Hola a todos, quería decir que los personajes no son mios, aunque creo que pondré alguno propio, jeje. Los personajes de esta historia pertenecen a J. , y alguno a Cris Morena, la trama es mía, pero cogí partes e ideas de la serie Casi Ángeles de Cris Morena, espero que os guste. Creo que hay bastantes faltas de ortografía, no soy buena con la ortografía. Aunque pase el corrector
Ahora si os dejo con la historia.
1. La dolorosa verdad
Hermione se encontraba en su dormitorio llorando, no podía dejar de pensar en lo que había hablado con sus padres y con Dumbledore, es que no podía ser, no entendía nada, ¿era una broma de mal gusto? Ella no era tonta y siempre se había preguntado, que si sus padres eran dentistas, ¿como podían permitirse vivir en esa mansión? vamos, que un dentista no era exactamente millonarios, pero sus padres parecía que si, siempre se hizo preguntas al respecto, pero nunca le dio demasiada importancia.
Incluso ahora que lo pensaba, se daba cuenta que aveces parecía que sus padres le ocultaban algo, como aquel día que llego a su casa criticando a su profesor de pociones, Severus Snape, su padre la castigo, le dijo que por muy estricto y serio que fuera su profesor no había que criticar, que ella no sabia que podía haber sucedido para que ese hombre fuera así, incluso vio tristeza en los ojos de su padre. Claro que defendía a Severus Snape, ERA SU HERMANO MAYOR, Hermione no podía creerlo, su profesor de pociones era su tío, era algo ilógico, el la odiaba...
Flashback..
- Hermione,-le sonrío su madre desde la puerta de su dormitorio-¿podrías venir al salón? tenemos algo que contarte.
Hermione bajo las escaleras, y sentado en el salón estaban sus padres y...
- Profesor Dumbledore?
- Si Hermione, soy yo. ¿que tal el verano?
- Pu..es bien..-susurro la muchacha- ¿que hace usted aquí?¿le paso algo a Harry?
- No tranquila,-le sonrió- estoy aquí por pedido de tus padres, en una semana cumples los 17 años, la mayoría de edad mágica, por eso antes, debes saber algunas cosas..-sonrió
- Hermione,-hablo ahora su padre- sientate por favor...
Así fue como sus padres le contaron la historia familiar.
Resulta ser que su padre no se apellidaba Granger, sino Snape, George Snape, hermano pequeño de Severus Snape. Su madre era Jane Elisa Mcarty, proveniente de una vieja estirpe de los brujos mas poderosos del mundo, descendientes directos de merlín, su familia era la mas rica del mundo mágico.
Le explicaron que ambos se habían conocido en Hogwarts, su madre era una Gryffindor y su padre un Slytherin, se conocieron y se enamoraron. Cuando su madre cumplió los 17 años su madre le explico que el reloj que tenían en la torrea de su mansión y el que había en la torre mas alta de Hogwarts eran portales, esos portales eran la entrada a Eudamon, un sitio donde originan los grandes poderes, desde hay los grandes poderes cuidaban que el bien y el mal estuvieran en paz, pero hacia siglos un brujo oscuro consiguió entrar y descontrolar un poco las cosas. los grandes poderes se comunicaron con merlín y le pidieron ayuda. Así fue que decidieron que los descendientes de merlín serian los protectores del portal. El portal quedaría sellado y solo podría ser abierto por los descendientes de merlín. Cada descendiente tuvo una misión puesta por los poderes para que la paz siguiera en el mundo.
Cuando sus padres se casaron, voldemort se quiso hacer con el poder de la familia Mcarty, Jane estaba embarazada, y según una profecía su hija seria también un ángel de Eudamon, seria el ángel que ayudaría al niño que vivió a derrotar a voldemort, por eso sus padres fingieron su propia muerte, con ayuda de Dumbledore, el portal protegía la mansión, por eso era indetectable sin ayuda del hechizo fidelio, nadie con malas intenciones podía llegar a ella, solo gente que estuviera invitada y que no deseara ningún mal a la familia.
A Hermione le costaba digerir todo esto y su única reacción fue salir corriendo para su habitación y echarse a su cama a llorar.
Fin Flashback
- Herms, ¿puedo entrar?-pregunto el profesor Dumbledore entrando al dormitorio.
- Ya esta dentro,-susurro ella.
- Hermione, entiendo que todo esto para ti es una sorpresa, pero entiende a tus padres, no te podían contar nada porque sabían que era necesario que fueras a Hogwarts a estudiar, si sabias la verdad Severus o alguien podría enterarse por la legeremencia, y aunque el no lo quisiera, voldemort podría descubrirlo si bajaba sus defensas. Nadie debía saber quien eras realmente, y no deben saberlo aun, al menos hasta que hagas tu viaje, te den tu misión y empieces a obtener los poderes de merlín y del portal. Piensalo así, ya de por si eres la bruja mas grande que tuvo Hogwarts en generaciones, imagínate cuando madures y tengas tus poderes al 100 por 100, seras la mas grande, según lo que se, el portal te escogió para que seas un ángel, eso dice la profecía, según las leyendas, cuando el portal escoge un ángel, este recibe los poderes de su antepasado, merlín y aparte recibe una parte de los poderes del portal. Tu madre recibió su herencia por parte de merlín, pero tu seras grande, tu seras un ángel de Eudamon, tendrás una tutora que te ayudara en tu viaje, y podrás ayudar a Harry a destruir a voldemort.
- Lo se profesor, se que lo que me espera es algo muy grande e importante...pero,¿y si me queda grande la misión?¿si los poderes de Eudamon escogieron mal y no debería ser la elegida?
- Es normal que tengas miedo, Hermione, pero se que lo conseguirás, ya eres grande sin esos poderes, solo piensa en añadirle un extra,-le sonrió el profesor a la joven.
- ¿Y que es eso de una tutora?-pregunto Hermione
- Yo seré tu tutora..-sonrió una mujer muy parecida a su madre
