Decisión
Uzumaki Naruto caminaba hacia el despacho de Tsunade, estaba bastante contento porque había logrado por fin dominar la técnica del rasen-shuriken. Le había costado un poco recuperarse de la herida de su brazo aún contando con la rápida regeneración de Kyuubi. Ahora era más fuerte, tenía esperanzas, tal vez ahora si pudiese traer a Sasuke de vuelta. Estaba llegando al despacho de la Hokage cuando oyó una conversación bastante interesante.
—¡¿Cómo?! —Preguntó la sannin exaltada e incrédula— ¡¿cómo puede ser que Sasuke haya matado a Orochimaru?! —preguntó la rubia.
—Así es señora, a mí me liberó de la prisión de Orochimaru ahora mismo Sasuke ha reclutado a los mejores ninjas de los que disponía esa serpiente… uno de sus compañeros me pidió que difundiera la noticia…
—Tsk, esto es malo, ese Sasuke se ha vuelto demasiado poderoso… —murmuraba Tsunade.
Naruto no necesitó escuchar más, ¡Sasuke había vencido a Orochimaru cuando él mismo ni siquiera había podido matarlo con las cuatro colas! Se marchó a su casa y en su habitación pensó seriamente que hacer. Si quería traer a Sasuke de vuelta esta era su oportunidad. Naruto sacó su mochila y empezó a meter las cosas que necesitaría, decidió no avisar a nadie para no ponerlos en peligro pero escribió una nota y la dejó sobre su cama. El rubio salió de su casa caminando tranquilamente intentando no parecer sospechoso cuando se encontró con Shikamaru.
—¡Ey Naruto! —Saludó este fumando un cigarrillo— ¿A dónde vas con esa mochila? ¿Tienes una misión?
—No, ¡me voy a entrenar a las afueras dattebayou! —dijo con su típica sonrisa y entusiasmo.
—Qué pena, con motivo de tu llegada todos queríamos hacer una fiesta este fin de semana, entre las misiones y demás no te hemos dado la bienvenida adecuadamente
—¡Jajaja! —Rió contento— no hace falta-ttebayou, vuestra amistad es más que suficiente jeje —dijo algo ruborizado.
—Igualmente te la haremos, quizá la semana que viene —insitió el superdotado.
—Bueno si insistís tanto… me dejaré hacer-ttebayou —dijo rascándose la nuca con su risa característica.
—¡Que mal! Llego tarde, Temari me va a montar una… —dijo Shikamaru mirando la posición del sol— que problemático, hasta luego Naruto.
—¡Adiós dattebayou!
Naruto y Shikamaru echaron a andar cada uno por su lado. Shikamaru se quedó algo confuso, Naruto no había comentado nada sobre Temari y él. Aunque no lo fuese parecía que hablara de una cita "demasiado problemático" pensaba Shikamaru. Naruto estaba raro y él lo había notado. Así pues, nuestro protagonista de ojos azules se encaminó sin saber muy bien a donde. Lo primero que haría era ir a la antigua guarida de Orochimaru, quizás allí encontrase una pista de donde se encontraba el moreno en esos momentos.
Sasuke se despertó de mal humor, otra vez ese sueño, desde que se había encontrado con Naruto no paraba de soñar con él; recordaba sus días en la academia, la primera misión, el examen de chuunin, su traición a Konoha, la pelea con Naruto en el valle del fin y su último encuentro. La última imagen que tenía de Naruto era este llorando de cuclillas en el suelo al ver que Sasuke se marchaba con el jutsu de teletransporte de fuego. Se metió en la ducha y dejó que el agua caliente le relajase. Últimamente estaba estresado, Karin no paraba de acosarle cuando estaban a solas, ella no le interesaba pero necesitaba sus habilidades. No tenía más remedio que aguantarla si quería matar a su hermano. Uchiha Itachi, la razón de su existencia era eliminar a ese ser de la faz de la tierra, aunque ahora tenía también en mente acabar con ese otro Uchiha del que le habló su hermano la noche de la masacre. Se vistió como siempre y entró en la cocina de la guarida del norte, se sirvió un vaso de leche y se sentó en el sofá. Al poco rato entró Juugo con cara seria.
—¿Qué quieres? —preguntó Sasuke con su tono indiferente de siempre.
—Akatsuki ha comenzado a moverse —contestó sentándose en frente del Uchiha— uno de mis espías me acaba de confirmar la noticia que dentro de poco intentarán hacerse con el Kyuubi, ya tienen a todos los demás bijuus.
—¿Por qué me cuentas eso? —preguntó molesto. Naruto siempre tenía que estar en todo— ya sabes que solo me interesa Itachi.
—Lo sé, por eso te lo digo, Itachi va a ser uno de los encargados de atrapar al Jinjurichi. ¿Sabes lo que eso significa verdad? Tenemos que mover pieza —Juugo era con el que Sasuke consideraba que se podía hablar, ya que era el único con algo dentro de la cabeza, aunque a veces se volviese inestable.
—Continúa
—He estado pensando… Tú vas detrás de Itachi, Itachi de Naruto y Naruto va detrás de ti. La conclusión es que si tú estas con Naruto, eso significa que tarde o temprano te encontrarás con él. Deberías traerlo —aconsejó.
—Déjame considerarlo —dijo Sasuke pensativo
—Estaré en mi cuarto —le avisó el grandote.
Sasuke meditó durante varios minutos el plan que le había ofrecido Juugo. Sabía que Naruto estaría dispuesto a hacer cualquier cosa por él pero… Sasuke no se quería arriesgar a estar con el kitsune porque sabía su influencia en la gente. Tenía miedo de volver a tener lazos con ese rubio y luego volver a romperlos. Después de todo no pudo matarle la primera vez que lucharon en serio y tampoco la última vez que se vieron. Recordó en esos momentos las palabras de Kyuubi: "No mates a Naruto, podrás sobrevivir pero…". ¿Por qué habría dicho eso el demonio? ¿No era su intención salir del cuerpo de Naruto? ¿Entonces porqué lo protegía?
Salió a despejarse un rato caminado cerca del mar. Se encontraban en la guarida del sur del país de la hierba. Un rato más de cavilaciones le llevó al único plan que realmente le convenía. Debía conseguir que Naruto se marchase con él, debía conseguir vengar a su clan y haría cualquier cosa para conseguirlo. Decidido se marchó sin avisar a nadie, seguramente Juugo ya conocía su respuesta y por eso se había ido a encerrar a su habitación. Caminó por los bosques en dirección a la antigua guarida, donde se había encontrado con Naruto y Sakura. Si el rubio se había enterado ya de lo de Orochimaru, seguramente ese sería el primer sitio donde le fuese a buscar.
Naruto caminaba distraídamente, acababa de llegar a la guarida de Orochimaru donde se encontró con Sasuke. Entró en los pasillos con los sentidos agudizados para detectar las trampas que aún se encontraban en la derruida excavación del suelo. Llegó a una habitación que tenía la puerta entornada. Sasuke sintió la chacra característico de Naruto en el momento en que piso el suelo rayado. Se tumbó en la cama de una de las habitaciones y esperó su llegada. Después de tres minutos un chico entraba por la puerta sin percatarse de su presencia, iba directo a la estantería que estaba frente a la puerta.
—Seguro que aquí hay información de las guaridas de esa serpiente-ttebayou —susurró Naruto para sí ojeando los libros polvorientos.
—Ahí no hay nada de eso, son todos libros de lectura dobe —dijo Sasuke dejando de ocultar su presencia con el jutsu de ocultación en las sombras.
—¡AAAAH! —gritó Naruto asustado girándose y viendo a duras penas a un Sasuke mirándole.
—¿Qué haces aquí? —preguntó Sasuke en su tono malhumorado de siempre.
—¡¿Cómo que qué hago aquí dattebayou?! —Preguntó aún sorprendido, no esperaba encontrar tan fácilmente a Sasuke— ¡Vengo a llevarte de regreso a Konoha Sasuke!
—Hm. —emitió chulesco— ya lo veremos —dijo retándole.
Al momento Naruto había creado ya como veinte Kagebunshin y Sasuke los eliminaba en dos segundos sin despeinarse.
—¿Esto es todo? —preguntó Sasuke con arrogancia.
—¡Ahora verás dattebayou! —gruñó Naruto.
Creó tres réplicas y comenzó a crear el Rasen-shuriken. Un silbido invadía la habitación, como el viento cuando silva en invierno. Sasuke activó su Sharingan. Naruto mandó a los clones a distraer a Sasuke y luego le atacó a las piernas, pensaba llevarse a Sasuke por la fuerza.
—¡Un reemplazo! —Exclamó viendo un Sasuke de barro escurrirse— ¡mierda!
—Técnica de la decapitación suicida —unas manos agarraron a Naruto de los pies y le hundieron en la tierra. Al segundo un ¡puf! Le hizo desaparecer— ¡kagebunshin! —se sorprendió. Naruto le iba a golpear con el chacra viento de sus manos en el cuello, para dejarle inconsciente, cuando Sasuke se giró— katon, hosenka no justu (técnica ígnea fuego del fénix)
Naruto no podía apartarse de la trayectoria del fuego y crear un kagebunshin para que lo recibiese, era como si no hiciese nada ya que los daños los sufriría igual y gastaría chacra, tampoco podía usar su elemento viento porque avivaría el fuego. El fuego se apagó antes de rozar a Naruto pero dentro de este había unos shurikens que clavaron al kitsune contra la pared [A: clavaron la ropa no a él].
—Naruto… sabes que no puedo volver a Konoha, aún si me llevas por la fuerza lo que harán será tratarme como un ninja exiliado que soy y me matarán. No podré matar a mi hermano ni resurgir mi clan, no seré feliz ¿es eso lo que quieres? —preguntó Sasuke con un deje semitransparente de tristeza en su voz.
—Yo… no… —Naruto no sabía que decir— por supuesto que no quiero eso, yo lo que quiero es que vuelvas a ser el Sasuke de antes, que hagamos misiones todos juntos, nos hagamos fuertes… y que vengues a tu familia, pero no de este modo-ttebayou —contestó mirando al suelo— yo te ayudaré en lo que sea, ¡haré lo que sea! Solo pídelo y… —su voz fue perdiendo volumen en las últimas palabras.
—Dime Naruto ¿estás dispuesto a dejarlo todo por mí? ¿Ésas dispuesto a venir con migo? ¿Estás dispuesto a mancharte las manos por mí? —preguntó Sasuke con voz fría y algo burlona. No creía que ese dobe cumpliese sus promesas.
—Lo que sea Sasuke… —contestó sinceramente Naruto.
Mikochan92:bueno pues aquí está el primer capítulo a ver que os parece. La historia ya la tengo casi terminada en mi pc asi que no creo que halla retrasos como enDestino, espero que os haya gustado y me deís vuestra opinión. Gracias y hasta pronto!
