Mercy

Capítulo 0 En otro universo, un comienzo

¿Qué significa la palabra amigo?, ¿Qué significa estar enamorado?, ¿Por qué la gente muere antes que nosotros?...No había experimentado un dolor tan grande desde la primera vez que … Desde la primera vez que llore cuando quede totalmente solo, a una corta edad la fatalidad, un golpe de mala suerte; puedes llamarlo como quieras, lo que haya sido me dejo a merced del mundo, un mundo que no me mostro compasión, que no me enseño lo que significaba amor, de lo cual aprendí solo una cosa: Sobrevivir.

Como pude logre arreglármelas para escapar, deje atrás todo aquello que me hizo sentir feliz, mis recuerdos, mi niñez; niñez que se vio truncada por una ola de sangre que se alzó como altas y empinadas cumbres. Ese mar de sangre me arrebato mi familia, mi estabilidad.

A partir de entonces no había noche en la cual mi letargo fuera violentamente interrumpido por la acción de aquellos malos recuerdos, que tomaban vida una y otra vez « Desde aquel día no volví a experimentar ni un momento de paz y en muchas ocasiones me vi en la penosa necesidad de pensar una serie de estupideces » Los primeros 50 años la pase completamente solo…Al borde de la locura, pero, fue esa misma locura la que me hizo mantener de un modo extraño mi cordura; sé que es algo complicado de explicar, pero incluso también pude ser fácil.

Como pude sobreviví, y al cumplir mis primeros 100 años de vida decidí entonces que era tiempo de comenzar a explorar el infinito universo, cosa que no me costaría ningún esfuerzo.

Comencé a ganarme la vida haciendo "Favores"; como un caza recompensas. Matando maleantes y cobrando recompensas «Era un trabajo bastante lucrativo; puedo decir que mi trabajo consistía en limpiar el universo de toda esa escoria, de malvivientes y asesinos; igual no era algo completamente heroico ni loable, pero me hacía sentir bien conmigo mismo y mantenía mi mente distraída para no pensar en lo amargo que se sentía estar solo »

Al cumplir 200 años, ya me había labrado de una reputación, tenía el respeto, la admiración y por supuesto la envidia de muchos compañeros del gremio. A mí no me importaba mucho que ellos dijeran cosas buenas o malas de la forma en la que trabajaba «Que si mis métodos salían de lo común, que si no seguía el protocolo, que si mi conducta no era ética; etc.», pero pronto sentí ese enorme peso…Seguía tan solo, como el día en que mi apacible niñez había sido bruscamente truncada. Lo único bueno que se me ocurrió fue alejarme por un tiempo de aquella nube de violencia y buscar algún lugar, un planeta lo suficientemente tranquilo para pensar sobre la vida,

A miles de años luz se encontraba el planeta más hermoso que había visto jamás, azul; tan celeste como los diamantes de mi tierra natal, en la vida vi tanta perfección, tanta belleza y tanta vida brotando. Fue algo maravilloso tocar con mis palmas la tierra, tan fértil, aromática; sin embargo no era eso lo que llamo más mi atención, fueron las criaturas, sus humildes criaturas que vivían despreocupadas. Un pequeño gesto de envidia me invadió el corazón «Ellos vivían tan felices, mientras que a mí se me negó el pequeño deleite de siquiera sonreír por una vez» y fue cuando lo escuche, un sonido que no sabía de donde venía, parecía como si se balanceara a través de las copas de los árboles. Algo extraño, casi sobrenatural me atrajo a buscar la raíz de aquel sonido, pero nada paso.

Cuando la noche cayo me tumbe debajo de un árbol y contemple lo hermoso del cielo, las estrellas tintineaban exaltadas. Este mundo tiene una magia particular…Justo lo que buscaba; un apacible lugar donde pensar, tanto, para incluso llamarlo: Hogar