Vagando entre la arena
Desperté de un largo sueño, al abrir los ojos notaba como todo mi cuerpo salvo algunas zonas estaban completamente sumergidas en la arena del desierto. Mi rostro estaba tapado por una mascara de hueso, de una forma u otra parecía estar pegada a mi carne, como si fuera una extensión mas de mi cuerpo. No tenia ningún motivo para levantarme, es mas casi prefería seguir enterrado entre la arena y que esta me enterrase sobre si misma. Me preguntaba a mi mismo cuales eran los motivos para volver a levantarme. - Acaso alguien me recuerda o me espera fuera de aquí? - Era la pregunta que una y otra vez resonaba en mi cabeza. Estar enterrado sobre la arena no me parecía una mala opción para dejar de existir, me sentía completamente libre y vació. No sentía ni frio ni calor, sentía una mezcla de ambos. Aquello era una sensación bien cálida, casi como si estuviera completamente en paz conmigo mismo. Justo un par de minutos después comencé a correr una leve brisa de aire que levantaba poco a poco la arena de una forma bastante apaciguada. Trayendo hasta mi rostro lo que parecí a un trozo de una fotografía en un estado bastante deplorable, en aquel momento podía haber cerrado los ojos y dejar que mi cuerpo se convirtiera en polvo. Pero algo en mi interior no quería dejar que acabara as , pues me impedía cerrar los ojos. Alce mi brazo derecho hasta mi rostro, justo donde estaba aquel pedazo de papel obsoleto. Lo aparte de mi pero sin soltarlo, poco a poco fui sacando una a una las extremidades de mi cuerpo de la arena. Una vez que pude sacar por completo mi cuerpo de la arena sacudí de mis ropas los últimos granos de arena que se habían quedado en mis ropajes. Justo entonces mire aquel pedazo de papel que había llevado hasta mi la brisa, el papel estaba en un estado bastante deplorable, la imagen que estaba impresa en este estaba bastante desgastada, solo se podía apreciar lo que parecía ser la silueta de una chica de cabello rojizo. El resto de la imagen estaba demasiada desgastada como para poder ver mas, entonces un extra o sentimiento me embargo por completo. Sentía tristeza, de mis ojos bajaba resbalando por encima de la mascara de hueso una peque a lagrima, algo en mi interior decía que yo sabia quien era. Pero nada mas, había un gran vació en mi memoria, apenas podía recordar mas haya de hace un momento cuando estaba sumergido entre la arena. Parecía que ya había encontrado un motivo para levantarme. Algo desorientado miraba a mi alrededor, viendo simplemente arena a mi alrededor, no parecía haber ningún rastro de civilización en las cercan as de donde me encontraba. Tras unos segundos intentando pensar a donde deber a de ir, miro a mis pies viendo lo que parece un trozo de una zampakutoh. Algo me dec a que sabia como se llamaba y que me pertenecía, simplemente me agache y la recogí. Tras aquello simplemente me puse a caminar en linea recta, sin saber a donde iba, con la única esperanza de encontrar a aquella persona de la fotografía.
