Bueno tenía pensado hace mucho hacer un fic de Ron-Hermione y como me gustaba mucho esta canción pues... salió este songfic. Sólo espero que les guste y que me dejen sus opiniones
Todos
están abajo, puedo oír sus voces desde aquí,
parecen tranquilos, aunque yo sé que en realidad no lo están.
Me
levanto de la cama y me miro al espejo, que me devuelve la imagen de
una chica joven, pero con la cara triste y preocupada. Y es que
refleja lo que siento por dentro.
Ya
hace tres meses desde que se fue, y no sé nada de él.
Nunca sé nada.
Es
lo mejor, así ni él ni yo corremos peligro, pero me
está comiendo por dentro. No sé si está bien o
no, si está herido o si está… muerto.
Intento
no pensar en ello, pero no puedo. Todo lo que veo me recuerda a él
y no sé si esta vez volverá a casa o no lo hará
nunca más.
Y
si no fuera por ti yo no podría vivir
En
el vacío de estos días de no saber
Me
siento en el suelo. Estoy agotado, pero es lo que tiene mi oficio, yo
elegí mi destino.
Aunque
la verdad es que ahora me gustaría estar en otra parte y no
sentado en una cabaña abandonada, esperando.
Mi
mente vuela para pasar el tiempo y llega hasta una casa donde se
encuentra toda la gente a la que amo, incluida ella.
FlashBack
-
Eso es trampa- gritó Ginny tirándole unas palomitas a
su hermano
-
Se llama "Saber jugar"- le replicó Ron a su hermana
mientras todos reían.
Estaban
todos: Bill, Charlie, Percy y los gemelos. También estaban
Remus, Sirius y hasta se había dignado en venir McGonagall que
miraba divertida al cuarteto que jugaba a las cartas mientras
charlaba animadamente con Molly y con la señora Lombotton.
Neville
no había llegado todavía del trabajo, pero pronto lo
haría.
-
Según las reglas muggles eso está permitido- dijo Harry
con una hermosa sonrisa a Ginny que se ruborizó al instante
-
Ah no, de eso nada. Yo también conozco las reglas muggles
Harry, y eso no es verdad- dijo con cara indignada Hermione. Los tres
chicos la miraron y entonces los cuatro comenzaron a reír.
-
¿Así que tú también votas por hacer
trampas?- le dijo juguetónamente Ginny al chico moreno. Harry
sonrió
-
Sí, pero no lo digas en voz alta.
-
No es justo, pues si tú vas con Ron, yo voy con Ginny- dijo
Hermione. Ron la miró con ojos suplicantes y la chica le tiró
una palomita que Ron se comió al vuelo. La chica de pelo
castaño rió.
En
ese momento alguien tocó con los nudillos en la puerta. La
sonrisa de la gryffindor se congeló, todos guardaron silencio
y no se movieron.
Arthur
y Tonks que salían en ese momento de la cocina se quedaron
paralizados.
Remus
se levantó y muy lentamente llegó hasta la puerta.
Hermione
comprobó nerviosa como Ginny susurraba "No, por favor no".
Lupin llegó hasta la puerta y la abrió mientras que con
la otra sujetaba la varita. Mundungus entró en la casa
sonriendo nerviosamente al licántropo.
Al
verle todos los pronósticos de la pelirroja se cumplieron y
sin poder evitarlo salió corriendo rumbo a su habitación.
Harry
miró con cara de angustia como la chica se iba, al igual que
los otros dos. Hermione se levantó y se alejó
intentando alcanzar a Ginny.
Mundungus
se acercó a los dos chicos que le indicaron con la mano que se
sentase.
-
Esta será la última misión de todas- dijo
mirando a Harry- si Pettigrew muere Voldemort no podrá
regresar de ninguna manera.
-
Está bien- dijo Harry afirmando
-
Yo iré contigo- dijo Ron
-
No Ron
-
Sí Harry, yo también soy auror y soy tu amigo para lo
bueno y para lo malo. Así que iré- contestó el
pelirrojo firmemente. Harry sonrió agradecido. Siempre era
bueno tener la compañía de su mejor amigo y más
en esos momentos donde más lo necesitaba.
-
Neville ya lo sabe. Al amanecer vendrá y os acompañará
hasta la mitad del camino- luego hizo una pausa- sois nuestros
mejores aurores. Regresar con vida.
Ron
se levantó y le dio unas palmadas en la espalda.
Mientras
tanto una chica pelirroja de veinte años lloraba desconsolada
abrazada a su amiga. A ella también le entraban ganas de
llorar y quería tumbarse en su cama y estar sola, pero ahora
tenía que ser fuerte, por Ginny, y también por Harry y
Ron.
- Ya no aguanto más Hermione- dijo con voz ahogada la pelirroja.
En
ese momento se abrió la puerta para mostrar a un chico moreno
de veintiún años. Hermione dio un beso a Ginny en la
frente y se marchó.
La
gryffindor bajó al salón, todo el mundo se había
ido a dormir. Tenía frío así que se sentó
en un sillón que se encontraba de frente a la chimenea y que
al mismo tiempo daba la espalda a la puerta.
Al
rato la puerta se abrió dejando pasar a un joven de veintiún
años, alto y delgado. El chico se pasó la mano por su
pelo corto y pelirrojo y susurró:
- Mione- la chica sintió una punzada en el estómago al oír su nombre pero se asomó.
El pelirrojo al verla se acercó a su compañera cogiendo un sillón y poniéndose a su lado, pero no dijo nada, sólo junto las palmas de las manos y miró la chimenea.
-
No quiero que te vayas- dijo Hermione intentando contener las
lágrimas.
-
Lo sé- dijo el chico suspirando- sólo quería
saber una cosa
Hermione le miró sin decir nada
- Si consigo volver- Hermione al oír esto no pudo aguantar y una lagrima recorrió sus rosadas mejillas- ¿Me esperarás?
Entonces Hermione se levantó llorando y se abrazó al pelirrojo sentándose encima de él.
- Siempre te he esperado y siempre lo haré- dijo separándose y besándole tiernamente en los labios.
Cuando
empezaba a amanecer Ron se despertó y miró a su lado.
Hermione dormía plácidamente.
El
chico sonrió mientras se levantaba " Si supieses cuanto te
amo" susurró mientras se terminaba de vestir. Antes de
abandonar la habitación de la chica se acercó a ella y
la besó.
Y
si no fuera por ti yo no sería feliz
Como
lo soy cuando con tus besos me veo partir
Y
es que sólo con saber que al regresar
Tú
esperarás por mí
Aumentan
los latidos de mi corazón
Bajó hasta la cocina, aunque no tengo mucha hambre. Allí sólo está Ginny tan ausente como yo y Remus que me mira examinándome. Lupin se acerca a mí y después de darme un beso que me ayuda, aunque poco, me tiende una taza de café. Me siento al lado de Ginny y la cojo de la mano. La chica me mira y entonces se da cuenta de mi presencia, parece que soy la única capaz de transmitirla esperanzas. Aunque las mías se están agotando. Me estoy envolviendo en la oscuridad. Sólo quiero volverle a ver. Saber que está bien. Empiezo a creer que Ron es la única razón por la que estoy viva, la única razón que tengo para vivir.
Volverte
a ver es todo lo que quiero hacer
Volverte
a ver para poderme reponer
Porque
sin ti mi vida yo no soy feliz
Porque
sin ti mi vida no tiene raíz
Ni
una razón para vivir.
Me
levanto de la cabaña, tengo que ir al hospital. Pettigrew a
muerto y con él las esperanzas de que Voldemort regrese, pero
aun así tenemos que tener cuidado. Miró una botellita
que tengo en la mano. Odio esta poción desde segundo cuando me
convertí en Vicent Crabbe, pero recuerdo con una sonrisa al
ver a Hermione con esas orejas puntiagudas. Aun así a mi me
pareció guapa. Miró de nuevo la poción mientras
la destapo, todo sea por Harry.
Me
tomo la poción multijugos y poco después llego hasta un
hospital muggle. Ahora mi pelo pelirrojo se ha transformado en uno
rubio corto y mis veintiún años han cambiado a unos
diecisiete de un chico delgado con vestimenta muggle. Mis ojos azules
se mantienen intactos. Creo que me parezco algo al odioso de Malfoy
cuando estaba en Hogwarts. Llegó hasta la puerta de la
habitación de Harry y abro.
Está
muy grave, los médicos no saben qué le pasa, pero yo,
que finjo ser su hermano pequeño no les puedo decir que se
debe a una maldición. Antes de perder la conciencia Harry me
dijo que lo trajese aquí y que no contara nada, no llamase a
nadie.
No
sé que hacer, en estos casos es cuando más necesito a
Hermione. Ella ha sido siempre la que puso la lógica en todo.
Me salvo de estrangularme en mi primer año, salvó a
Sirius en tercero. Sin ella, seguramente hubiéramos muerto.
Llego
hasta la cama y cojo la mano de mi mejor amigo. Muchas veces pienso
que si no le hubiese conocido, si no hubiese hablado con él en
el vagón del expreso, yo no estaría aquí, ni
jugándome la vida cada segundo. Pero él fue el que me
hizo amigo de Hermione. Suspiro. Todo lo que pienso llega hasta el
mismo punto. Ella.
Quisiera
regresar y poder abrazarla, pero no sé si podré
regresar algún día, Harry está muy grave.
Aprieto
con fuerza la mano de Harry como intentando darle fuerzas.
- Tenemos que volver Harry- le digo con lágrimas en los ojos- Hermione nos espera.
Lo
único que quiero es poder regresar
Y
si no fuera por ti yo no podría vivir
En
el vacío de estos días de no saber
Y
si no fuera por ti yo no sería feliz
Como
lo soy cuando con tus besos me veo partir
Y
es que sólo con saber que al regresar
tu
esperarás por mí
Me
encuentro en mi cuarto mirando por la ventana el estanque donde
tantas veces nos hemos bañado desde que entramos en quinto en
la orden.
Recuerdo
como al principio sólo os bañabais vosotros tres porque
a mí me daba vergüenza, siempre fingía que erais
muy poco maduros y me sentaba a la sombra a leer un libro. Aunque
nunca leía. Siempre miraba por encima del él como os
divertíais y os envidiaba. Hasta aquel día que por idea
tuya Harry y tú me cogisteis y me lanzasteis al agua con capa
incluida. Casi me ahogo. Pero ahí estabas tú, que no me
soltaste. Todavía recuerdo como me sentí aquel día,
desde entonces nunca pude dejar de reír, de ser feliz.
Desde
ese día tú eras mi única razón para
vivir.
Aumentan
los latidos de mi corazón
Volverte
a ver es todo lo que quiero hacer
Volverte
a ver para poderme reponer
Porque
sin ti, mi vida yo no soy feliz
Porque
sin ti mi vida no tiene raíz
Ni
una razón para vivir
Harry
está mejorando. Los médicos dicen que es un milagro,
porque eran días lo que le quedaban de vida. En verdad si fue
un milagro, fue un milagro que me acordase de aquella poción
que nos enseñó Snape en quinto curso. Nunca me enteré
en esa asignatura de nada y menos cuando Hermione se colocaba delante
de mí, porque sólo podía observar su ondulado y
castaño cabello, como se movía cuando intentaba ayudar
a Neville con las pociones. Era incluso gracioso ver cuanto se podría
arriesgar por él.
Me
vuelvo a concentrar en mi mejor amigo que empieza a moverse, parece
que dentro de poco abrirá los ojos.
Ojalá
lo haga pronto y volvamos a casa, todo depende de su fuerza. Pero él
es fuerte, lo sé, me lo dicen sus ojos y su valor, al fin y al
cabo es un gryffindor.
Poco
a poco Harry ha ido mejorando, ya me habla y estamos pensando en
regresar. Pero el camino es peligroso. Ahora más que nunca
tenemos que tener cuidado. He preparado una poción multijugos
también para Harry, creo que no le hará mucha gracia
ser una chica de cinco años, pero es la única manera de
poder llevarle encima y que no sospechen.
Lo
más importante ahora es no morir, no me da miedo la muerte, es
sólo que no me quiero morir sin volver a ver esos ojos
marrones y ese pelo castaño y enmarañado. Y ese cuerpo
que esconde bajo la túnica de mi casa.
Sin
poder evitarlo sonrío. Sé que ella me está
esperando, me lo dice el corazón. La quiero más que a
nada en este mundo. Es mi razón para vivir.
Eres
todo lo que tengo
Y
no me quiero morir
Sin
poder otra vez
Volverte
a ver
Porque
sin ti mi vida yo no soy feliz
Porque
sin ti mi vida no tiene raíz
Volverte
a ver es todo lo que quiero hacer
Volverte
a ver para poderme reponer
Porque
sin ti mi vida yo no soy feliz
Porque
sin ti mi vida no tiene raíz
Ni
una razón para vivir
Hoy
me he levantado más animada. Sin saber por qué sonrío.
Es un buen presentimiento. Me doy una ducha, esta vez no me apresuro
por bajar. Cuando me estoy secando me miro al espejo. En él me
mira una chica con una sonrisa radiante. Me toco la cara y veo que es
verdad, estoy sonriendo, creo que hoy van a volver.
Busco
desesperadamente por mi armario, hasta que encuentro el vestido gris
que Ron me regalo el año pasado por mí cumple.
Luego
me intento pintar, pero el pulso me tiembla así que utilizo un
hechizo que Ginny me enseñó hace unos años. Miro
como he quedado y sonrío satisfecha.
Bajo
a comer y todos me miran sorprendidos, excepto Ginny que está
ausente.
Ya
a pasado la tarde y está oscureciendo, pero me niego a subir a
mi cuarto. He sido una tonta, como pude tener tantas esperanzas y
todo por un simple presentimiento. Tengo ganas de llorar. No aguanto
más sin poder ver a Ron.
De
repente suena la puerta. Me asusto, pero miro alrededor mía.
Ya todos se fueron a acostar. Estoy sola y sin saber por qué
tengo miedo.
Me
acerco con la varita en una mano a la puerta y pregunto
-
¿Quién es?- me maldigo por mi estupidez. Quizás
esperaba que me dijesen "Los malos y venimos a matarte"
-
Cartero, traigo algo que estaba esperando- me sorprendo porque es
plena noche.
-
¿Y qué es?- preguntó más nerviosa. Esta
vez cojo con más firmeza la varita.
-
Creo que es un pelirrojo deseando ver a la mujer más bella del
mundo- al oír esto abro la puerta atropelladamente.
Sé
que hice mal y tenía que haber tenido cuidado, pero fue un
impulso
Mis
ojos se fijan en el chico más guapo del mundo, que me sonríe
de una manera tan bella que todas mis penas desaparecen.
Luego
miro a su lado, mi mejor amigo también me sonríe, está
apoyado en Ron, con una mano apoyada en su estómago y con
expresión de dolor.
No
sé a quién ir, mi corazón dice que vaya a Ron,
pero mi cabeza que ayude a Harry.
Ron
parece darse cuenta de la situación en la que me encuentro y
con una mirada me indica que le ayude con Harry. Rápidamente
obedezco y paso el brazo de Harry por mi hombro, haciendo que el
chico se apoye en mí.
Cuando
le tumbamos en el sofá subo las escaleras corriendo. Lupin
sabrá lo que es mejor, también llamo a Ginny que baja
corriendo llena de emoción y preocupación.
Poco
después el salón vuelve a quedar vacío, me
encuentro de pie observando el fuego. Alguien me abraza por detrás,
pero no me asusto, sé que es Ron.
-
Me esperaste- dice en un susurro como agradeciéndomelo. Yo
sonrió y me giro para ver los ojos azules que me traen loca.
-
Claro, todo lo que quería era volverte a ver
-
Te eche de menos- dice con una sonrisa Ron, mientras posa sus manos
en mi cintura transmitiéndome un calor confortador.
-
Y yo a ti- me acercó y le beso mientras que con una mano le
cojo del cuello y le atraigo para profundizar el beso
-
Te amo
