Es mi primer fic y bueno, espero que les guste ._./
Lo siento si hay algo de Ooc no es algo que yo pueda controlar (?)
Dejen Review (nose-comose-escribe) .
Sora conocía a Zero desde hace tiempo. Lo conocía tanto como para adivinar que algo le estaba sucediendo. No era tonta. No porque pasara todo el tiempo encerrada en su cuarto era tan ingenua. Zero cada vez estaba mas distante, a veces se marchaba sin razón y otras ni siquiera aparecía y las tardes para Sora se volvían aburridas. A causa de su enfermedad no podía salir de día y luego del atardecer regia el toque de queda por la clase nocturna quizá por eso su vida se basaba en libros, música y manga.
Tiro su manga favorito al suelo y se vistió con el uniforme. A juzgar por el espejo le quedaba más suelto de lo que debería, pero eso era normal, ya que aún con el uniforme femenino varias veces la confundían con un chico. Trataba de no acomplejarse por eso, pero a veces le era imposible. Había decidido ir a ver a Zero, ahora estaría en el jardín principal haciendo guardia, conteniendo a las chicas gritonas que esperaban por la clase nocturna. Sora jamás comprendió del todo el motivo de tanto jaleo pero quizás hoy pueda descubrirlo.
Camino por los pasillos con cierta ligereza, hoy se sentía bien, lo suficiente como para poder pararse en la luz del sol. Se detuvo en uno de los enormes ventanales para ver el espectáculo que era tantas chicas reunidas. Al parecer Yuuki Cross trataba de calmarlas. Yuuki era la hija del director. Ella era completamente distinta a Sora. Yuuki tenía el cabello hasta los hombros era de un bonito color café, mientras que el de sora era tan corto como el de un niño y blanco pálido, casi como su piel. Mientras que la mirada de Sora era más bien tranquila y calmada la de Yuuki era energética y electrizante. A veces se comparaba con ella y pasaba semanas tirada en la cama soñando con ser así de genial. Busco a Zero pero no lo encontró, así que decidió acercarse más, lo suficiente como para ver mejor pero también para no ser vista.
Estaba detrás de una columna observando, atenta. Cuando la puerta principal se abrió dos líneas se formaron alrededor del camino, las chicas estaban ordenadas y listas para alabar a sus superiores. Era una tontería. Cuando vio a la clase nocturna pudo entender un poco mejor a esas desesperadas muchachas. Todos los chicos de la clase nocturna poseían una belleza sobrenatural.
Vio a un rubio con un increíble ego adelantarse y gritar "¡Bang!" actuando como si le disparara a las adolescentes mientras estas se desmayaban de la emoción. Sora frunció el ceño, era patético.
Más atrás vio a un muchacho de cabellos castaño rojizos de mirada melancólica. Sintió una punzada en el corazón, parecía que ya lo había visto antes. Al ver a la linda chica junto a él esa mínima esperanza de conocerlo desapareció, sin embargo el chico pareció sentir los ojos negros de sora puestos en él ya que se volvió a verla y abrió los ojos con sorpresa. Sora se escondió por completo detrás de la columna.
Luego de unos segundos volvió a ver, gracias a dios el muchacho ya no la miraba. Dejo salir un gran suspiro con alivio. Sintió una mano en su hombro derecho y dio un pequeño salto, asustada.
-¿Qué demonios haces aquí?- Dijo Zero furioso.
Sora rodeo los ojos, pensando una bonita mentira. Claro que no iba a decirle que su intención al ir allí fue para verlo, para comprobar si actuaba así de arisco con todo el mundo. Ahora que lo pensaba bien se había distraído mirando a la clase nocturna y no había notado que Zero no estaba allí, entonces no seria una mentira después de todo.
-Podría preguntarte lo mismo. Deberías estar allí, ayudando a tu novia.
-Yuki no es mi novia, y estuve buscándote por todo el instituto, idiota.
- Pues yo vine para ver porque hay tanto alboroto a estas horas, imbécil-Replico con una sonrisa sarcástica en su rostro.
-Podrías haberlo visto desde tu ventana.
-Pero… -Zero giro su vista hacia Yuuki y cuando Sora estuvo a punto de continuar él la interrumpió.
- Déjalo, ve a tu cuarto. Sin embargo –Enfoco sus grisáceos ojos en ella y sacudió cuidadosamente su mal peinado cabello-, me alegra que hayas tenido la fuerza suficiente para venir hasta aquí aunque sea por motivos estúpidos.
Antes de que ella pudiera procesar y asimilar el hecho de que Zero le había revuelto el cabello él ya había desaparecido en dirección a Yuuki.
Se quedó petrificada observando la situación que se daba a unos cuantos metros de allí.
Un muchacho de cabellos café le sonreía a Yuuki y Zero parecía entre preocupado enojado por este hecho, solo bastaba verlo caminar para notarlo. El muchacho que hablaba con la hija del director era Kuran Kaname, según Yuuki le había contado, él la había salvado cuando ella estaba perdida de niña y por eso le tenía un gran respeto y admiración. Aunque por otro lado Sora dudaba que su apego a Kaname fuera por algo ajeno a su físico, no tenía mucha fe en el amor, para ella solo existía la atracción física.
Sora confirmo sus sospechas hacia Zero cuando este tomo a Yuuki de la mano y la arrastro lejos del líder de la clase nocturna. Zero estaba enamorado de Yuuki. Sintió otra punzada en el corazón y esta vez tuvo que cerrar con fuerza los ojos para alejar ese dolor. Cuando volvió a abrir los ojos lo único que vio fue una sonrisa amable. Kaname le sonreía, pero no parecía feliz, más bien como si estuviera muy triste. Un mal presentimiento se apodero de ella y no le quedo más opción que encaminarse a su habitación.
