Hace años no me pasaba por aquí xD

No crean que me he olvidado de esta adorable pareja o algo por el estilo, simplemente cuando te metes a otros fandoms se vienen más ideas a la mente Dx

En fin, encontré una serie de retos (aunque era de dibujo pero meh) así que subiré de vez en cuando un drabble de estos dos de vez en cuando. No todos tendrán una relación entre sí y usaré varias facetas tomando en cuenta algunas situaciones~

Gracias a AkitaCami02 que ha sido de gran ayuda a la hora de hacer estos drabbles xD

Espero que les guste~


Tomados de la Mano

La primera vez que tomaron su mano fue en una fría tarde de invierno, ambos se dirigían al punto de encuentro que tenían con su grupo ya que se habían encontrado en el camino. El ambiente era bastante callado para ambos, Neru por su parte no tenía una conversación en mente y tampoco quería quedar en ridículo haciéndole una pregunta que posiblemente terminaría de nuevo en este silencio. Len por su parte, tampoco sabía que decir para hacer hablar a la rubia que caminaba a su lado, ¿cómo tratar con una persona con la cuál casi ni hablabas? Y para empeorar su suerte, ella tenía esa mirada de «odio estar aquí contigo» o eso era lo que él pensaba.

Un estornudo hizo que ambos pararan su caminar.

—Salud.

—Gracias —murmuró ella desviando la mirada.

La miró de reojo notando como estaba más abrigada de lo normal, incluso sobaba sus manos contra la tela de la bufanda en un intento de tener algo de calor.

—¿Por qué no llevas guantes?

—Son una molestia.

—¿En serio? —parecía algo sorprendido por aquella respuesta tan simple por parte de ella.

Para gran sorpresa de la rubia, el chico de orbes azules tomó una de sus manos y se estremeció al notar lo fría de estas.

—De verdad están muy frías, incluso a través de mis guantes puedo sentirlas… —se quejó él y Neru se zafó del agarre sorprendida.

¿Cómo era posible que un simple tacto como ese pudiera hacer latir su corazón como loca? Le echaría la culpa al maldito frío.

—No me toques con tanta confianza, es mi problema —replicó ella dispuesta a seguir caminando pero al instante fue detenida por el agarre del contrario.

—Deben dolerte las manos por el frío ¿no? —comentó él.

—Estoy bien.

—Ten, te doy mis guantes —dijo él mientras le pasaba las prendas a ellas.

—¿P-por qué haces esto? ¿N-no ves que también te dará frío? —replicó ella, se sentía sumamente avergonzada pero a la vez feliz de este hecho. Pero a la vez se preguntaba ¿acaso este chico no tiene vergüenza?

—Bueno…entonces, tengo una idea —dijo formando una gran sonrisa.

Neru parpadeó varias veces el ver como él comenzaba a ponerse uno de los guantes, antes de que ella pudiera preguntar qué estaba haciendo, él tomó una de sus manos y le dijo:

—Si nos tomamos de la mano y cada uno usa un guante, debe estar bien ¿no?

Aquella sonrisa casi provoca que la chica adicta a la tecnología sufriera paro cardíaco por aquel acto tan amable por parte del rubio.

—¡Eres un idiota! —replicó ella totalmente avergonzada—. ¿No te parece muy vergonzoso que estemos cogidos de la mano?

—Pues, tampoco me gustaría que siguieras teniendo frío —hizo un puchero algo decepcionado, esta expresión sólo afectó más al corazón de la rubia quien se preguntaba si el Kagamine podía llegar a ser más tierno.

«Maldición Neru, recuerda que es menor que tú» se replicó para sí misma.

—Además no veo otra opción… —siguió el rubio. Esto era demasiado para Neru, verlo actuar con esa amabilidad tan genuina e inocente la hacía sentir culpable por la manera en la cual lo estaba tratando en ese momento.

—B-bien, pero sólo por hoy —murmuró ella totalmente avergonzada. No podía creer que estaba aceptando hacer algo tan vergonzoso como eso, pero debía admitir que esas expresiones del Kagamine eran muy convincentes…

El resto del camino, Neru sentía como su corazón se iba a salir de su pecho al sentir la calidez de la mano del contrario, parecía que ambos estaban en una cita, pero sabía que esto sólo era por la inocente amabilidad del Kagamine, tampoco debía malpensar la situación. Aunque el resto del camino fue silencioso, de alguna manera, se sentía menos incómodo que antes y eso por lo menos disminuyó sus preocupaciones.

Cuando llegaron al restaurante, ambos se soltaron las manos y Neru le devolvió el guante a Len.

—Neru-san, cada vez que tus manos estén frías, puedes tomar las mías siempre que quieras —dijo él rubio de nuevo usando esa sonrisa tan brillante.

Definitivamente aquel chico le iba a dar un infarto en el futuro. ¡Ser tan lindo debería ser ilegal!


¡Gracias por leer! Y recuerden, dejar un review nunca está de más :'3

Haruka-sama se despide~