Ninguno de los personajes de Agents of SHIELD, o Marvel en general, me pertenecen, pero adoro sus películas y, sin duda, su serie. Por eso mismo, gracias a un ataque de inspiración, y al no poder creerme que Ward sea malo, si, ha elegido un mal camino, eso es evidente, todos lo sabemos, pero no me creo que sea malo, no realmente, no después de ver ciertas cosas.

En fin, que como no me creo que sea malo y creo que su lugar es con Skye y con su equipo, con su familia, me he decidido a plasmar parte de lo que por mi mente pasa. Espero que os guste y, por favor, sus reviews son importantes para saber si os gusta y continuar la historia de forma abierta.

RECUERDOS DEL PASADO

Capítulo 1: El pasado siempre vuelve

Encerrada en aquella sala, su mente voló al pasado, un tiempo donde volar de un lado a otro en el bus era lo cotidiano, donde aquella sala no era una prisión impuesta por si misma (auto impuesta) sino un lugar donde interrogar, amenazar o asustar al enemigo. En aquel avión tenía un hogar y una familia...Sin duda, muy diferente al presente...la desconfianza, el miedo, la traición, ese era ahora su día a día, y la dolía...

No pudo evitar lanzar un suspiro lleno de amargura, mirando nuevamente a su alrededor, soledad, vacío...una vez al día recibía la visita de Coulson, el hombre al que respetaba y quería, el padre que nunca había tenido. Suspiró de nuevo, negando con la cabeza, no quería recordar a su padre biológico, un asesino despiadado y sin corazón, con una lista de crímenes incalculable a sus espaldas, que había intentado acabar con la vida de su gente...ojala nunca se hubiera encontrado con ese monstruo...

Ward. El nombre golpeó su mente con tanta fuerza que sintió que se mareaba y tuvo que apoyar la espalda en la pared, centrando la mirada en algún punto sobre su cabeza. Aún le dolía la traición de aquel hombre, Grant Ward, su ex OS, su compañero, su protector, su amigo, el hombre en el que confiaba, el hombre del que se había...

Lanzó un gruñido al aire, enfadada consigo misma por lo ocurrido y por, aún después de todo, no poder odiarle y echarle de menos. Ward es Hydra, se recordó a si misma pero su corazón se negaba a ello y se lo demostró chocando contra su pecho con vehemencia. Se llevó la mano al pecho y volvió a suspirar, iracunda, recogiendo las piernas para esconder el rostro entre ellas, sobre sus brazos.

- Ward...

Susurró el nombre tan débilmente que apenas ella pudo escucharlo. Tampoco escuchó los insistentes pitidos de su pulsiómetro advertirla de lo que ocurría, a medida que el dolor y la rabia crecían en su interior.

Sus pensamientos viajaron al pasado nuevamente, a una épica batalla naval que el capitán de ambos bandos se negaba a perder...el agua se despejaba, los barcos eran tocados, hundidos y los capitanes, tan cabezotas y orgullosos como eran, atacaban verbalmente al otro para intentar saber dónde se ocultaban los barcos restantes.

- Eres una novata con mucha suerte -protestaba el hombre al ver hundido su último navío- ¿seguro que no has pirateado el juego y estás haciendo trampas?

- Qué tu seas pésimo en esto no significa que yo haga trampas, Ward -se quejaba la joven, falsamente ofendida por las palabras de su compañero-

- Ya claro...¿y debo creerte? Seguro que ya has pirateado las cámaras del bus más de una vez -la pinchaba su supervisor, escondiendo tras la pantalla del juego una sonrisa divertida ante el gesto de su pupila- eres una chica muy mala, Skye

- Agente Ward, esta empezando a ofenderme realmente -podía decir lo que quisiera, su sonrisa traviesa demostraba que él había acertado- ¿por quién me tomas, robot?

Inconscientemente Skye dejó escapar una sonrisa divertida, sincera y auténtica, ante el recuerdo de aquella tarde tranquila y libre de sucesos extraños y caóticos que amenazaran con acabar con La Tierra tal y como se conocía.

- Robot...

Volvió a susurrar, invadida repentinamente por un calor familiar que se extendía desde su pecho, sintiéndose extrañamente tranquila y aliviada. Por alguna razón sintió la necesidad de soltar una carcajada al recordar el rostro enfadado y derrotado de su OS aquel día al ver fracasar su idea de derrotarla en la batalla naval y clamar que debía hacerle caso por ello. Fue entonces, al alzar la cabeza para reír, cuando vio el gesto preocupado y confuso de Phil Coulson, el ahora director de SHIELD.

- Coulson, ¿qué hace aquí? ¿ocurre algo? -preguntó la joven agente, aturdida-

- ¿Y eso me lo preguntas tu a mi? Debería ser yo el que lo preguntase -caminó lentamente, acercándose, para acercar una silla y sentarse frente a ella, que aún sonreía- ¿Que ha ocurrido?

- Lo siento señor, pero no se ha que se refiere -ladeó la cabeza, sin comprender que sucedía-

- ¿No lo sabes? El suelo comenzó a temblar de forma repentina Skye, por eso estoy aquí

- ¿De qué esta hablando? -miró a su alrededor y luego al pasillo a través de la puerta abierta, donde la agente May esperaba, observándoles, todo estaba en calma, nada se movía-

- Vinimos corriendo por que el suelo estaba temblando, Skye -su mirada siempre sincera, fija en la de ella, demostraba que sus palabras eran cierta, había provocado un nuevo terremoto en la base y no se había dado cuenta-

- ¿Están todos bien? -pregunto entonces alarmada, dejando caer las piernas-

- Tranquila, todos estamos bien -la tranquilizó el hombre, sonriendo y tomando sus manos entre las suyas con suavidad- cuando estábamos llegando todo empezó a calmarse, ¿realmente no te diste cuenta? Cuando abrimos la puerta estabas ahí, sonriendo y no contestaste cuando te llame, pensé que lo estabas controlando

- No, yo...-sonrió con suavidad, negando con la cabeza- solo estaba pensando...

- ¿Pensando? -Coulson parecía cada vez más confuso y no pudo evitar reír por ello- me gusta verte reír, hacía mucho que no escuchaba tu risa -comentó con calma el hombre, sonriendo- debía ser un buen pensamientos

- Lo era...-asintió levemente antes de suspirar- lo era, AC...

Sintió la necesidad de abrazarle, de sentirse protegida del dolor que volvía a inundarla y se cobijó en los brazos del hombre al que quería como a un padre. Este la recibió entre sus brazos, consolándola de aquel pensamiento que tan pronto la había hecho reír como temblar entre sus brazos. No quiso preguntar que la perturbaba, no necesitaba preguntar, sabía que Skye se lo diría cuando estuviese preparada, hasta entonces, él podía esperar, intentando apartar su sufrimiento, protegiéndola de él.

- Tranquila Skye...

Susurró, acariciándola el cabello, mientras May se situaba a su lado, mirando a la joven con genuina preocupación, la caballería se había encariñado profundamente de la joven hacker a la que un día, lejano ya, no había querido ni ver.

- Todo esta bien, todo se arreglará... -siguió susurrando, mirando a May con profundo dolor, escuchando los leves gimoteos de la chica-

- No...nada esta bien Coulson...nada esta bien... -susurro en un gimoteo lleno de dolor- ya nada volverá a estar bien...

- No digas eso Skye -intervino entonces la agente, manteniendo la calma- aprenderás a controlar tus nuevos poderes, encontraremos la forma de ayudarte

- Debería marcharme, alejarme para no haceros daño -comentó al apartarse levemente de su jefe, secándose las lágrimas-

- Eso jamás, Skye -sentenció el hombre de forma autoritaria, mirándola con el cariño con el que miraría a su propio hijo, sentándose a su lado en la cama para abrazarla contra él- nunca vuelvas a pensar en esa posibilidad, no vamos a dejarte ir...

Sintiéndose conmovida por el paternalismo de su viejo amigo, la agente May tomó su lugar en la silla y, durante largo rato, permanecieron los tres hablando, convenciendo a la menor de ellos de que no importaba lo que pasara, nunca dejarían que se la llevaran lejos de ellos.

- Nada volverá a ser como antes...-susurro Skye entre sueños, agotada, cuando Coulson la arropó, acariciándola la cabeza antes de alejarse- robot...

Se removió entre las mantas, acurrucándose, dejando escapar un suspiro antes de dejarse llevar al mundo de los sueños. Coulson miró a May ante la palabra, entendiendo por vez primera en el día, que había calmado y atormentado a Skye por igual, o mejor dicho, quién...

- ¿Crees que sigue queriéndole, Phil? -la voz de la agente fue lo suficientemente alta como para que su compañero la escuchara, pero Skye siguiera durmiendo-

- ¿Crees tu que le odia, Melinda? -respondió con una pregunta a la que May negó después de unos segundos- tendremos que esperar a que Skye pueda aclarar sus sentimientos, May

- Ese hombre es un traidor, Phil, solo puede hacerla más daño, la utilizó, la hirió, nada de lo que dijo fue real -protestó, viendo como el hombre caminaba hacia la puerta, siguiéndole- no le defiendas

- A veces no estoy tan seguro, Melinda...

Comentó con calma, abandonado el lugar, llevándose consigo las inquietudes de su joven agente, sabiendo que solo ella podría ver la verdad en Ward, sabiendo que él había sido el causante de la extraña calma que había inundado a Skye una hora antes y, sabiendo ante todo, que sería él el que estaría en los sueños de la joven esa noche.

CONTINUARA…

A ver si os gusta mi idea y, sobre todo, mi historia. Envíen sus reviews por favor, sean para bien o para mal, lo que piensen los lectores, ayuda a los escritores. Gracias por leer.