Saludos a todos, por aquí ando otra vez y con nuevo fic (dejando atrás los One Shots, YEY!), espero les agrade o por lo menos los deje un poquito picados para que sigan leyendo. Aprovechando que son vacaciones me puse a escribir y saque ésto de mi distorcionada mente, además de que me operaron del tobillo y tengo que estar en reposo total T.T
Pásenle y lean, no olviden dejar un review al final, mínimo para saber si sigo escribiendo o mejor me dedico a otra cosa ¬¬
Disclaimer: Todo personaje, objeto, lugar o demás cosa reconocible NO ES MÍO, pertence a J. K. Rowling, nuestra guía espiritual. El resto si es mío.
LIVE FOREVER
Capítulo I. Turn into
Había sido la mejor noche de su vida, ni planeado hubiera salido tan perfecto. Más allá de la alegría por terminar el último año de Hogwarts, más allá de la colosal fiesta que la torre de Gryffindor ofreció, más allá de la última broma que los Merodeadores realizaron, James Potter sonreía por una razón más grande.
Parecía que fuera solo ayer cuando a sus 11 años había comenzado a estudiar en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Recordar por unos momentos lo que siete años de su vida guardaban en recuerdos y anécdotas, tristezas y alegrías, victorias y derrotas, sin duda la nostalgia le pega a cualquiera cuando llega al final de una etapa. Y James Potter, sonreía.
El joven se enderezó de la cama, buscó a tientas los lentes perdidos entre las cobijas. Era una mañana de Junio de 1976, miró a su alrededor y encontró a sus amigos profundamente dormidos. Sirius y Peter roncaban y babeaban en el suelo del cuarto, al parecer no tuvieron la decencia de llegar a sus camas. Remus era un bulto sobre su cama cubierto completamente por cobijas y ropa, una imagen poco ortodoxa cuando de Lupin se trata. "Excelente fiesta, será una leyenda en esta escuela", pensó James, "Y ya que no hay nadie más despierto, mejor me la sigo otro rato". James se tiró nuevamente sobre el colchón y regresó a sus sueños sobre quidditch, quidditch, un poco de quidditch y cierta chica que le arrancaba suspiros por el simple hecho de existir.
- ¡¡COWABUNGA!!
- ¡No Sirius¡No hagas eso!
- Demasiado tarde, el muy idiota lo hizo¿sigue vivo?
- Aargh….
- Si, aún responde al dolor, eso no se verá bien mañana.
- No importa, déjalo ahí acostado, en un rato se le pasará y andará de perro otra vez.
- Moooonry… hic… Trooongs…
- Si Wormtail¿qué pasa?
- Me sientooo... hic... un poquito ma-mareado.
- Eso se debe a que has bebido demasiado¿cuántas llevas?
- Ah… ¿Tenía que ir contando?
- No, no te preocupes, mejor ve a sentarte un rato.
- Si, si, gracias… hic… eso haré.
- ¡Potter!
- Ay Dios mío, ahí viene…
- …tu látigo, lamento dejarte solo pero, eh, mejor me voy, lo siento Prongs.
- Lobo canalla, mal amigo, no me abandones ahora que te necesito, pero ya me pedirás un favor y… Estee, hola Lily (sonríe, eso siempre ayuda).
- No me des esa sonrisa que no te creo nada. Esta fiesta ya se salió de control y todo por culpa de ustedes.
- ¿Nosotros? (ponle cara de inocencia) Lo único que hicimos fue traer algo para tomar, es decisión de los demás si beben o no, además, vamos Lily (ahora una sonrisa), es la Gran Despedida de los Merodeadores, merecemos una fiesta que pase a la historia¿cierto? (y guiño, perfecto).
- Siempre tienes una excusa para todo¿verdad? Mmm… Supongo que mientras no se metan en problemas más serios que un dolor de cabeza por la mañana no habrá tanta bronca. No sé que es lo que tienes pero de alguna forma sabes cómo convencerme.
- No lo sé, muñeca¿qué podría ser? (El Encanto Potter, infalible como siempre).
- Payaso, mejor ven, vamos a bailar.
- Por supuesto…
Y es que la fiesta estaba en su mejor momento, una buena pieza de Rock incitaba a bailar a todos los que aún no estuvieran suficientemente perdidos por el exceso de beber. Era el último día de clases y por la mañana del siguiente los alumnos regresarían en el Expreso de Hogwarts a sus casas para pasar el verano. Era el último día del último año para algunos de ellos, entre los cuales destacaban los Merodeadores. Reconocidos por su arduo labor y trabajo como "pranksters" durante su estancia en Hogwarts, los cuatro amigos no podían terminar de otra forma sus días en este castillo que participando en la mejor fiesta que se hubiera visto en años.
Algunos como Sirius y Peter se tomaron muy en serio eso de que "no debía quedar rastro alguno de la fiesta" y bebieron todo lo que encontraron en su camino. Peter estaba sentado en una silla con la mirada perdida mientras que Sirius ya se había levantado del suelo y se dedicaba a coquetear con la primera chica que encontrara en toda la sala, "No importa la situación, nunca hay que perder el estilo," era una de las tantas frases de Sirius. Por otro lado, Remus encontraba atractivo el ritmo que escuchaba y hasta intentaba bailar perdiendo todo pudor que fuera característico en él, para sorpresa de varios no era tan malo como uno creería.
James la estaba pasando bomba y no era para menos, mientras "Squeeze Box" sonaba sobre sus cabezas, él vivía el mejor de sus sueños al bailar con la pelirroja que lo traía loco desde mucho tiempo atrás. Miles de batallas libradas y finalmente la victoria era suya, había logrado que la Head Girl de la escuela aceptara salir con él cierto día de invierno, a partir de entonces el odio y rechazo que la chica habría mostrado hacia el muchacho había sutilmente cambiado en algo más. James no estaba muy seguro de cómo definirlo pero para él era la situación perfecta, el momento soñado largamente anhelado.
Miró a su compañera de baile, su cabello, su sonrisa, sus ojos, su alegría, "sin duda ella también se la está pasando bien", pensó mientras ajustaba sus anteojos que le resbalaban por la nariz. "Me pregunto…"
- ¿Lily?
- ¿Si James?
- (Me dijo James T.T soy tan dichoso)
- ¿Qué te pasa¿Por qué pones esa cara?
- ¿Qué? Ah, no, nada, estaba pensando en otra cosa.
- A veces eres raro¿qué me ibas a decir?
- Ehm (mírala a los ojos y no titubees), Lily, hace tiempo que hemos estado saliendo…
- Ahá…
- Y estar contigo ha sido lo mejor que me ha pasado (además del Mundial de Quidditch hace 2 años¡fenomenal!)…
- Yo también la he pasado muy bien contigo, James.
- Lily, he estado pensando mucho sobre nosotros…
- Si…
- (Vamos James, sé un hombre) Y quisiera saber si…
…
- ¡¡¡PRONGS!!! Mi amigo, mi hermano.
- (Sirius¡idiota!) Ah, Padfoot¿es que acaso no ves que estoy un poco ocupado?
- ¿Bailando con tu amorcito? Si ya lo noté pero tienes que venir a ver esto, no lo vas a creer. No te importa que me lleve un momento a Prongs¿verdad Lily?
- Descuida, tengo que ir a ver a mis amigas. ¿Te veo después, Potter?
- Si, seguro (maldita sea mi suerte).
- Ven, hombre, muévete.
Sirius agarró a James de la camisa y lo llevó consigo mientras James miraba cómo la pelirroja se alejaba hacia un grupo de chicas que platicaban animadamente.
- "Recuérdame golpearte mañana temprano", dijo amenazadoramente James.
- "Si, si, lo que sea, ahora observa ahí entre todas esas personas¿lo ves¡Es Moony!", dijo Sirius mientras señalaba hacia donde se encontraba Remus bailando, pero el licántropo había perdido la camisa y se movía candentemente entre varias chicas con I Love to Boogie como canción de fondo.
- "¿Me trajiste a ver a Moony bailar sin camisa¿Eso era lo importante?", James no podía creer el mal criterio que su amigo podía tener, lo había interrumpido mientras estaba con Lily para algo tan banal.
- "¿Qué dices? Míralo, bailando con tres a la vez, mejor alumno no puede ser, aprendió todo de mí, estoy tan orgulloso de él", Sirius fingió que se limpiaba una lágrima.
- "Está ebrio, mañana no recordará nada y tu me trajiste a verlo. Mejor me regreso con Lily."
- "Que aburrido eres, yo voy a que Moony me presente una de sus amigas."
- "Eres un caso perdido". James se dirigió al grupo de chicas que había visto hace unos momentos con la esperanza de ver a Lily con ellas. Para su desilusión no se encontraba ahí, sin embargo una de las chicas al verlo lo llamó:
- Chida fiesta¿eh?
- Ah, hola Jenny, dime algo¿viste a Lily por aquí?
- Si, hace como un minuto pero se fue
- ¿Sabes dónde la puedo encontrar?
Había lechuzas volando por todo el lugar, unas entraban al castillo después de salir de cacería, otras apenas iban en busca de su cena. Después de un rato la cosa se empezó a calmar y ya no era tanto el ruido de aleteos y chillidos. Lily Evans miraba por la ventana de la torre hacia los campos verdes de la escuela, hacia un lado comenzaba el bosque, hacia el otro el lago y a lo lejos en la penumbra se erigían las montañas. La noche de verano era fresca y agradable, el cielo despejado permitía admirar una media Luna y las estrellas en todo su esplendor. De repente se escuchó que la puerta de la lechucería abría, la chica giró la cabeza y miró al joven que entraba.
- Hola.
- Hola.
- Tu amiga Jenny me dijo que seguramente estarías aquí.
- Te dijo bien.
- Lo sé.
James se acercó a la joven, se detuvo y miró por la ventana. Después de un poco de silencio, tomó aire y dijo:
- Es nuestra última noche en este lugar.
- Si.
- Pensar que han pasado siete años desde que llegamos aquí.
- Es mucho tiempo.
- Y al mismo tiempo ha sido tan corto.
Nuevamente se detuvo a pensar. Eran tantas las cosas que quería decir en ese momento pero no encontraba las palabras ni el modo de expresarse. Ahí estaba, la noche de su graduación, en la parte más alta del castillo, mirando hacia ningún lugar, Lily Evans, la chica de sus sueños a un lado, un vacío en el estómago y las manos sudando. Era como si el universo se hubiera puesto de acuerdo para ponerlos juntos en ese momento y lugar exactos.
- "Lily, yo…"
- "Espera."
- "…quiero decirte…"
- "No digas más." La pelirroja lo miró y el chico quedó encantado. Era tan frágil y dulce, tan sincera y profunda, tantas cosas que se pueden decir con una sola mirada.
- "Tan solo…", mirándose a los ojos la tomó de las manos, poco a poco se acercaron uno al otro, cuando sus caras se encontraron demasiado cerca se miraron las bocas como si fueran un par de extraños y cerrando los ojos dejaron que el espacio que quedaba entre sus labios se perdiera…
Continuará
Por supuesto, James no puede ser tan feliz desde el inicio de la historia y que continúe así ¿qué clase de fanfic sería si permito eso? La historia se pudo llamar de muchas maneras pero preferí nombrarla como una canción de Oasis.
El nombre del capítulo es homónimo al de una canción de los Yeah Yeah Yeahs (excelente, por cierto). La última escena tardé como hora y media en escribirla (si dar un beso en la vida real es muchas veces complicado, imaginen narrar uno, considerando el significado que tiene para el resto de la historia) y todo el tiempo la imaginé con esa canción de fondo, de ahí la decisión. Las otras canciones mencionadas son: Squeeze Box de The Who y I Love to Boogie de T-Rex, ambas son de aquella época, quería que la historia estuviera lo más apegada a su realidad como fuera posible.
No olviden, dejense un Review por ahí... y de paso bajen esas canciones, se lee mejor el fic si están escuchándolas, claro ;)