Bernard estaba como siempre atendiendo en su café, donde casi nunca iba nadie, entonces entro alguien nuevo para el, era llamativo debido a su pelo plateado y a sus ojos rojos, aparte de su vestimenta media roquera que traía ese día.
_Buenas tardes, ¿Qué tienes amigo? Dame lo más awesome que tengas—Su se impresiono al ver que este no se asusto siquiera con su presencia, al contrario de la mayoría.
_Hay una oferta de un café latte con pastel de arándanos.
_He! Para que esa cara tan seria rubiecito ¿Cuál es tu nombre?, me presento yo soy el awesome Gilbert Beilschimidt, mas conocido como Prusia, el mejor país de la historia, soy tan awesome que me dieron vacaciones y estoy extinto, pero pronto volverá el imperio prusiano, ya lo vera esa marimacho!—entonces Su por alguna razón sintió que debía aplaudir—. Oye ¿acaso no hablas te pregunte quien eres?
_Soy Suecia, me llamo Bernar… -el sueco era tímido por lo que no pudo seguir hablando, y puso una cara que a cualquiera hubiera asustado, pero Gil se dio cuenta de su timidez y se sonrojo.
_ ¡Ey, ey no pongas esa cara chico! Así que Bernard es muy rudo, te llamare Su-chan ¿te gusta?
_Creo que si.
_Así que Su-chan tráeme tu oferta del día a este awesome hambriento.
_Claro altero lo traigo—y Su se retiro.
_Me pregunto por que me encontré con alguien tan lindo, son como las gafas del estúpido austriaco y la lindura ruda de Lud, maldita sea, porque me encontré con alguien tan indo en un lugar así tan solitario.
_Ya llegue, aquí esta tu orden—y el megane puso la taza y el plato en la mesa—siempre me preguntaba que hablaba la gente sola, siempre que vienen acá hablan solos cuando me voy, pero nunca presto mucha atención a lo que dicen—Gil bajo la mirada y se puso a comer—no pareces de las personas que les gusta estos lugares ¿Por qué estas aquí?—el rubio se estaba interesando y se sentó frente a frente con el albino, e cual casi no soporta la cercanía y tartamudeo un poco.
_Mi hermano tenia cosas que hacer y se olvido del almuerzo, no me gusta molestarlo, él es el menor y es el único que hace algo, no me gusta molestarlo, me siento mal porque antes yo lo crie tan feliz y orgulloso y hoy soy un vago que vive a su costa y si no siempre estorbo un poco a los demás, no es que no me guste molestar, pero odio ser una carga—entonces Su se acerco a Gil y lamio una mancha de crema en su mejilla-¿Qué haces?
_Creo que eres lindo Gilbert-san
_Yo también lo creo S-SU-U-chan…-le costo pronunciar un poco debido a la vergüenza—seguro eres muy popular con las chicas.
_Quiero tener un día una linda esposa en un lindo hogar—dijo como si estuviera viendo esa escena delante suyo.
Gilbert se entristeció un poco, porque claramente el dijo ESPOSA, aunque era verdad que ellos 2 eran hombres y menos podían tener un hogar; aunque tampoco era que el se sintiera aceptando que a lo mejor era gay, tenia en cuenta lo raro de salir con un hombre, pero solo en ese momento se sintió frustrado. Pero a verlo así Bernard lo beso, con un beso dulce y lindo, pero entonces sintió la puerta y se aparto.
_Hermano! –Entro como si fuera su casa Dinamarca, un poco mas y echaba abajo la puerta y los veía a los dos— ¿como haz estado Su? ¿Quien es el nuevo cliente?
_Yo soy el awesome se Prusia, además ya me retiro, tengo que ir a revivir el imperio prusiano—dijo dejando el dinero y llendose rápido.
_No es na…da—por mala suerte Gil no escucho a Su, o tal vez no lo quería escuchar.
Afuera Gil se encontró con Noruega, quien como siempre no estaba de humor, Prusia no lo vio y lo empujo, entonces Noruega lanzo uno de sus hechizos sobre Prusia.
_Idiota, me haz hecho enojar, así que ya que no me viste desde ahora serás ciego.
Prusia alcanzo ha darse vuelta y ver a Noruega antes de ver todo borroso—maldita sea—no se había vuelto ciego, sino simplemente miope, volvió a casa con normalidad casi, pero se percato realmente de su problema cuando sobre la mesa del comedor había un periódico y no pudo leer nada, ni de lejos, ni de cerca; tal vez no era tanto, había países eran megane, pero el era el awesome, no podía pasarle esto.
