Declaimer
Naruto y sus personajes son propiedad de Masashi KIshimoto…
Más allá del laberinto.
Capitulo uno
Miro con tristeza la fotografía sobre el escritorio, la imagen que había sido eternamente capturada era la de una chica que tímida y elegante sonreía.
La característica principal de aquella chica, además de un muy buen desarrollado cuerpo y timidez producto de la estricta educación que recibió, digna de la Ojou-sama que era, haciéndola todavía mas hermosa: eran aquel par de ojos blancos, aperlados, brillantes como la misma luna.
Habían pasado cuatro años desde que desapareció y a pesar que de acuerdo a la ley ya la daban por muerta, en su corazón aún permanecía la esperanza de que en algún lugar, ella… seguía con vida.
Si lo hubiese sabido, aquella tarde no la habría dejado partir. Recordando las últimas palabras y gestos que aquella chica le regalo.
Agitó la cabeza con fuerza, no era el momento de pensar de esa manera, no era su naturaleza darse por vencido. Cambiando sus pensamientos algo llego a él…
¿Cómo saber si es la última vez que veremos a una persona?
Y pensando mas profundo, habían quienes sufrían tanto o más que él: la familia de la chica, su padre que hasta ahora había gastado gran parte de la fortuna familiar buscando, desesperadamente, la forma de encontrar a su hija.
En comparación del sufrimiento del hombre, quien sufría la pérdida de un ser querido de su misma sangre y carne, quien le dio vida, la vio nacer y crecer, ver cada uno de sus días hasta sus diecisiete… hasta aquel trágico día.
No, no había forma de comparación a eso, él solo era un desconocido, que pocos días antes se convirtió en novio, sin tener el tiempo suficiente para acercarse a la familia que ahora estaba destrozada, ni siquiera estaba seguro de sus sentimientos por ella, en un principio solo la había aceptado para arrancarse del pecho su propio amor no correspondido,
Quizás era como sus amigos decían que seguía torturándose, pensando que podía haberlo evitado, si la hubiese acompañado a casa, si no hubiese rechazado la invitación a cenar y conocer a la familia… si hubiera…
El hubiera no tenía sentido…
Aunque así lo quisiera.
No podía cambiar lo que estaba hecho…
La culpa también era en parte al sentimiento de inferioridad que lo poseía cuando estaba a su lado…
¿Cómo podía ella haberse fijado en él siendo una Ojou-sama?
Ella era la heredera de los Hyūga una de las familias más nobles y ricas de todo Japón.
Él solo era un huérfano que había sobrevivido gracias a la herencia que sus difuntos padres le habían dejado.
Ella vivía en una mansión.
Él en un pequeño departamento apenas llegando a lo promedio
Ella era educada con esmero por los mejores maestros privados…
Lo único que les unía era la preparatoria a la que ambos habían asistido, él estaba en tercero cuando ella ingreso a primero saltándose un par de años, después de graduarse ingreso a la universidad de la misma preparatoria, sus caminos se habrían separado de no ser porque los campus estaban al lado y… a cierta persona.
En un descuido involuntario por divagaciones de pensamientos, de recuerdos la pila de libros sobre la mesa se vino abajo, quedando enterrado en bloques de papel que en su travesía al suelo mas de alguno lo había golpeado.
No lograba concentrarse para nada en el libro que debía leer, apenas había logrado memorizar algunas palabras después de muchos intentos.
No era un genio, para nadie era un secreto, era del tipo de persona que obtenía resultados con trabajo duro, no tenía talento más que para la literatura y ahora trataba de leer todos esos libros preparándose, para sentirse seguro de su nuevo trabajo de medio tiempo.
Había conseguido una plaza en una editorial.
Durante su último año de universidad y casi dándose por vencido; pensando que quizás sería mejor seguir con un post grado, le llegó la noticia, casi de milagro, que había sido aceptado, había pasado la entrevista de trabajo.
Un paso mas cerca de cumplir su sueño de ser escritor, aunque por ahora tenía q conformarse con ser editor.
—¿Qué tanto haces, dobe?—dijo desde la puerta del pequeño estudio improvisado un chico de piel muy blanca y cabellos azabaches, vestido de traje, muy formal y abrigo oscuro—Te he estado llamando desde ayer.
—¿Eh?—busco por debajo de aquellos libros hasta encontrar el aparato tan problemático, lo miro un momento y luego se rasco la nuca de manera nerviosa moviendo con sus dedos algunos de los cabellos rubios, esbozo una sonrisa aunque en aquellos ajos azules solo demostraban tristeza—Parece… que se quedo sin batería.
El azabache suspiro, esa actitud tan despistada de su amigo no había cambiado, ya sentía pena quien tendría que soportar sus descuidos.
—Hay que ver… ¿No te lo estarás tomando demasiado en serio?—viendo el completo caos en que se encontraba la habitación, libros, revistas, mapas, fotografías… un… diccionario ¿alemán/portugués? (N/A ¡¿Qué diablos hacia eso ahí?!...) embaces vacíos de ramen y muchas otras cosas difícil de describir— Solo serás el editor "ASISS-TEEN-TEE".
El chico pronuncio la palabra de forma lenta, la dolorosa palabra para luego continuar…
—…De manga…
El rubio se deprimió mas…
Naruto Uzumaki aún estaba lejos de su sueño… de ser escritor…
De cumplir su palabra…
De cumplir su promesa y encontrar a la chica de ojos blancos…
…
Epilogo:
Camino de manera apresurada, el exterior aun le intimidaba; pero la razón de su prisa nada tenía que ver con su temor. Forzosamente había salido a comprar algo de comer, porque su cuerpo así lo había pedido, exigido escandalosamente, se miró en el reflejo del cristal de la ventana, ignorando las figuras difusas que se mostraban frente a ella, llevaba el cabello recogido en una coleta alta, cabello rojo como el fuego, la blusa holgada blanca de manga larga y cuello alto, una gruesa bufanda alrededor del cuello, un pantalón deportivo violeta y unos tennis.
Ese era su reflejo.
Se acomodó las gafas notando las inmensas ojeras en su pálido rostro, recordando la razón por la cual tenía prisa.
Debía entregar el manuscrito sin falta, solo le quedaban quince horas para la fecha limite y le hacía falta terminar cinco páginas.
Dio la vuelta con la intención de cruzar la calle y vio al extremo opuesto de la calle, a una chica pelirrosa sentada en la banca de la parada del autobús concentrada y revisando algunas bolsas de compras.
Con esa imagen su mirada se perdió y mientras los autos seguían su camino por la calle en el bullicio de la avenida concurrida durante el atardecer, murmuró por lo bajo palabras que apenas salían de sus labios, tan bajo que nadie pudo escuchar ni siquiera ella… de no ser porque lo sabía… lo había visto con sus propios ojos, y el sentimiento que oprimía su pecho.
—Esa chica… va a morir…
…
Bien… ¿Qué les pareció?
¿Merece review?
¿Merece que la continué?
Bueno esta historia es un poco especial, por eso será contada de manera especial.
Como pudieron ver este capitulo es referente a Naruto, el siguiente será Sasuke.
Me preguntaba ¿Por qué los protagonistas se tienen que conocer en el primer capitulo? Y se me vino a la mente la idea de contar una historia como las de antes, donde se cuenta la vida de los personajes, su trayectoria para luego reunirse u cambiar sus vidas el uno al otro, seguir y adaptarse… no se… pero con esa idea nació la historia.
Un chico que busca a su novia desaparecida…
Una chica que tiene visiones y puede ver a los muertos…
y…
¡Ah! ¡No, eso será para el próximo capitulo!
(^_^)
Nos leemos…
(Si que soy mala)
DianaParu
05
