Love Live Sunshine!
El avatar de fuego
Disclaimer: Love Live! Pertenece a su creadora Sakurako Kimino y a ASCII media works junto con Sunrise.
NdelA: ¡Hola! Antes de que me reclamen, estoy escribiendo la continuación de Wildo y de deber de Familia, solo que me di un respiro para publicar esto que ya tenía escrito hace algún tiempo. Tenía la idea de hacer un crossover entre mis dos cosas favoritas, Avatar y Love Live Sunshine.
Fue así que surgió esto. Originalmente serían pequeños sketches sobre ilustraciones pero lamentablemente no se pudo concretar aún. Aún así no hay querido dejar esto en el olvido y voy a ir subiendo cada cierto tiempo los pequeños trozos de esta historia.
Ojalá les guste aunque sean pequeñitos.
De manera general les puedo decir que va sobre Chika y su team Avatar.
— o —
Un fuerte estruendo resonó por toda la casa e incluso se había escuchado a varios cientos de metros. Una gran columna de humo se levantó por los aires y un vapor denso llenaba el ambiente. El olor a chamuscado se podía percibir al estar cerca del lugar.
—¿Qué es lo que paso aquí? —una asombrada y enojada Shima adolescente irrumpió en la sala principal de la casa la cual estaba completamente destruida.
—¡Es culpa de Chika! —de debajo de algunas ruinas carbonizadas emergió la cabeza tiznada con la cabellera humedecida de una pequeña niña de alrededor de unos siete años alzando las manos para mostrarse inocente.
—¡Eso no es cierto Mito-oneechan! —del otro lado de la habitación surgió una segunda figura infantil de alrededor de unos cuatro años con sus ropas de igual manera chamuscadas y mojadas—. ¡Tú empezaste! —la chica de cabellera naranja señaló a su hermana.
—¿Quién me va a decir lo que sucedió? —Shima se cruzó de brazos esperando una explicación plausible de todo el desastre provocado por sus traviesas hermanas menores.
Ambas niñas se levantaron sacudiéndose la ropa. Shima pudo percibir los rastros de agua y vapor caliente que no tendrían razón de ser puesto que aquello era un hogar de maestros fuego. Miró a una y luego a otra. Mito se notaba sorprendida a pesar de su molestia y Chika sólo estaba avergonzada con la cabeza agachada.
—¿Chika-chan? —usó un tono suave y comprensivo para ayudar a la menor de las hermanas a hablar.
La joven pelirroja se llevó una mano a la nuca sin encontrar las palabras que necesitaba y sólo atino a sonreír nerviosa.
—Yo… no sé, sólo pasó… —mantuvo su posición apenada pero ahora sosteniendo uno de sus codos con una de sus manos.
—¡Ella usó agua control para repeler mi ataque de fuego! —Mito exclamó señalando a su hermana y el evidente charco de agua esparcido por todo el suelo.
—Chika no pudo haber usado agua control, Mito-chan, ¿diganme la verdad? —endureció un poco su voz, sólo que no demasiado, no daba crédito a aquella aseveración.
—¡Es verdad! —prácticamente gritaron las dos al unísono.
—Si eso es así, ambas están castigadas y deberán limpiar este desastre de inmediato —las regaño—. Saben que está prohibido usar fuego control o agua control o cualquier elemento control dentro de la casa —las dos hermanas asintieron lamentándose amargamente por la tarea que les estaba siendo impuesta—. Será mejor que empiecen de inmediato, mamá está por llegar del trabajo.
Chika y Mito se miraron un momento para enseguida sacar la lengua en un gesto de desagrado y a regañadientes comenzaron a limpiar su desorden.
Shima estaba preocupada, aunque se había mostrado renuente, las evidencias no podía ignorarlas. En cuanto sus hermanas comenzaron a arreglar su desastre, ella salió de la casa para ir a buscar consejo con el sabio del pueblo. Un evento como el uso del agua control en una familia de la nación del fuego no era para ser omitido.
—¿Será posible que…? —pronunció en voz alta tratando de encontrarle una lógica a sus sospechas.
Su corazón estaba acelerado, era posible que un nuevo Avatar estuviera por surgir nuevamente.
