El Fin del Mundo.
-Oh, por el amor de todos los cielos, Toshiro.- Karin se llevó la palma de la mano a la frente. –Solo me caí de la silla al piso, ¡no es el fin del mundo!- recordó a su esposo que corría desesperado con Shunpo hacia la cuarta división cargándola en brazos.
-¡Estás embarazada!- señaló con la cabeza su abultado vientre de siete meses. -¡Toda caída es peligrosa!-
-¡Peligro es que me lleves a esta velocidad! ¿Quieres que me maree y vomité a nuestra hija?-
-¡Karin no hagas bromas así!-
-Sí, sí, perdón, ¡pero baja la velocidad! Creo que ya me estoy mareando…- la cabeza le daba vueltas.
-Lo siento.- finalmente dejó de avanzar con Shunpo y solo comenzó a correr hacia el cuarto escuadrón.
-Tu Shunpo es el que me hará parir a la niña antes de tiempo…-
-¡Karin!- regañó.
-Lo siento.- bufó. –Pero habló en serio, Toshiro, es estúpido, solo me caí de la silla.- riñó cruzándose de brazos.
-Aun así hay que asegurarnos…-
-Ay, por todos los…-
Finalmente llegaron a la cuarta división y fueron atendidos por Isane.
-¿Y bien?- preguntó Toshiro sumamente ansioso, frotándose las manos con nerviosismo.
La teniente sonrió.
-Ella está muy bien, la caída no hizo más que sacudir un poco a su pequeña, pero no le pasó nada.-
El capitán del décimo escuadrón suspiró aliviado.
-Muchísimas gracias, teniente Kotetsu.- hizo una pequeña reverencia.
-Oye, Isane-san, ¿está bien que Toshiro me cargue usando Shunpo?- preguntó Karin hablando por primera vez, ya que en todo el chequeo solo había estado con cara de amargada mientras su esposo trataba de no colapsar de los nervios.
-Sí, siempre y cuando no te marees. Si te empiezas a marear y él no para entonces podría traer consecuencias graves…-
Karin de repente palideció.
-Oh, cielos…- se llevó una mano a la boca y otra al vientre. –Creo que rompí bolsa…- dijo alarmada.
Eso fue suficiente, Toshiro se desmayó.
Isane frunció el ceño.
-Eso no es cierto, acabo de revisarte y…- frenó sus palabras al ver como Karin estallaba en carcajadas.
-Tranquila, Isane-san.- se limpió las lágrimas de risa. –Mi hija y yo solo estábamos jugándole nuestra primera broma a su papá.- frotó su vientre con cariño.
Lo mejor de estar embarazada era que Toshiro no podía enojarse con ella o solo tenía que alegar estar haciéndole mal a la bebé y asunto resuelto.
Y no hay que olvidar el hecho de que podía comer tanto chocolate como quisiera, claro. Los antojos sin duda lideraban la lista.
Fin.
Bueno, aquí algo cortito y sin sentido ni trama a las cinco de la mañana solo para joder :'v
Sé que fue corto e irrelevante pero espero que les haya gustado n.n
Los personajes de Tite!
COMENTEN! *o*
Me despido!
CELESTE kaomy fueraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!
