que como estaba previsto Karin tomara el lugar de líder inmediatamente, tendré una reunión con ella mañana por la mañana ―Explico Naruto y Shikamaru Nara, su mano derecha, asintió listo para comenzar a organizar la reunión y estrategias posibles.
Keisuke miro a través de los ventanales que había en la oficina del Hokage…
¿Por qué tenían que hacérselo tan difícil?
―Eso no va a ser posible, Karin Uzumaki también perdió la vida en el incidente―Expreso.
Era la primera vez que decía en voz alta algo que era tan difícil de afrontar:
Su madre estaba muerta…
Su chakra se había extinguido y él ya no podría rastrearla nunca más.
Su sello, el que su madre le había puesto el día de su nacimiento, para poder encontrarlo en cualquier rincón del mundo, había desaparecido junto con ella.
Y la realidad se sentía más dura que cualquier batalla que hubiera peleado.
―Lo siento mucho―Dijo Naruto y se paró para acercarse al joven ninja.
Keisuke hizo un gesto para detener a Naruto y negó con la cabeza.
No quería y no necesitaba pena de nadie.
Quería justicia… Ese era su objetivo.
―Como la aldea se ha quedado sin líder, sin sucesora y los dos posibles sucesores están en situación delicada, requerimos de los servicios de Mitsuki para formar un consejo provisorio hasta lograr estabilidad.
―Mitsuki volverá en la mañana de su misión, cuando vuelva se le informara la situación y será libre de acompañarte de regreso a tu aldea. Esta noche pensare un plan de apoyo para nuestros aliados, mientras tanto Shikamaru te conseguirá una habitación para que descanses.
Keisuke sintió cierto alivio al oír las órdenes del Hokage. Con todas las pérdidas que había sufrido Otogakure era necesaria la ayuda de su única aldea aliada.
El ninja de la aldea oculta del sonido pensó en rechazar la oferta de una habitación para descansar, aún tenía que organizar los funerales y ayudar a los heridos… pero sinceramente estaba exhausto, volver a su aldea era bajar la guardia y arriesgar su vida antes de tiempo.
.
.
.
.
.
Keisuke y Naruto hablaron un rato más acerca de los detalles de lo sucedido cuando la puerta se abrió llamando la atención de ambos.
El hijo de Karin apretó los puños cuando su mirada y la de aquel sujeto se cruzaron. Y se mantuvieron fija la una en la otra. Era un desconocido prácticamente, pero Keisuke lo recordaba de algún lado, había algo familiar en aquellos ojos negros como el carbón.
― ¿Qué hace él aquí? ―Pregunto entre dientes, tratando de contener su furia.
Sasuke Uchiha… podía recordar vagamente su nombre… y haberlo visto una vez cuando era niño.
Lo recordaba hablando con su madre en susurros a la distancia.
«Sasuke, mantente alejado de él» le había ordenado Karin enfurecida, lista para pelear si era necesario.
Y luego la misma noche había oído a su madre llorando hasta el amanecer…
―Hallé los cadáveres del equipo que enviaste ―Dijo Sasuke, sin apartar la vista del joven Uzumaki ―. Otogakure está destruida, Orochimaru falleció. Y Karin está desaparecida.
A Keisuke le pareció de mal gusto que Sasuke hablara tan ligeramente de su madre. Nunca supo que relación había entre ellos, pero cada vez que alguien lo nombraba los ojos de Karin se apagaban y apartaba la vista.
―Ella está muerta ―Le dijo antes que una furia desconocida se apoderara de él y se lanzara a atacarlo.
.oOo.
Espero que les guste.
Si les gusta o tienen una crítica constructiva no duden en dejarlo en los comentarios.
Nos leemos muy pronto, besos.
