Advertencia: El siguiente escrito mostrará la relación entre dos personajes del mismo sexo (Mare x Mare). Si la idea te desagrada o molesta, no comentes. Recuerda que las bases de la buena convivencia se generan gracias al respeto mutuo :)

DISCLAIMER: Ninguno de los personajes de la franquicia "My Little Pony" me pertenecen. En su lugar, estos son propiedad de DHX Media y Hasbro Studios. Cabe destacar que no hago esto con fines de lucro, sólo por diversión propia.


Acciones

Fluttershy no tenía por qué sentir celos.

Enserio, ¡No tenía por qué!

Tenía un montón de amigos animales que velaban por su seguridad. Era una yegua que, A pesar de ser tímida, era respetada y reconocida en Ponyville. Y para mejorarlo todo, tenía a las cinco mejores amigas que todo pony desearía tener.

Claro.

Sin embargo, la pegaso no podía evitar sentirse abrumada, deprimida y angustiada, ¡Por qué tenía que ser ahora?

¿Por qué tenía que ser ella?

Un fuerte relámpago sacó a Fluttershy de su catarsis y la obligó a cubrir su rostro con las sábanas de su cama, en la cual ya llevaba gran parte de la tarde escondida.

Pudo haber sido cualquier pony… Pero, ¿Ella?

Quién quiera que haya sido, te habría dolido de la misma forma.

Era verdad.

Fluttershy llevó una almohada a su rostro, suspirando agonizantemente. Marcas de lágrimas aun eran visibles en su pelaje.

Ella sólo había sido una buena pony que se dirigía al mercado a hacer las compras del mes, nada fuera de lo común, ¡Nada malo por Celestia! Fue sin duda una desdicha haberse encontrado a Rarity.

No porque Rarity fuese mala o algo por el estilo. Fluttershy la consideraba una de sus mejores amigas, con la cuál podía compartir su más íntimo secreto sin temor de ser juzgada.

Pero entonces, ¡¿Por qué había dicho eso?!

Es decir, Fluttershy debió haberlo visto venir en algún momento. Ella ya conocía los malos hábitos de su amiga, y las consecuencias que éstos podían traerle.

Pero nunca lo vio venir.

Los chismes eran el delirio de Rarity, Fluttershy era amiga de Rarity. Era más que obvio que ese lunes por la mañana, la unicornio no hiciese más que bombardear a la indefensa pegaso con chismes del fin de semana anterior.

Y así, con el tiempo. Fluttershy era conocedora inconscientemente de cada uno de los secretos más oscuros del pequeño pueblo.

Que Octavia había terminado con Vinyl, que Bon Bon había discutido con Lyra, que el Doctor había desaparecido una vez más, dejando sola a Derpy otra vez.

Que Rainbow Dash y Pinkie Pie había comenzado a salir desde el fin de semana pasado.

Fluttershy enserio trató de mantener su rostro rígido, trató de ignorar ese rumor que en cuestión segundos le rompió el corazón, trató de no soltar ninguna lágrima en público. Enserio trató.

Pero no pudo.

Fue cuestión de segundos para que sus ojos se inundaran de imprevistas lágrimas y su voz comenzara a quebrarse poco a poco. Aún con su vista borrosa gracias a la inmensa cantidad de líquido, la pegaso emprendió el vuelo hacia el lugar más seguro que conocía. Casa.

Casi sin importarle el hecho de que Rarity la estuviese mirando, y luego persiguiéndola.

Fue, sin duda, muy difícil librarse de ella y sus preguntas.

"¡Oh Fluttershy! Eres una tonta" La pegaso susurró, arrullando su cuerpo alrededor de sus cómodas mantas. Su calor corporal aumentando gracias al pequeño conejo que ahora descansaba a su lado, acariciando lentamente su cabello.

Contrastando notoriamente con la horrible tormenta que había en el exterior.

¿Hace cuánto conocía a Dash? Habían sido más años a su lado que sin ella, eso era seguro. Fluttershy aún recordaba la primera vez que hablaron, el primer día del campamento de vuelo, (Que más tarde se convertiría en su pesadilla).

Rainbow siempre estuvo a su lado para ayudarle a resolver sus problemas, incluso si la pegaso de crin multicolor sólo sabía resolverlos con fuerza bruta; Pero lo intentaba, día a día Fluttershy podía ver en los ojos de Dash la determinación por intentarlo. Fluttershy también ayudaba a Rainbow, sólo que de una manera mucho más sutil y psicológica; Fluttershy quería hacerle saber que contaba con su apoyo, (incluso si este no servía de mucho).

Y así, sin saberlo, ambas cayeron en una dependencia compartida, dónde ambas constituían un pilar muy importante en la vida de la otra.

Claro, se habían distanciado un poco con la llegada de Gilda y todo eso. Pero seguían siendo amigas, ¿No?

Claro, amigas. Las mejores amigas.

Entonces Fluttershy, ¿En qué momento te enamoraste de Rainbow?

La pegaso de crin rosada hundió el rostro entre sus cascos. Tratando desesperadamente de callar a esa molesta vocecilla interna.

"No lo sé" Dijo Fluttershy, muy silenciosamente.

¿Acaso fue esa vez que te defendió de los brabucones en Cloudsdale? ¿O cuando te ayudó a superar tu miedo a volar en público? ¿O cuando te salvó del ataque de los Changelings en Canterlot?

"No lo sé" Volvió a decir, esta vez en una voz mucho más alta y poderosa.

Fluttershy se aferró aún más a sus aposentos.

¿Acaso era por su cabello? Esa espectacular melena multicolor, que parecía hacerse una con el viento cuando volaba. ¡Su forma de volar! Fluttershy estaba más que segura que Rainbow Dash era la mejor voladora de toda Equestria ¡O de todo el mundo, por todos los ponies! ¿Acaso era por su sonrisa? Esa burlona sonrisa que solía enojar a cualquiera de sus amigas; A cualquiera, menos a Fluttershy…

Y a Pinkie Pie.

"Agh…" Fluttershy chilló, sintiendo cómo sus lagrimales volvían a llenarse de lágrimas. "Oh Ángel, ¿Qué es lo que me está pasando?"

El pequeño conejo hizo una mueca confundida, y sólo se limitó a apuntar rápidamente la salida del reconfortante cuarto de la pegaso.

"Oh, ¿Cómo puedo ser tan torpe?" Fluttershy dijo, realizando que había olvidado alimentar a sus amigos animales por la tarde, en cosa de segundos, la pegaso de pelaje amarillo ya se había levantado del desorden de su cama, dispuesta a bajar las escaleras y olvidar esa amarga sensación que aun flotaba en su mente.

"Perdón conejito Ángel, no he estado muy bien hoy…" Fluttershy replicó, tomando al conejo y posándolo en su espalda.

Una vez que la pegaso estaba en la planta baja, un fuerte golpe a la puerta la sacó de su horrido trance.

"¡Fluttershy! ¡Soy yo, Rainbow Dash! ¿¡Podrías abrirme!? Acá afuera está helando." Una rasposa voz habló desde el exterior.

Fluttershy calló sobre sus patas traseras, procesando lo irónica que podía ser la vida de momento en momentos.


Rainbow Dash era la capitana del equipo del clima… Hoy era un día lluvioso.

Fluttershy debió haberlo previsto de una u otra forma. Pero al parecer nada estaba de su parte ese día.

Apenas abrió la puerta, se encontró cara a cara con esos penetrantes ojos magenta que solían mirarla desafiantemente, también encontró a la fuerte y determinada pegaso cubierta por la fría agua proveniente de las nubes.

Una Rainbow Dash empapada en su pórtico no era algo que veía todos los días.

Resultaba, que toda esa tormenta había sido causada por el resto del equipo del clima, todo sin la autorización de Rainbow Dash, quien, furiosa, había decidido parar la tormenta por sí sola.

Lo cuál, era algo físicamente imposible.

Luego de perderse un largo rato en la lluvia, Rainbow Dash fue a parar a la cabaña de Fluttershy, empapada, confundida, y aún algo molesta.

Luego de secarse apropiadamente con toallas, la pegaso de crin multicolor tomó asiento en la sala de estar de su amiga, cubierta por una manta y aún así, tiritando.

"Te lo digo Fluttershy, Si no fuese por el idiota de Thunderlane nada de esto estaría pasando," Dijo Rainbow, con su garganta peor de lo normal.

Fluttershy se limitó a guardar silencio, su mente aún era un complicado embrollo. Sólo siguió preparando un té caliente para su amiga.

Amiga.

La tímida pony caminó lentamente hasta donde estaba Dash, posando delicadamente la infusión de hierbas entre sus cascos.

"Eso… eso te hará sentir mejor," Fluttershy dijo en voz baja, ocultando su rostro bajo su espesa melena rosa.

"Gracias…" Rainbow replicó, tomando entre amos casco la delicada taza de porcelana, y bebiendo de a poco el caliente líquido.

Fluttershy aclaró su garganta, ¿Por qué no le decía y ya? La parte atrevida de su alma divagaba; Esa misma parte de su interior que nunca había expuesto por obvias razones; Y que cuando lo había hecho, no había podido controlarse.

El incidente de "La nueva Fluttershy" la perseguiría por el resto de su vida.

"¿Pasa algo Shy'?" Rainbow preguntó.

Claro que pasa algo; Creo estar enamorada de ti, pero tu inconscientemente rompiste mi corazón al entregarle el tuyo a Pinkie. Pero nada grave, nada serio.

¡Sólo dile!

"No pasa nada Dashie…"

Su timidez había vuelto a arruinarla.

"Claro… Verás, ya se está haciendo algo tarde, ¿Recuerdas la lección de nunca volar en las tormentas? Sí, creo que la aplicaré hoy," Rainbow rió levemente, bajando por completo su taza de té, "¿Podría quedarme a dormir contigo? Será como en los viejos tiempos."

¡Dile que sí!

Fluttershy soltó un pequeño chillido de miedo, al mismo tiempo, ambas orejas apegándose a su cabeza, comenzando a retroceder lentamente.

¡Sólo dile que sí!

"Oh, bueno. Si no quieres no importa, no es algo que no pueda manejar después de todo," Rainbow dijo, un leve tono de decepción en su voz.

"Si… si quiero," Fluttershy dijo, un tono más agudo que su voz normal, "Pero… pero…" La pegaso balbuceaba, una constante riña entre su mente y sus acciones.

"… ¿Pero?" Rainbow le siguió el juego de palabras.

"¡¿Qué diría Pinkie?!" Fluttershy por fin dijo en voz alta, al final de la alta oración llevando ambos cascos a su boca, "Perdón por eso, oh Celestia… Enserio, no quería decirlo. Es sólo que Rarity y… Agh, ¡Tonta Fluttershy!"

La pegaso llevó ambos cascos a su rostro, el color carmesí invadiendo éste mismo. Esperando la mortífera y exaltada respuesta de Rainbow Dash.

Que nunca llegó.

"¿Qué tiene que ver Pinkie con que yo duerma en tu casa?" Rainbow dijo, una exagerada mueca en su rostro.

Oh…

Oh.

"Déjame adivinar, ¿Rarity te dijo que Pinkie y yo estábamos saliendo?" Rainbow indagó, Fluttershy asintió cabizbaja, "Oh Fluttershy, ¿Desde cuándo crees en todo lo que Rarity te dice?" Rainbow explotó en carcajadas.

Vaya vergüenza…

Con vergüenza o sin ella. Fluttershy no podía negar que ser había sacado un horrible peso de sus hombros, sólo para en segundos ser ocupado por otra preocupación.

¿Cuándo planeas contarle?

"Creo que si fue algo tonto…" Fluttershy dijo suavemente, acompañado de una melódica y contagiosa risita.

"¿Sabes cuál fue la mejor parte?" Rainbow dijo entre carcajadas, "¡Qué estabas completamente celosa!"

Fue entonces cuando todo el mundo pareció detenerse para Fluttershy.

¿Había estado celosa? Claro que sí, había estado muy celosa sin siquiera bases concretas. Oh Fluttershy, dramatizando sin saber la verdad.

Eso era culpa de Rarity.

Pero, ¿Por qué había estado celosa?

Porque tenía miedo de perder a Rainbow Dash, es así de simple. Eso son los celos, el temor a perder a una persona amada.

Ella quería mucho a Rainbow Dash, quizás más que mucho, quizás demasiado…

Y por eso tenía celos… Miedo.

Miedo a que Pinkie no la tratase cómo ella lo merecía, a que no la dejara ser, a que no la comprendiese como ella creía hacerlo.

"Sólo un poco…" Fluttershy dijo, agua volviendo a nublar su visión.

¡No! ¡No llores frente a ella!

"¿Y por qué?" Rainbow dijo, sin notar la cara de angustia de su compañera pegaso. Un grave error, pues fue cuestión de segundos antes de que Fluttershy rompiese a llorar, y cubriendo su rostro, corriese a encerrarse a su habitación.

Por desgracia de ella, Rainbow era rápida, muy rápida. Sin mayor esfuerzo voló a su lado y la sujetó del lomo.

"Fluttershy, ¿Qué pasa?" Rainbow preguntó, su voz un tanto exasperada sonaba algo cómica gracias al resfriado que recién había adquirido.

¿Qué pasaba?

Había llorado una tarde entera, sola en su cama. Había sufrido en vano, por un momento corto, pero había sufrido… Demasiado quizás.

Y si había sufrido, es porque de una u otra forma se había enamorado.

Pero, ¿De qué servía? Si llegaba a decirle a Rainbow, esta probablemente aguantaría la risa, le diría una que otra palabra reconfortante, casi por lástima. Luego, cada una volvería a sus rutinarias vidas.

Incluso si no llegaba a ser así, la sola posibilidad de que pasase dejaba a Fluttershy sin habla.

Las palabras sin hechos, no valen de nada.

Hechos, hechos…

"¿Fluttershy?" Rainbow dijo lentamente. cualquier otra inquietud callada gracias a unos húmedos labios, que no eran los suyos.

La pegaso de crin rosa se abalanzó contra su amiga, rozando delicadamente sus labios contra los de Dash, suavemente. Tal como ella era.

Intoxicante, suave, pero adictivo.

¿Qué había pasado? No importaba, era un beso, ¡Un beso! Para eso era que servían después de todo. Para explicar el amor cuando las palabras se tornaban superfluas.

Si ese era el caso, ambas lo estaban haciendo bien.

Fue una lastima que Fluttershy se separase de Rainbow una vez que esta ya había cerrado los ojos.

Una acción habla más que mil palabras.

"Perdón Rainbow…" Dijo Fluttershy, cubriéndose una vez más con la espesa melena rosa. Lágrimas dejando en claro lo arrepentida que se encontraba frente a la situación.

Que, en realidad, en ningún momento lamentaba.

"… Está bien," La pegaso de pelaje celeste sonrió, llevando uno de sus cascos al rostro de su acompañante, limpiando suavemente las frescas lágrimas de la pony, "No deberías pedirme perdón."

Fluttershy sintió los músculos de su boca extenderse.

"No lo encuentras algo… ¿Raro?" Dijo, una leve sonrisa iluminando su rostro.

"¿Raro? Raro es que hayas pensado que yo tenía algo con Pinkie Pie. Es decir, es linda y todo eso, ¿Pero enserio crees que estaría con alguien que hable más que yo?" Ambas rieron, ahora que lo pensaba; Era verdad, era imposible que Rainbow pudiese soportar a la hiperactiva pony rosa por más de una hora. "En cuanto al beso no puedo culparte, es decir, ¡Vamos! Soy Rainbow Dash. Sé que soy irresistible."

Fluttershy soltó una pequeña risa poco adecuada para el momento. Era realmente simpático cuando su amiga hablaba así de ella misma. Todo en esencia de chiste, claro.

"Pero hablando en serio. ¿Yo te gusto?"

¿Acaso no había quedado claro con el beso? "Creo que sí," Fluttershy musitó.

Un largo silencio se produjo entre ambas yeguas. Fluttershy miraba hipnotizada los perdidos ojos de Rainbow Dash.

¿En qué se había metido?

"Creo que igual me gustas Shy," Rainbow dijo, cambiando casi por completo su calmada expresión por una más alegre.

¿Enserio?

Una grande sonrisa se reflejó en Fluttershy. Todo en lugar del enorme grito de felicidad que la pegaso guardaba para sí misma.

Al parecer no había sido tan malo.

"La cosa es que… Soy genial para la mayoría de las cosas, eso lo admito," Rainbow dijo sonriendo, "¿Pero el amor? Fluttershy, yo apesto en el amor."

Claro que lo hacía, ¿Cuánto había durado la relación más larga de Dash? ¿Un mes? Al parecer las cualidades de la pegaso le habían costado gran parte de su vida amorosa.

Pero Fluttershy creía ser distinta.

"Podemos apestar juntas," Fluttershy dijo, ambos ojos cerrados, "Si es que quieres… claro." Esperando la estruendosa respuesta de Rainbow, que nunca llegó.

"Me gusta que seas asertiva," Rainbow dijo, una confidente sonrisa volviendo a ocupar su lugar en su rostro.

El primer beso tiende a ser recordado por su torpeza y ternura. El segundo beso tiende a ser recordado por ser un poco más íntimo.

Tal cómo el que Rainbow le propagaba a Fluttershy.

De esos besos que casi arrancaban tu alma y leían hasta el más escondido rincón de tu mente.

Casi perfecto.

Rainbow aclaró su garganta, alejándose de a poco de los cálidos labios de su compañera, "¿Qué tal un picnic en el parque mañana? Después de que me encargue de Thunderlane, claro." La atleta sonrió.

"…Perfecto," Fluttershy respondió, "Oh, y si puedes quedarte acá… si es que no cambiaste de opinión, claro."

"No ha cambiado nada. Aunque si me prestaras una almohada sería ideal, tu sofá no se ve de lo más… cómodo."

"Puedes dormir conmigo hoy… Cómo en la academia." Fluttershy dijo, recordando nítidamente aquellos tiempos en los que ella y Dash compartían cuarto.

Compartían cama de vez en cuando, especialmente en las tormentas. Esta vez sería algo parecido.

Sólo que Fluttershy no estaría asustada.

"Si tú insistes, ¿Vienes conmigo?" Rainbow replicó, volando lentamente hasta la escalera del lugar.

"Oh, estaré unos minutos acá abajo. Necesito alimentar a algunas criaturas," Dicho esto, la pegaso de crin multicolor hizo un simpático gesto y desapareció en la planta superior.

Hubo un prolongado silencio. Fluttershy miró de reojo a Ángel, que durante el último lapsus de tiempo se encontraba recostado en su rincón favorito del sofá principal del hogar de la pegaso.

Sin decir nada, Fluttershy se acercó y abrazó al pequeño mamífero con toda su fuerza, riendo como si se tratara de una pequeña potrilla feliz, (lo cual no estaba muy alejado de la realidad).

Sin planear nada, todo había salido como quería.

Quizás las acciones si decían más que las palabras.


Y aquí está mi nuevo proyecto, recién salido de editar. Prometí subir esto hace unos días atrás, lamentablemente no pude hacerlo. Acaba de empezar el año escolar, y hasta ahora, no he hecho nada más que sumergir mi mente en libros y buscar salas por mi nueva escuela. Bue... ¡Mejor tarde que nunca! :D

Veamos, Flutterdash... ¿Tienen idea lo difícil que es de escribirlo? D: Enserio, meterse en el personaje de Fluttershy me resulta muy, muy difícil; ¡Casi parte mi cabeza en dos! Pero aparte de eso, creo que es una de las parejas más tiernas de todas. Tengo ese gran headcannon de que son muy cercanas, ya saben, por haberse conocido desde pequeñas. Rainbow protegía a Shy de los bravucones; ¡Vaya ternurita! *-*

Amo esta pareja. Pero dudo que podría escribir una historia completa sobre ellas dos. Quizás algún día, ¿Quién sabe?

Hasta ahora tengo planeado (semi-escrito) un Twixie, y un Appledash. ¿Otra sugerencia? no tiene que ser yuri u.u La idea de esto es shippear a todos con todos :D ¡Vamos! ¡No sean tímidos! ¡Pidan!, de una u otra forma, sus ideas llegarán a mi lista.

La siguiente historia será el Twixie que rompeordenes ha anhelado tanto u.u ¡Espero no defraudar! si tengo suerte, estará acá dentro de el fin de semana.

Se despide,

-Andy

PD: "Sorpresas de la Vida" tardará un poco en actualizar, ¡Perdón! pero debo acostumbrarme a mi nuevo entorno escolar u.u