Disclaimer: Los personajes son de Marvel, o la mitología nórdica o.. de quien sabe, pero no míos, por desgracia.
Advertencia: Delirios de la autora.
Las mujeres de Midgard son extrañas
.
Ya estaba cansado que este escenario se repitiera desde hace unos meses, cada día creía mas que las mujeres de ese planeta estaban locas.
—Lo siento, señoritas —en su voz se notaba la incomodidad de estar rodeado.
El rubio se disculpaba con un grupo de mujeres desde hace veinte minutos, aunque cuando escuchaba el ruido de una cámara sonreía para esta. Busca con la mirada a su acompañante, esa persona que luego de peleas lo había acompañado, mira a Loki con expresión de auxilio pero el otro solo lo mira molesto, tal vez por no ser él la persona con fanáticos suplicando su amor.
—Tengo pareja, no puedo aceptar la oferta que me proponen.
—¡Pero hemos escuchado que Jane te dejo!
El rubio hace una mueca, guarda el gruñido y recuerda que tiene que ser educado con las mujeres, para luego negar con la cabeza.
—Yo la dejé a ella, no fue al revés —suspira molesto—. Estoy en una relación seria, no puedo aceptar lo que piden.
Vuelve a buscar a Loki con la mirada, mientras con cuidado se saca las mujeres de encima pero no lo ve. Quiere gruñir molesto por abandonarlo pero sus pensamientos se cortan y sufre escalofríos cuando entre las mujeres alguien se acerca, siente unas manos heladas que lo recorren por el pecho. Se queda mirando a la mujer que lo aleja de las demás, tiene cabello largo azabache y unos ojos verdes demasiados conocidos, termina enojado ante la idea del otro aunque la muchacha se le ríe en respuesta.
—Lo siento, pero él es mío.
—Si, él… ella es mi pareja —responde paranoico, mirando a todos lados, deseando que las manos del otro no se conviertan en serpientes o en una cuchilla.
Algunas mujeres luego de varias respuestas escuetas de su relación se van indignadas, otras se quedan lamentándose y con las pocas fotos que pudieron sacar al Dios del trueno, otras pocas son más valientes y miran a la mujer con rencor.
—Soy su futura reina, deberías practicar arrodillarte —hace un gesto desdeñoso Loki a una que no deja de mirarlo.
El rubio pone los ojos en blanco antes de corresponder el abrazo.
—Llamaré a Banner para que suelte a Hulk si no te comportas —murmura al oído del otro.
Al ver como su rostro de Loki se transforma rápidamente en uno de pánico, no puede evitar reír de forma estridente ante la reacción. De igual manera, cree que le pedirá al otro que siga de mujer en las próximas salidas, las mujeres de este mundo eran demasiado extrañas.
.
-das Ende-
Notas finales: Hace mil no publicaba, encontré esto en mi drive y bueno, tal vez en una hora me arrepienta de subirlo.
¡Nos vemos!
