It's…. Cinderella
Capitulo1: Había una vez…
Resumen:
Nota De Autora: Esto es lo mas raro que he hecho, pero bueno.. espero que les guste.
Los personajes no son de mi propiedad, si no de Maki Murakami (a excepción de la madrastra, esa si la invente, y el padre también, ya que… no he visto al verdadero padre de Shuichi, esos 2 personajes yo los invente C=)
Ah y otra cosa, el titulo, es como, en los OVA'S, que para el comercial sale la musiquita y luego "it's… gravitation" haha, esta curada, me encanta.
Esta historia empieza en los tiempos actuales, para que no se confundan.
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La familia Shindou, formada por un padre y su hijo.
El padre era viudo, más sin embargo era dulce, amable y cariñoso con su único hijo, Shuichi.
El pequeño tenía 6 años aproximadamente, era delgado y un poco delicado, sus ojos eran brillantes y grandes de un color morado, su cabello un poco esponjado era suave, sedoso y de un curioso color rosa suave, sus pies eran chiquitos, cosa que a el no le gustaba nada.
Cuando conocías al niño, la primera imagen que el te daba era… "¡oh my god! ¿Es un chico? Creí que era niña :|" al menos, es la impresión que se ha llevado la gente.
El padre, pensaba que tanto su hijo como el, necesitaban una mujer, el una esposa, y el pequeño una madre.
Con ese pensamiento, se volvió a casar, esta vez, con una mujer de mucho dinero con dos hijas de la misma edad que Shuichi: Usami Ayaka, una niña que vestía de rosita, y Usami Noriko (NdA: no se si se acuerden de ella, es la muchacha que sale en la banda de Nittle Grasper, la de cabello morado que aquí lo tendrá café, la del 2do teclado creo), que vestía de verde.
Tiempo Después, el señor Shindou, murió, momento en el cual, salieron a flote los verdaderos sentimientos de la madrastra, enfocó todo su dinero a sus dos principales hijas hasta quedarse en bancarrota y con los celos a la belleza de Shuichi lo convirtió en sirvienta obligándolo a vestirse de niña (:O) y lo apodaron "Cenicienta", de esta manera ninguna chica se fijaría en él pensando mal.
Los años pasaban y las dos niñas brotaban como rosas, hermosas en cada detalle, pero solo en lo físico, ya que en su personalidad eran engreídas, molestas, metiches, mimadas, gruñonas, flojas, bueno, mejor no sigo por que la lista es larga; mientras que el pequeño niño seguía siendo la sirvienta, pero a pesar del vestido humilde, seguía siendo una belleza sin igual.
En una linda mañana, a las 6:42 a.m. exactamente (:P), en el sótano de la enorme mansión (o sea… aun mas abajo del suelo) se encontraba Shuichi durmiendo, roncando a todo volumen, abierto de brazos y piernas, con un brazo tocando el suelo y el celular en la otra.
Se encontraba durmiendo tranquilamente hasta que suena su celular, provocando que se despertara con un pequeño gritito, se sobresaltara y cayera al suelo.
-ouchh… -dijo el peli rosado mientras se levantaba, miro su celular y era su alarma- tonta alarma..
Y sin más la apagó, ya que lo que menos necesitaba era que se levantaran las demás.
Miro al aparato, y no pudo evitar sonreír, aquel teléfono se lo había regalado su mejor amigo: Nakano Hiroshi, al que le decía de cariño "Hiro", lo conocía desde tiempo antes de que su padre se casara.
Bostezo un poco, se estiro tendió su cama y salió rápido de su habitación con un vestido limpio, para ir a bañarse, ya que tenía muchas cosas que hacer.
Después, tomo un poco de dinero y salió.
Shuichi ya tenia tiempo de cumplir los 19 años, iba caminando por las calles con su vestido el cual le llegaba a las rodillas, era de un color café, con la parte de enfrente blanca, con mangas un poco mas largas de los codos, traía sus zapatillas (NdA: claro, sin tacón, de eso si se salvó), que le quedaban un poco grandes, eso era lo que odiaba de sus pies, que nunca encontraba un buen calzado que le quedara.
Conocía a todos en la ciudad, y se llevaba bien con casi todos, había uno que otro al que le caía mal, pero no le importaba. Se detuvo en una esquina, esperando poder cruzar la calle, en cuanto el semáforo indicó rojo, salió corriendo a la otra banqueta, llegando, fue al supermercado, como acostumbraba ir cada mes (yo no se cada cuanto tiempo vayan de compras, pero el va cada mes para asegurarse XD).
Terminando sus compras, fue corriendo a NG records, donde se reuniría con Hiro, Suguru (el tecladista de cabello verde), K y Sakano-san.
Al entrar a la habitación, recibió un "buenos días" de parte de todos, dejo el mandado a un lado y se quito el vestido, mostrando que abajo llevaba un short de mezclilla corto y una camiseta amarilla.
-¿Listo, Shuichi? –le pregunto Hiro con su guitarra preparada
-Hai –dijo el peli rosado asintiendo, y empezaron a ensayar la de "Rage Beat".
Al terminar, todos fueron a un café a desayunar.
-¿Y como te ha ido Shindou-kun? –preguntaba Sakano antes de tomarle a su té.
-Ufff.. lo mismo de siempre: a prisas, lo bueno es que puedo darme un respiro todas las mañanas después de ir a ensayar –le respondía mientras comía un pastel
-Se lo merece el crazy guy – decía K
-¡Pero no puedes vivir así Shindou-san! –le decía Suguru
-Claro que si, así vivo desde hace 13 años y así viviré hasta que me muera, la misma madrastra me lo dice día a día
-¿Cuál es el plan de tu madrastra de acuerdo contigo?
-Dice que seré la sirvienta por siempre, si ella muere entonces Ayaka y Noriko tendrán que compartirme, si se llegan a casar, lo cual dudo, tendrán que ponerse de acuerdo para ver que días estoy con una y que días estoy con otra
-¿Y no has ido con los de derechos humanos o la policía? Eso es abuso
-Tres –dijo Hiro
-Tres veces he ido, y ella siempre se sale con la suya –dijo el peli rosado
-¿Cómo esta eso? –pregunto el peli verde un poco confundido
-La primera vez tenía 8 años, le iba a llamar a la policía pero cuando su madrastra se enteró fingió llorar, Shuichi se la creyó y no les llamó
-La 2da vez, Shindou-kun si los llamo, pero ella lo trato muy bien y en cuanto se fue la policía lo mando a limpiar la casa entera 3 veces, sin maquinas o desinfectante, todo con su cepillo de dientes y una cubeta de agua
-La 3era vez, la madrastra se enojo tanto que amenazo al policía y casi le dispara al menso este… -dijo Hiro señalando a Shuichi
-Baka… -susurro el peli rosado
…Silencio…
-¿Y como es que estas desocupado en las mañanas si se supone que deberías ir a la escuela?
-Por que no va a la escuela –decía Suguru- ¿no lo sabias, Sakano-san?
-¡¿Qué?! ¿p-p-pero por que?
-Por que de acuerdo con mi madrastra "estudio en casa", pero lo único que se es sumar y restar
-¿Por qué crees que esta tan tontito? –dijo Hiro
-Creí que era un daño cerebral o que lo habían golpeado muy fuerte… -dijo K-san
-Pues no, pero deberías ir a la escuela, es muy importante que sepas todo lo básico, si no, se te complican mucho las cosas
-Pero seré sirvienta de por vida, ¿de que me va a servir estudiar?
-Solo convence a tu madrastra a que te lleve a la escuela, te compre un libro o te enseñe algo –le dijo Hiro
Más al rato, fueron a casa de Hiro, para que Shuichi se quitara su ropa y se pusiera el vestido, después, tomó sus cosas y se fue a su mansión, todavía tenía tantas cosas por hacer.
Por la tarde, cuando estaba barriendo la habitación de su madrastra decidió decirle lo que había discutido con su grupo.
-¿Milady? –le dijo Shuichi antes de irse, ya que había terminado y debía seguir con las demás habitaciones
-¿Qué quieres? –le dijo mientras leía un libro con los lentes puestos, tenía el cabello suelto y largo de un color café claro.
-Yo.. eh.. etto.. quería preguntarle… si podría..
-¿Si podrías que? ¡Habla ya Cenicienta!
-Que si podría estudiar
La madrastra al oír esto bajo el libro, se quito sus lentes y se le quedo viendo extrañada.
-¿Qué dijiste Cenicienta?
-Que si puedo ir a la escuela
-No. Eso te quitaría tiempo, pero ¿por qué quieres estudiar? ¿quién te dio tan estúpida idea?
-Pues… mi amigo Hiro dice que es necesario que estudie y sepa lo básico, pero el no puede enseñarme por que esta ocupado y va a la escuela
-¿Entonces como se le ocurre pegarte ideas tontas que el no piensa cumplir?
-Este.. no se..
-Esta bien, a lo mejor con eso se te quita lo tonto. Puedes contratar a algún tutor, pero debes haber terminado tus tareas en cuanto tu tutor llegue
-Hai, lo haré… no la decepcionare, gracias –y sale corriendo para terminar de limpiar
Más al rato, se encontraba a un lado del teléfono con el librote ese enorme de "La Sección amarilla", buscando algún tutor, hasta que llegaron las hermanastras molestas y metiches bajando de las escaleras.
-¿A quien le llamas Cenicienta? Si es a tu amiguito Hiro-san, llamale desde tu celular aprovechado –dice Noriko desde las escaleras
-¡¡Ohh!! ¿le vas a llamar? –dice Ayaka emocionada, ya que el ha sido "el amor de su vida" desde que lo vio por primera vez
-No, voy a llamarle a alguien para que me ayude a estudiar
Las dos chicas se miraron sorprendidas, ¿acaso escucharon bien? ¿Cenicienta Usami quería estudiar?
(NdA: recuerden que Shuichi al pertenecer a la familia de las Usami, y al morir su padre le pusieron su propio apellido: Usami, y por el apodo de Cenicienta… bueno, ya saben)
-¿Por qué quieres estudiar? –pregunto Ayaka
-Por que si, Hiro dice que es necesario
-Pero eres una boba sirvienta, fuiste una boba sirvienta y siempre lo serás
-Corrección, soy un bobo, no boba, sigo siendo hombre
-¡Tienes vestido, zapatillas de mujer y te haces llamar hombre jajaja! –y se empiezan a burlar por el comentario de Noriko
-Eso no importa, no tengo que demostrarle a la gente lo que soy –dijo serio mientras seguía buscando, ellas se callaron ante el comentario, se enojaron y corrieron escaleras arriba con su madre
-Al fin, silencio –decía mientras marcaba el numero que acababa de encontrar, espero un par de segundos y le contestaron
-Moshi-moshi, Centro de Educación, Fujimori Tomoyo, ¿en que puedo servirle? –contestaba una muchacha (NdA: ya se, los molesto mucho, pero entiéndanme, no se nada de eso, solo uso mi imaginación, no supe como llamar al lugar, creo que ni se contratan tutores a domicilio)
-H-hai.. habla Shindou Shuichi, quisiera contratar un tutor… -decía apenado
-Claro, su dirección –Shuichi empezó a dar la dirección y datos de su casa, le dijeron que en una hora llegaría, y colgó.
Se fue al sillón a mirar la televisión, al fin y al cabo, no tenia nada que hacer, sus deberes ya estaban hechos claro, a menos de que le hablaran para que hiciera algo, lo cual dudaba totalmente.
Se quito los zapatos, subió los pies al sillón y se les quedo mirando…
-Odio mis pies –dijo antes de encender la televisión
¿Continuará?...
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Por favorrr!! Envíen reviewsss!!! Onegaiii….TT-TT
Ahh por cierto, si tienen dudas referido a lo de la casa, la mansión NO ES la misma que la de Cenicienta.