- C R Ó N I C A S N O C T U R N A S -

[Vol. 1]

-1º Fic. -

"I Promise"

…Por que no todo es lo que parece…

Esta historia surgió como un proyecto escolar hace 8 años, desde entonces fue cobrando vida propia, volviéndose en uno de los asuntos más importantes de mi (no tan larga) vida. Aunque después de tantos años, he decidido que es hora de que mis personajes vean la luz y no solo pertenezcan a mis libretas o mentes de mis amigos más íntimos.

Me honra presentarles mis Crónicas Nocturnas, que, como el nombre indica a todos los conocedores del tema, están inspiradas en las "Crónicas Vampíricas" de Anne Rice.

A pesar de ya tener varias "historias" las he tenido que modificar debido a que surgieron por inspiración de Vampiros Famosos. A causa de esto, si algún día llego a publicar, no podré presentarlos tal cual…

Vampiros como "Deacon Frost" (Marvel – Blade), "Lestat", "Louis Pointe Du Lac" (Anne Rice), "Edward Cullen" (Stephanie Meyer) son algunos de los personajes que aparecen y obligan a que está historia sea un "FanFiction"

Así, que espero que si algún día llegan a encontrar uno de mis libros en alguna librería sonrían y piensen "Yo leí la versión original"

Deseo que les guste, y deseo de todo corazón escuchar comentarios, incluso sugerencias.

PD…

Realmente este no es el Tomo Uno, pero es el más adecuado para comenzar

Para Sabrina, Melissa y Fátima

Ang Jiménez

Prologo

Mentiría si dijese que no se como todo comenzó a salir mal, pero por mucho tiempo me rompí la cabeza tratando de descubrirlo.

La incógnita de "¿Cómo Diablos todo termino así?" Comenzó incluso antes que me diera cuenta que esto, no acabaría bien.

Yo era alguien 'normal', con una familia 'normal', con amistades 'normales', pero… En algún momento, entre mi normalidad y la actualidad algo sucedió, un hecho que se escapo de mi comprensión aconteció cambiando radicalmente mi perspectiva de 'la realidad', y ahora… Me encuentro colgada por los tobillos, herida, sangrando y seguramente (y obedeciendo las señales dolorosas emitidas por puntos específicos de mi cuerpo) con alguna fractura, pero eso sí, todo como 'Normalmente' sucede a alguien que está siendo torturado.

Pido disculpas si creen que abuso de la palabra 'Normal' y sus variantes, pero si la repito es por que trato de aferrarme con desesperación a una 'Realidad' que por lo menos hasta hace unos meses tenía, ya que, en el momento final, todos necesitamos aferramos a algo (los humanos vivimos siempre asidos a esta ley, está en nuestra naturaleza, esa es la razón de la existencia de múltiples dioses) y si mi cuerpo se ha resignado a no luchar por vivir (no por que no quiera, si no por que ya no tiene la energía suficiente como para hacerlo), mi alma se aferrara a creer que todo esto es un sueño (uno muy malo por cierto), y que cuando despierte estaré en mi habitación, enredada en mil sabanas y cobertores, incluso, tal vez mi madre este golpeando la puerta avisando que el desayuno está servido.

Creo que comienzo a delirar… "Y aún así creo que mis pensamientos comienzan a abandonarme"

Unos grilletes me mantienen suspendida en lo que aparentemente es un calabozo medieval, o por lo menos eso me hace deducir los múltiples huesos regados en los variados instrumentos de tortura que veo a unos ¿tres o cuatro metros? debajo de mí… Eso me provoca una duda, ¿Cómo Diablos lograron colocarme ahí? Miré alrededor, ¿Hace cuanto que el calabozo había sido construido?

Trate de zafarme una vez más, doblando mi ser intentando llevar mis manos a los argollas que apretaban mis tobillos, pero mi cuerpo estaba demasiado fatigado como para lograrlo, apenas logré balancearme.

"Solo existe el dolor en el mundo…?"

Las sensaciones húmedas de las heridas abiertas me aturden… ¿O solo es el mareo ante la masiva perdida del fluido vital? Ciertamente no conozco la respuesta adecuada, solo sé que esta sensación ya lleva rato conmigo, sin embargo ahora se intensifica, en cualquier momento quedaré inconciente por el acumulo de la sangre restante en mi cabeza.

Comencé a reñir contra mis propios parpados, temía que si se cerraba no se volvieran a abrir, temí no volver a ver a mis padres, o al latoso de mi hermano, temí morir sin disculparme con Cassandra, temía que nadie supiera lo que realmente había pasado conmigo, juró que pude escucharles llorar…

-Bájenla –La fría voz me saco del hundimiento mental del que estaba siendo victima, el eco resonó en mis oídos confirmando al dueño de voz tan arrogante, profunda y terriblemente angelical, no supe que esperar, una oportunidad o el fin de mi vida.

Con mirada nublosa miro como uno de 'ellos' se dirige inmediatamente a una de las esquinas soltando una cadena, tardé en reaccionar que estaba cayendo, solo una fracción de segundo duró todo eso, pero basto para comprender que la caída me mataría, cerré los ojos esperando el trágico final…

-¡BASTARDO! –El gruñido retumbo en mis oídos, ¿Lo ultimo que escucharía en mi vida era un insulto?... Espero el colapso contra el suelo… más me sorprendo al notar que el movimiento se había detenido, ya no caía y un… ¿tambor? retumbaba fuertemente en algún lugar cerca de mí, a la par del latir de mi corazón… y ese aroma…

-Bladimir… -Murmuro entre abriendo los ojos

-Cállate mocosa tonta –Se escucha molesto… "Lo siento" quise decir pero ningún sonido emanó, me sostenía entre sus brazos, comprendí que aquel tambor era su corazón, estaba agitado, me sentí por fin protegida, mas de mi conocer era que en 'ellos' no se puede confiar

-¿Qué sucede aquí? –La segunda voz era femenina, igual o más arrogante que la primera, llena de sensualidad como lo está un panal de miel, no de forma voluntaria, si no de la manera más natural que pudiera existir. No necesité verla para saber que se trataba de Halley Frost, la "Princesa" del lugar, además, mi conciencia no duraría mucho más… las voces se hacían cada vez más lejanas… y ajenas…

-¡La quieren matar! -¿Desesperación o Indignación? Nunca lo sabré, Bladimir Du Astrum siempre representara un misterio, no solo para mí, sino también para todo aquel que le conoce… al igual que todos 'ellos'… Mis parpados se cierran

-Oh… continúen entonces… -Dijo con toda serenidad la chica.

Podía perder toda esperanza.

Me deje llevar por la inconciencia, no quise saber más de mi existir… ni de 'ellos' ni de nadie más en el mundo, si ella lo decía, yo ya no podía anhelar a una esperanza… y renuncie a ellas…